Capítulo 10

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   Raven se encontraba en la cocina buscando algo de beber, ya que su amiga Clarke había hecho un Dynamo y desapareció en un pestañeo de parpados. Los barriles de cerveza estaban casi vacíos, aunque no iba a negar que estaba buscando algo más fuerte. En ese instante la abordó por la espalda Octavia:

— La amiga de la rubia remilgada ¿verdad? — Dijo también contentilla— soy Octavia, amiga de Lexa.

Raven alzó una ceja. Había llamado a su amiga rubia remilgada, debería molestarse, pero luego la vino a la mente una imagen de Clarke picada, si hubiera escuchado esas palabras y rompió a reír, esa noche su amiga había sido de lo más cómica:

— Prefiero llamarla finolis, no la gusta que le llamen rubia— le tendió la mano— Raven Reyes, mucho gusto en conocerte.

Octavia se puso a su lado y se apoyó en la encimera. Los ojos castaños de Raven no pudieron resistirse a recorrer el cuerpo de aquella chica. Lexa era explosiva, pero Octavia no se quedaba atrás, eso no había ni qué dudarlo. La amiga de Clarke era descarada, no hizo por ocultar aquel detalle que hizo reír a Octavia:

— Ahora mismo acabo de ser devorada con tu mirada.

— Y si me dejas te devoraría de otra forma.

En ese momento Raven se dio cuenta de lo burra que había sonado. Menos mal que Octavia se lo tomaba con humor, pues no dejaba de reír:

— ¿Siempre eres tan directa?

Raven se encogió de hombros:

— Nunca sabes lo que te puede reparar la vida, ojos verdes— le guiño un ojo — ¿Por qué perder el tiempo?

Octavia se acercó a Raven, le quitó el vaso y se humedeció los labios. Dejándola boquiabierta mientras que fijaba la mirada en esos labios sexys, redujo aún más la distancia, encandilándola con movimientos seductores:

— Sabes que me dice eso de ti ¿Raven? — le entregó el vaso— Que eres demasiado promiscua— negó con la cabeza— y eso no me atrae.

Durante los primeros segundos, Raven se sintió molesta, pero, ya que Clarke la contó los jueguecitos que se llevaba Lexa. Parecía que Octavia iba por la misma línea. La diferencia, es que ella no era tan cortada como Clarke. Rompiendo a reír. La amiga de Lexa estaría buena, pero no iría detrás de ella. Al contrario, jugaría aún más fuerte, alzó su mano y pasó el dedo gordo por la comisura de sus labios apartando un poco de espuma, y de forma sensual se lo llevó a la boca para chupárselo dejando ver un poco su lengua, lo hizo de una forma tan erótica que provocó que Octavia tuviera que tragar saliva:

— Me llamas promiscua. Vamos cariño, te has acercado y has intentado provocarme— se apartó de ella y la miró de forma picarona— yo no soy tan inocente como Clarke, llevó jugando al mismo juego que tú desde que me crecieron los pechos.

Se quitó la camiseta, sin importarle que todo el mundo la mirara, bueno si, buscaba la atención de una y ya ves si lo consiguió. Los ojos de Octavia recorrieron cada centímetro de piel de la morena:

— Hace calor— se pegó a su cuerpo— Vamos chica sexy, peguémonos un baño.

Octavia sonrió de forma animal. Esa chica era una auténtica sorpresa:

— Te sigo, chica caliente.

Ambas se tiraron a en la piscina, ignorando quien pudiera estar en ella, Raven nadó hasta un borde, girándose para mirar de forma tentadora a Octavia. Que rápidamente nadó hasta aprisionarla entre el bordillo y su cuerpo. La amiga de Lexa se acercó para robarle un beso, pero Raven sensualmente apartaba sus labios en el momento que los rozaba. Así un par de veces, hasta que de forma ágil se escapó de su prisión y le susurro en el oído:

Átame  (Clexa AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora