Con Jhon todos mis días eran hermosos. Solo con verlo me hacía sentir mejor. Encontraba la calma, la seguridad y la confianza en una sola persona.
Mi madre entra a la habitación con cara de arrepentida.
-Hija ya te levantamos él castigo, dice al sentarse en mi cama.
-Está bien ¿podemos hablar un momento? El castigo duro menos que el regaño.
-Dime, dice sonriendo.
-Te extraño mamá, extraño cuando salíamos juntos y hablábamos sobre mi vida. Ahora no sabes nada de mí, llegas del trabajo a la cama y así te la pasas siempre. Me haces sentir que no solo fue Lían que murió si no también yo.
-Reproches, ya no eres una niña pequeña y puedes resolver tus problemas sola. Tu eres mi hija y te amo, pero necesito trabajar, estar pendiente del caso de Lian y siempre que necesites ahí estaré, dice dándome un beso en la frente.
-Te necesito hace dos años mamá. No sabes que ya tengo novio y tengo dudas por qué...
Le entra una llamada y contesta.
-Hija me tengo que ir, pero tu sabrás solucionarlo sola ¿Cierto?
-Si mami, siempre soluciono todo sola, digo mientras la veo marcharse.
Me quedo dormida. Me levante temprano me arregle era sábado y no tendríamos clases.
No tenía ningún mensaje de Jhon así que lo llame, pero no contesto.
Empecé arreglar mi habitación.
Y vi unas fotos mías junto a mi hermano, las apoyé fuertemente en mi pecho y susurré Te extraño.
Me metí a la ducha y me quedé ahí viendo como la espuma acariciaba suavemente mi cuerpo.
-Lían estas vivo, digo envuelta en lágrimas.
-Ojalá me hubieras detenido, dice alejándose.
-Perdóname. Yo nunca quise que te pasara nada malo digo al tomar su mano
Al seguirlo por una calle sola veo como un auto lo arroya.
- ¡No! Grito desconsolada.
Y así me despierto casi ahogada en la bañera.
-Fue mi culpa, digo envuelta en lagrimas
Tomé una cuchilla, pero recordé la promesa que le hice a Jhon y no lo hago.
Estaba muy alterada y fui por un vaso de agua.
Mis padres seguían tras las pistas del asesino de mi hermano, pero no había rastro alguno. Ellos no creían que Lian trato de matarse, mantenían la esperanza de que fuera un accidente.
Inicie a hacer algo de almuerzo y llega Jhon.
-Linda hora de aparecer, digo al abrir la puerta
-Estabas castigada ¿No?
-Ya no digo picándole el ojo
Él pasa y se sienta.
- ¿Quieres comer? Hice pastas, están deliciosas digo al pasar mi lengua por la cuchara.
- ¿Sí? Dice frunciendo el ceño. Se acerca a mí y me abraza.
- ¿Mas deliciosas que tú? Dice después de besarme lentamente.
-Compruébalo.
Sirvo dos platos para ambos y poco después llega mi madre.
-Buenas ¿Tu eres? Dice al dirigirse a Jhon.
-Mucho gusto señora soy Jhon.
-Mi novio, digo al tomar un vaso de jugo.
- ¿Desde cuando tienes novio? Dice acercándose a mi
-Si te lo dije hoy mamá, se nota que me escuchas. La miro fijamente.
-Lo siento hija es que hay pistas del asesino de tu hermano, dice alegre.
- ¿Que? ¿Quién es? Dime mamá.
-No lo sabemos, pero se registró la placa del vehículo. Y ahora van a averiguar a quien le pertenece.
La abrazo inmediatamente. No cabía de la emoción, por fin sabría quien mato a mi hermano.
-No te emociones, todavía falta mucho. Pero vamos a dar con la persona que lo arroyo y se marchó sin más. Quedas en tu casa Jhon. Dice mi madre y se va a su habitación.
-Cariño este fin de semana no podremos vernos, me iré a una finca de mis padres, dice Jhon.
- ¿Tienes que irte? Digo cabizbaja.
-Si, tengo que cuidarla porque mis padres se van a España por unas juntas y no quieren que me quede aquí, dice apoyando su cabeza en mis piernas.
Empiezo acariciar su cabello.
- ¿Me llevas contigo? Digo al darle un corto beso.
- ¿Te dejarían ir? Dice con una gran sonrisa.
-Si es contigo hago lo que sea... Sonreí.
-Nos vamos en la noche, paso por ti a las 7 ¿Bueno?
-Si, me recoges en el parque ¿Esta bien?
-Lo que sea por ti, hermosa. Ahora tendré que irme nos vemos. Me da un beso y me susurra al oído, me encantas.
Estaba muy nerviosa, que le inventaría a mi madre jamás me dejaría ir con Jhon.
Estar sola con un hombre eso sería casi imposible. Pero yo haría que fuera posible.
ESTÁS LEYENDO
Jhon
RomanceJhon el chico que desde hace mucho tiempo me gustaba. Él era ese refugio en el cual quería estar sin importar lo que pasara. Pero tal vez ese gran amor que le tenía se volvería en mi perdición. Él llegó a llenar cada vacío que había en mi sin imagi...