Pensé que quizá yo era uno de esos personajes de los libros que parecen ser prometedores, cuando en realidad no sirven para nada, solo sirven para estorbar y hacer que el personaje principal se preocupe y la salve mil veces del villano. Pero esta era la vida real, y el personaje principal iba a morir.
El demonio abrió ampliamente la boca, mostrando todos sus dientes grandes y afilados. En un abrir y cerrar de ojos no quedaría nada de Jace. ¿Me quedo viendo como es destrozado? ¿O cierro los ojos y trato de pensar en que esto no está sucediendo? Pero… esto está sucediendo.
“Tengo que hacer algo para evitarlo”. Me digo a mi misma. ¿Pero, qué? Se supone que ahora soy Cazadora de Sombras, tengo sangre humana y parte de ángel, bueno, y accidentalmente un poco de sangre de demonio. Pero no me he entrenado nada, no tengo experiencia y no sé como sostener correctamente un cuchillo, una espada ó el arco, entonces…
Tengo sangre de demonio… ¿Por qué soy tan importante para Valentine?
El demonio levanta la pata que tiene en el pecho de Jace y luego la deja caer fuertemente en el mismo lugar. Jace tose y tiene dificultad para respirar. Está todo lleno de sangre. El demonio abre la boca y se acerca para dar el golpe final. Entonces cierro mis ojos y agarro una gran bocanada de aire.
-¡Detente! ¡Detente! ¡¡¡Detenteeee!!! –grito con todas mis fuerzas.
Silencio total.
Abro lentamente los ojos y veo a todos los demonios en el suelo, alrededor de Jace y en posición de descanso. Estan viendo en dirección a nosotros, más bien me estaban mirando a mí.
Todo mi cuerpo temblaba y sentí fuertes palpitaciones en mi interior. Jace estaba en el suelo sin moverse y la pierna le estaba sangrando demasiado. ¿Seguiría respirando?
-¿Cómo hiciste eso? –Me preguntó Valentine volteándome hacia él y agarrando fuertemente mi quijada.
Sentía tanto odio y repulsión hacia él. En ese momento reuní toda la saliva que pude y le escupí en la cara. Valentine hizo como si no le hubiera escupido.
-Al parecer eres más poderosa de lo que esperaba. Pero en parte es mejor, así aseguro mi victoria. Nadie podrá contra ti.
-¿Esperas que te ayude? –Le pregunté riendome de él. -¿Y cómo piensas convencerme de hacerlo? Ahora que sé que puedo detener a esos demonios ya no tienes tanto poder y no permitiré que le hagas daño a ningún otro Cazador de Sombras.
-¿Y quién dijo que necesito Cazadores de Sombras? –Dijo Valentine sonriendo.
-¿De qué estás hablando? -Le pregunté con miedo y confusión.
Valentine volvió a chasquear los dedos y atrás de él, justo a la par de un árbol, había una jaula cuadrada con barrotes gruesos y había alguien encadenado adentro. Esforcé la mirada para poder ver quién estaba adentro ya que todavía estaba oscuro. Una chica de pelo negro y corto, con camisa color salmón y jeans azul claro me estaba mirando. Su expresión era de miedo y confusión.
-Leticia… -Susurré. Una sensación de escalofríos recorrió mi cuerpo. -¿Por qué la tienes a ella? ¡Leticia no tiene nada que ver con esta situación! –Le grité enfurecida a Valentine.
- “Cuidado con tu derecha”.
Escuché una voz en mi mente. ¡Isabelle! Me moví levemente hacia mi izquierda y una flecha se clavó en el hombro izquierdo de Valentine. Él tenía una expresión de sorpresa, y antes de que él pudiera darse cuenta otra flecha se le clavo en el brazo izquierdo, luego otra en el pie. Valentine gritó del dolor y me soltó. Yo no dude y corrí directamente hacia Leticia.
Choque fuertemente contra algo y caí al suelo; pero delante de mí no había nada. Me levante y di un par de pasos hacia adelante, cuando sentí una barrera.
-Es un campo de energía. –Dijo alguien tocando mi hombro. Era Magnus.
-¿No podemos hacer nada para quitarlo? Leticia, mi amiga Leticia corre peligro.-Le dije exasperada.
-Quizá podría hacer algo, pero he gastado demasiada energía haciendo el portal para traernos aquí, luego curé a Alexander y luego creé una barrera para que Valentine no se percatara de nosotros. Me llevará mucho tiempo quitar ese escudo, es muy poderosa su protección.
-¡Celeste! –Grito Isabelle mientras corría hacia mí.
Cuando llego con nosotros me tomo por los hombros y me abrazó fuertemente.
-Perdón por no darme cuenta antes. Escuche que gritabas “Detente” y me preocupé mucho. Fui corriendo a la habitación de Alec para que contactara a Magnus, y cuando llegué Alec estaba tirado en el suelo con dificultad para caminar y respirar. Fue todo un caos, pero ya estamos aquí.
No me acordaba que Alec está unido a Jace por su marca parabatai, por eso Alec estaba tirado en el suelo de su cuarto, sintiendo el mismo dolor que Jace. En ese momento me acordé de Jace y lo busque con la mirada. Alec estaba a la par de él. Jace seguía inconsciente y Alec apuntaba con su flecha en dirección a Valentine que yacía en el suelo sacándose las flechas.
-¡Ustedes malditos! ¡Siempre entrometiéndose en lo que no les concierne! –Gritó Valentine furioso.
Me di cuenta que ya no había ningún demonio en los alrededores, eso quiere decir que Valentine se está debilitando.
-Suelta a la mundana y te concederé una muerte rápida. –Le dijo Alec a Valentine.
-No soltare a la mundana si Celeste no viene conmigo y hace lo que le digo.
Valentine me busco con la mirada y cuando me vio no dijo nada, seguramente esperaba una respuesta.
-Yo… iré contigo si sueltas a Leticia.
-Ya te dije mis condiciones, has todo lo que te digo y la suelto. No te haré ningún rasguño, ni te lastimaré.
-“Celeste, no”… -Me dijo Isabelle.
-Isabelle –Le dije. –Lleven a Jace a un lugar seguro y cúrenlo, por favor. “Te prometo que no haré todo lo que Valentine diga, encuentren la manera de seguir mi rastro. Aguantaré todo lo posible”. –Esto último se lo dije solo mentalmente.
En ese instante Isabelle miro a Alec y luego él dejó de apuntarle a Valentine. Alec se arrodilló y sostuvo a Jace.
Jace seguía inconsciente. Alec me vio y luego asintió con la cabeza, yo también hice lo mismo. Isabelle y Magnus fueron junto a Alec y Jace. Magnus me dedicó una mirada de preocupación y tristeza.
-Encuéntrate. –Me dijo Magnus.
No sé qué quiso decir, pero asentí con la cabeza.
Caminé hasta llegar donde Valentine estaba, él se paró con un poco de dificultad, estiró la mano hacia mí y luego yo le di la mano.
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Cazadores de Sombras, más allá de los libros.
Fanfiction¿Qué pasaría si lo que dicen los libros es verdad? Celeste una joven aficionada a la lectura, emprende un viaje inesperado a Suecia; pero cuando creía que sería un viaje tranquilo, comenzarán a ocurrir sucesos inexplicables a su alrededor. Una trav...