{Capítulo 3}

8.1K 436 20
                                    

-No, Nathan no, por favor... -sollocé, incapaz de ocultar mi temor.

Todos estaban demasiado borrachos, aunque Nathan era capaz de hacerme lo mismo estando totalmente ebrio.
Sabía que iba a ser horrible, y no me equivocaba.

-Me pones mucho cuando te haces la difícil... -uno de sus amigos se pegó a mí suciamente.

Mientras me besuqueaba de la manera más asquerosa, otro me cogió del cuello de la camisa que llevaba.
Me la arrancó con toda su fuerza haciéndome gritar, y se deshizo del resto de mi ropa con una sonrisa victoriosa.

Estaba pasando miedo y vergüenza, me sentía fatal y sólo quería evadirme.
Apenas me salía la voz del nudo que se me formó en la garganta. No podía moverme.

Me costaba creer que ésto me estaba pasando.
Comenzaron a reírse y a toquetearme, haciéndome daño.
No pude evitar comenzar a llorar.
Me sentía diminuta ahí, delante de esos hombres tan despreciables.

Nathan comenzó conmigo, era desesperante ver que tu marido era partícipe de tal locura y disfrutaba de ello.

-No, eso no ¡por favor, no! -chillé histérica.

-Calla de una vez, ¡zorra! -me llevé una bofetada tan fuerte que me hizo retorcerme de dolor.

El resto de sus amigos fueron bajándose sus pantalones y ya imaginaréis lo que ocurrió después.

Cada movimiento que me hacían era más brusco y doloroso, cada cual me hacía sentir peor.
No podía más; deseaba morir allí mismo.
No me quedaban fuerzas para seguir luchando; ya no podía más.

Y ahí estaba yo; tirada en el sofá de mi casa y siendo violada por varios hombres denigrantes, entre los cuales se incluía a mi denigrante marido.

Jamás podría olvidarlo.

Víctima SilenciosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora