Salvada.

Estudio.

-Entonces.... ¿Eso es la triple entente o la triple alianza?- pregunto Alexia.

-La triple alianza...- contesto Vincent por enésima vez a nuestra amiga.

-Pues no lo entiendo. Son Alemania e Italia. Pero si Rusia no va ya con ellos...

-A ver... Rusia va con la triple entente….,  Rusia iba a ir con Alemania pero Alemania les ataco entonces...

-¿Pero no has dicho que iban juntos? ¿Para qué les atacan entonces?

Marina y yo nos reíamos mientras presenciábamos los debates históricos de Vincent y Alexia. Había pasado una semana desde mi visita al Oso y todas las tardes libres me las pasaba en casa de Vincent, o el en la mía, haciendo deberes y estudiando o viendo series en el ordenador.

-Te están llamando Cass.- dijo Marina acercándome mi móvil y mirando la pantalla.- Numero oculto.

Agarre el móvil ansiosa y una voz femenina me contesto al otro lado.

-Mañana a las cinco.

 Yo iba a contestar pero ya había colgado.

-¿Quién era?- pregunto forzando un susurro Alexia.

-Publicidad...-dije haciendo como que colgaba.

-Para la próxima me lo pasas. Ya verás que risa.

-Risa va a ser la tuya si no apruebas el examen mañana.- le dijo Marina.

-Dont't worrie. Tengo a Vincent como profesor, no hay de que temer.

-Tampoco es que yo sepa demasiado. Solo presto mas atención que tu.

-¿Acaso eso no es ya algo? Con tus explicaciones y el empacho que me voy a meter yo ahora en casa esto esta fulminado.

-Tú sí que estas fulminada....

Tras otra hora en la que Marina y yo tratamos de hacernos esquemas mientras  nuestros amigos continuaban su discusión, finalmente decidimos dar por terminada la sesión de estudio de aquel día.

Marina y Alexia se fueron juntas, como de costumbre. Y yo me despedí de Vincent en la puerta.

-Bueno....si quieres...después de cenar me paso por  tu casa y repasamos otro poco- propuso el.

-Te lo agradecería...

-Te aviso por Whatsap.

-Claro hasta luego.- dije yo haciendo amago de alejarme.

-Adiós.- dijo el acercándose a mí y dándome dos besos en cada mejilla, lentamente y sujetando mi cintura con sus manos.

Me quede quieta mirando sus profundos ojos turquesa que analizaban mis labios con detenimiento. Era la típica situación de película en la  que  el espectador esta diciendo ''beso, beso, beso´´  pero o bien por la timidez de el por la confusión de ella, al final no hay beso. Pero eso son películas, y ni Vincent era tímido ni yo pensaba  hacerme la mosquita muerta como si no quisiese aquel beso.

Claro que   hay otros factores que influyen a la hora  de que ese beso no tenga lugar.  En este caso fue primero un elemento fisiológico. Mío. Solté un estornudo. En su pecho. Y por si no quedo claro que no era una película....Lo típico es que si ocurre algún tipo de contratiempo el chico lance una agradable risa y sin importarle nada mas te de un beso. Pues justo Vincent se estaba riendo y colocaba sus manos en mi cara...y entonces un estrepitoso ruido rompió la retomada magia.

Ambos miramos hacia la dirección del ruido. Yago, sudoroso y con ropa de deporte rebozado entre las bolsas de basura del contenedor contra el que había chocado y hecho volcar. Vincent se agacho a ayudarle, y yo también. Aunque creo que me preocupe más que el propio Vincent por aquella caída.