Jhon

Capitulo 37

-Quiero que te des cuenta de que ya no estás sola, me tienes a mí. Y prometo que siempre seré tu amiga. Ahora podrás ver todo nublado, pero pronto la luz llegara a tu vida. Y yo estaré para ayudarte, dice Lizzy mientras me abraza –No todo está perdido.

-Es hermoso todo esto. Tenerte a ti, me he sentido tan sola, y ahora viene ese pequeño ser que no tiene la culpa de nada. Pero estas tu... Gracias por enseñarme que no todo está perdido, o al menos eso quiero creer.

-Nada está perdido, Jhon volverá a ti. Estoy segura, después de tanto, es muy difícil creer que no terminen juntos.

-De eso no estoy tan segura. Pero ahora no quiero pensar en él, no quiero que su recuerdo me atormente más. Y si no me perdonó que me acosté con Tom, menos que vaya a tener un hijo de él.

-El destino se encarga siempre de unirlos. Dice al señalarlo.

Y ahí estaba, caminando por la playa. Arrastrando sus pies por la arena. Mis manos empezaron a temblar, sentí un revuelco en mi estómago. Tenia miedo, miedo de que no me pudiera sostener delante de él. Respire profundo, y me acerque un poco mas a donde el estaba.

Narra Jhon
Mis pensamientos me estaban destruyendo poco a poco. Tenía que dejar de arruinarme aún más. No podía continuar de esta manera, no era sano para mi. Ni para las personas que me rodeaban, solo quería desaparecer un instante y volver a cuando todo era mas facial, cuando estaba con Sharol, y aun si me dijeran que nuestra historia terminaría así, me arriesgaría a vivirla de nuevo, o cuantas veces fuera necesario. Fui aquella playa donde le había pedido a Sharol que fuera mi novia. Estaba caminando un poco más allá de las orillas, arrastraba mis pies en la arena, y estaba cálida. Levanto mi mirada, y veo a Sharol. Pensé que podía ser una ilusión, mi mente engañándome. Pero se acerco a mi y no me pude resistir y la abrasé tan fuerte como pude.

De verdad necesitaba sentirla cerca de mí. Sentir su aliento mentolado rozando mi piel. -Hola... Digo al separarme de ella.

-¿Como estas? Pregunta, pero sus ojos se veían tristes, tenia ojeras y sus ojos estaban rojos de tanto llorar. Tanto, que ese color azul claro, parecía estar apagado.

-Estoy bien ¿Te pasa algo?
No podía guardarle rencor a alguien que fue, y es tan importante para mí. Y mucho menos ahora que me marcho.

-No, solo me dio nostalgia volver a verte ¿Por qué no has ido a clases? Si es por lo que paso... Dice secando sus lágrimas.

-No es por eso, voy a mudarme con mi padre a Singapur. Trago saliva, se me hace un nudo en la garganta que amenaza con tragarse mis palabras. -Creo que un tiempo con el me servirá.

-¿Te vas? Dice mirándome fijamente, reteniendo las lágrimas. Su voz se estaba cortando y yo no podía soportar verla así. Se lo frágil que es, lo sentimental que puede llagar a ser. No quiero que se vuelva a lastimar, pero cuando alguien te lastima lo mas sano es alejarte, por tu bien.

-Si, siento que seria bueno. Pero créeme no te guardo ningún rencor. Dije levantando su rostro. -Y te pido perdón, no debí hacerte eso... Lo de la cabaña, perdóname, no era yo. Estaba enfadado, lo lamento.

-No fue mi intención hacerte daño, siento mucho que lo nuestro haya terminado así dice Sharol. Suspiró. -Lo merecía ¿No?

-Claro que no. Eres una gran chica y sé que pronto encontrarás a alguien que te haga sentir bien.

-No necesito alguien más, te necesito a ti Jhon. Y en sus ojos estaba la esperanza, yo estaba a punto de decirle que no me importa nada, que quiero todo con ella, que lo superemos. Pero hay algo mas fuerte que yo que me obliga a no hacerlo.

-Las despedidas son muy tristes. Sostengo una lagrima que amenazaba con caer.

-No tienes que irte, dice llorando.

-Necesito alejarme de todo –Digo mientras seco sus lágrimas.

-¿Todavía sientes algo de amor por mí? Pregunta mirándome, su cabello brillaba con el sol, sus pupilas estaban dilatadas.

-Siempre te amaré digo mientras le doy un corto beso en la frente.

-No te alejes de mí, tu no, por favor. Prometiste quedarte siempre junto a mí.

-Prometiste, prometí, prometimos mucho que se fueron desvaneciendo esas promesas poco a poco. Se muy bien lo que te prometí, pero no puedo con esto.

-Tu cometiste errores cuando estabas borracho, te acostaste con Camila, atropellaron a mi hermano. Sostiene mi mano fuertemente, aferrándose a mí, y eso me quebraba por dentro.

-No estaba contigo, esa es la diferencia. Y lo que paso con Tom no fue solo cuando estabas borracha, los vi fuera de tu casa besándose. Y lo de tu hermano fue un accidente, ojalá puedas perdonarme.

-Lo que paso con Tom fue un gran error... Mi amor fue más grande que todo, y ya te perdoné. Pero quiero que te pongas en mi lugar por un momento.

-Si, me pongo en tu lugar Sharol, pero estoy tan dolido. De verdad te amo, pero no creo poder seguir contigo... Lo siento. No quiero hacerte daño, Tom tiene razón, he arruinado tu vida.

-Si tú te vas de mi vida, dejaras un gran vació en mí. Tom que se vaya a la mierda. Es a ti a quien necesito. Te convertiste en mi todo, dice mientras me abraza. -Pero por favor, no te vayas así.

Me suelto de su agarre. -Cuídate, y me marcho. No quise mirar ni por un segundo hacia atrás, no quería hacerlo, porque si lo hacía no resistiría y volvería a sus brazos, y no es lo que quiero ahora. Sus labios, su piel, es algo que me ata, y no me quiero perder.

Narra Sharol
Veía mientras Jhon se alejaba, y poco a poco dejo de verlo. Y con él se marcha cada una de mis ilusiones, todos nuestros momentos vividos y mi vida junto con él.

-¿Que paso? Dice Lizzy mientras se acerca a mí.

-Decidió irse, digo mientras la abrazo.

-Lo siento mucho.

-Todo fue mi culpa, y no le puedo pedir que se quede, no ahora que estoy embarazada de Tom. ¿Qué le diría? Criémoslo juntos... Por favor.

-No estas tan segura, tenemos que ir hacerte esas pruebas. Ya luego tomaras una decisión. Pero no puedes rendirte Sharol, no así, no por alguien.

-Ahora no quiero nada digo mientras me consuelo en sus brazos. -Solo quiero que Jhon venga y me bese, y me diga que nada le importa más que yo.