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Suspiró exhausta al instante de haber salido del salón,caminó por los extensos pasillos con su bolso en manos y llegó hasta la salida. Sacó su celular de su bolsillo y marcó un número,y esperó a que respondieran mientras veía alrededor.
-¿Dónde estás?-responde la otra línea.
-En la salida principal-responde mientras bajaba las escaleras de la entrada.
-¡Te dije que no saldría por atrás!-se oye decir en la otra línea.
-¡Lo siento!-se excusa otra persona en la segunda línea.
-Vengan rápido por favor,tengo hambre-suplicó.
-¡Máxima potencia!-grita la otra para luego cortar la llamada.
Camila se cruzó de brazos mirando a la calle,esperando,y unos segundos después un auto negro llega con rapidez frente a ella,sonrió entrando al instante.
-¡Hola!-dice cuando se acomóda.
-Hola hola-sonríe Millie volteándose del asiento del copiloto.
-¿Por qué diablos creíste que saldría por atrás?-le pregunta la latina al chofer.
-¡Lo siento! Es que no sabía-se excusa Jacob mientras manejaba el vehículo.
-Tu nunca sabes,¿recuerdas esa vez que se cayó de las escaleras porque vió un mosquito?-ríe Camila.
-¡Ayy si!-comienza a reír Millie también.
-¡Oh vamos! Eso fue hace años-bufa Sartorious.
-Cuando teníamos 15,ahora tenemos 17 y sigues igual de menso-se burla Camila negando.
-Oh ya dejalo-sonríe Millie-Y dime ¿cómo fue tu día?-le pregunta a la del asiento trasero.
-Ugh,exhausto. Nos dejaron un proyecto de la mieerda-se queja cerrando los ojos.
-No sé por qué decidiste ir a la universidad,somos famosos-dice Jacob egoísta.
-¡Porque! no voy a vivir de mi fama-dice Camila con obviedad-Además mami y papi me matarían si no voy-dijo con miedo.
-Bueno pero ¿dos carreras? Eso es demasiado-niega Millie con sus cejas alzadas.
-Me gusta la forografía,y el diseño de interior ¿por qué no las dos?-sonríe divertida,la castaña le sigue al igual que Jacob.
El camino siguió entre bromas y risas,como de costumbre desde hace años. Nunca se separaron,nunca se mudaron y siguieron juntos,yendo a alfombras juntos y a premios,era igual que hace dos años,solo que ahora están más grandes.
-¡Llegamos señorita!-avisa Jacob parando el auto frente a su casa.
-Uff ¿quieren entrar?-ofrece mientras abría la puerta.
