DennisMe aseguré de alejarme lo suficiente de Zac y caminé más lento. ¿Como le cabía en la cabeza que lo iba a dejar venir a mi casa? Nunca sé lo que puede pasar ahí y es mejor mantenerlo alejado.
Me detuve en frente del edificio de apartamentos. El mío tenía la luz de la sala encendida, lo que significaba que ambos de mis padres estaban ahí. Tragué saliva.
Cada vez que subía un escalón hacia el tercer piso, mi cuerpo pesaba más.
A paso lento, llegué hasta la puerta principal. El apartamento numero veintiuno del tercer piso.Abrí la puerta lentamente y pasé. Mi papá estaba viendo la televisión mientras comía un sándwich y mi mamá estaba del otro extremo leyendo. Ninguno dijo nada, ninguno de los dos levantó la mirada y yo tampoco lo hice. Fui hacia mi habitación.
Dejé sobre mi escritorio el regalo que Zac me había dado. Aun no lo había abierto.
Me pesaba solo en pensar en mañana. No podré ver a Zac ya que me tocaba trabajar en la biblioteca, además de que él tiene sus prácticas de fútbol. Estoy seguro que mañana será un día de mierda, así que no abrí él regalo. Lo abriría mañana, cuando las cosas estén yendo mal. Esa caja seria mi pequeña salvación y mi única forma de estar cerca de Zac.
Guardé el obsequio en un cajón y me di un baño antes de prepárame para ir a dormir.Me gustaba irme a dormir temprano, así pasaba más tiempo inconsciente sobre el mundo real y mi única preocupación eran las pesadillas. Últimamente había estado funcionando bien, ya que había logrado dormir una hora de más, el problema es que me tenia que levantar temprano por la escuela y eso le quitaba el encanto al sueño.
Me terminé de bañar; me vestí, cepille mi cabello y dientes, mi cama estaba lista para recibirme con sábanas recién cambiadas y frescas, no volvería a saber de este mundo hasta que sonara mi alarma, o eso creía.
Escuché gritos desde la sala donde estaban mis padres. No era la primera vez, y tampoco sería la última. Estaba tan acostumbrado a esto que mi única preocupación era que los vecinos podrían escuchar en las no tan delgadas paredes.
Había discusiones de muchos tipos: en algunas había gritos y maldiciones, en otras objetos lanzados y portazos y en otras...Escuché los gritos de mi madre rogando ser soltada. Me quedé en shock por unos minutos después escuché un golpe y salí corriendo. No era la primera vez.
—¡NO TE ATREVAS A TOCARLA DE NUEVO!—otra vez lo mismo, de nuevo la misma charla (si es que se le podía decir así).La cara de mi madre estaba roja e hinchada, su labio inferior morado.
Miré a mi papá con la mejor cara de odio puro que pude hacer. Yo estaba en medio de él que se encontraba parado y amenazante y mi madre sollozando en el suelo.
—¡A mi nadie me dice que hacer! ¿Entiendes? ¡No te metas en los asuntos míos y de tu mamá! ¡Siempre tiene que ser lo mismo con ustedes dos pedazo de animales! ¡En esta casa se hace lo que yo diga! ¿Entendido? Yo soy el hombre de la casa.—¿Hombre?—reí seco. No me causaba gracia nada de esto pero tenia que hacerle ver que no tenía miedo, aunque dentro de mi estaba aterrado como un niño pequeño—¡Eres todo menos un hombre! ¡Vete a demostrar que tienes huevos con alguien más que no sea una mujer! ¡De seguro no lo haces por que no tienes!
Mis labios comenzaron a temblar después de que esas palabras salieron de mi boca. Jamás le había contestado de esa manera a mi padre, pero ya estaba harto de esta mierda.
Mi papá tensó la mandíbula, se aproximó a mi y me dio un empujón que me hizo caer al suelo, pero me levanté de inmediato y lo miré a los ojos. Él solo se fue a su habitación y cerró de un portazo.Miré a mi madre, que estaba aún en el suelo llorando.
—Dennis...por favor—sollozó—No te metas con tu padre de nuevo, no...le faltes el respeto así.
La miré molesto y me fui a mi habitación. Me encerré en mi baño y lloré.
Odiaba que mi madre fuera así. Aguantando todo y sin pedir ayuda, lo peor de todo es que yo era igual.Jamás podría enseñarle esta versión de mi, este pedazo de mi vida, a Zac ni a nadie.
Piper 🌙
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Depressed (Yaoi/Gay)
Romance¿Cuánto sabes de la vida de las personas? Zac y Dennis se gustan desde niños, ellos lo saben pero no son nada. Zac nota que algo está mal con Dennis. Trata de apoyarlo y comprenderlo pero no encuentra una solución para traer de vuelta al Dennis d...