Cazadores de Sombras, más allá de los libros.

Capítulo 13 "¿Dónde estás ahora?"

¿Cuál es el sentido de nuestra existencia? ¿Cuál es el destino de mi propia existencia? ¿Vendremos a la tierra a cumplir una misión que está más allá de nuestro conocimiento? ¿Somos simples objetos de un experimento? Son demasiadas preguntas sin respuestas. Nosotros los seres humanos solo nos dedicamos a vivir el día a día, o más bien a sobrevivir cada día. He llegado a un punto en mi vida en el que ya no se qué camino tomar…ni siquiera sé que es realidad o que es una ilusión…

-¡Oye Celeste! ¿Por qué estás aquí sola?

Era mi primo que me sacó de mis pensamientos. No me di cuenta cuando él se había sentado junto a mí, yo estaba en el área del bar y solo había pedido un vaso con agua, ya que yo no era fanática de las bebidas alcohólicas.

-Ohh…perdón, es que las discotecas y bares no son lo mío, no me gusta bailar y tampoco beber. –le conteste a mi primo Fred.

-¡Haberlo dicho antes! Nos dijiste que cualquier lugar estaría bien, pero al parecer no es así –Me dijo Fred con una sonrisa triste. –No te estás divirtiendo para nada, esta es tu primera salida desde…bueno, desde tu enfermedad y no está saliendo muy bien…

-Fred quizá podemos ir a algún restaurante a comer algo.

-Mmm…

-¡Chicos! –Fátima venía casi corriendo hacia nosotros, al parecer se estaba divirtiendo, ella si sabia bailar y se veía que había tomado un poco más de lo que debería porque estaba muy animada y contenta. -¿Por qué están sentados?

-Verás –dijo Fred- A Celeste no le gusta bailar y está aburrida…no sé qué hacer para animarla.

-¡Oh pero si Celeste pertenece al coro de su universidad! Podemos ir a un karaoke ¿Qué te parece Celeste? –dijo Fátima con una gran sonrisa en su rostro.

-Me parece bien. –Les respondí forzando una sonrisa. Tenía que tratar de comportarme como una persona normal que se divierte con su familia. Había pasado casi un mes encerrada en casa deprimida, pero ahora debía superar lo que me paso y seguir con mi vida.

-¡Está dicho, vamos al karaoke! –Exclamo Fred y luego me volvió a ver con una sonrisa deslumbrante. –Conozco un lugar perfecto para cantar.

⃰ ⃰ ⃰ ⃰

Era un restaurante karaoke muy bonito y grande, todas las mesas estaban dispuestas para que las personas disfrutaran del show. Había una gran tarima al fondo del salón, tenían guitarras, batería, un piano, micrófonos, ¡de todo!

Me emocione mucho cuando vi el piano, era grande y totalmente plateado, así que les pregunte si solo podía tocarles una pieza, pero mis primos me dijeron que me querían escuchar cantar. Yo me pongo nerviosa ante un público grande y nunca me he sentido cómoda cantando como solista, pero al parecer el piano sería mi único compañero.

Justo en ese momento termino de tocar la banda, eso quería decir que era mi turno. Me comencé a poner nerviosa, todavía no sabía bien que era lo que iba a cantar… ¿¡Oh por Dios que voy a hacer!?

-Uppmärksamhet alla! Nu har jag nöjet att presentera Celeste att glädja oss med sin röst. Applåder för att ta emot!

Supongo que ese fue mi llamado a la tarima, yo no sabía sueco, la única forma en la que me comunicaba era en ingles; pero cuando escuche mi nombre supe que era mi turno.

Caminé hacia el piano, me senté y volví la cabeza para ver a Fátima y Fred sentados en una de las mesas del frente.

Mi maestro de coro me ha dicho que cuando canto tengo que expresar lo que siento, mis tristezas y alegrías; para que el público lo viva y para que yo tenga seguridad de lo que estoy transmitiendo a mis oyentes.

Respiré hondo, cerré mis ojos y sólo se me vino a la mente Jace ¿Por qué seguía pensando en él? No lo sé. Entonces comencé a tocar.

(Este es el link de la canción: http://www.youtube.com/watch?v=WLgD8z9vSXY Sería genial que la escucharan al momento que leen la traducción que a continuación le dejo).

El orgullo puede resistir mil juicios. 

Los fuertes nunca caerán. 

Pero al mirar las estrellas sin ti, 

Mi alma lloró. 

El corazón me sube y me baja, lleno de dolor. 

Oh, oh, el dolor. 

Porque te estoy besando, oh, 

Te estoy besando, oh. 

Acaríciame mucho, 

Puro y verdadero 

Regalo para mí, para siempre. 

Porque te estoy besando, oh, 

Te estoy besando, oh. 

(Comenzaron a caer lágrimas por mi rostro).

¿Dónde estás ahora? 

¿Dónde estás ahora? 

Porque te estoy besando, 

Te estoy besando, oh.

Los aplausos hicieron que abriera los ojos, me seque rápidamente las lagrimas y sonreí al público. Me levante y di la gracias. 

Realmente le puse toda mi alma a esa canción, jamás había cantado con tanto sentimiento en toda mi vida.

-¡Oh por Dios Celeste! ¡Esa fue la mejor actuación que jamás he visto, me hiciste llorar a mares! –Dijo Fátima abrazándome.

-Realmente eres genial prima. –Dijo Fred sonriente- El gerente del restaurante quiere que cantes en su restaurante los días que puedas, te lo remunerara muy bien.

-Agradezco tanto sus halagos y me encantaría venir a cantar por las noches para desahogar mis penas. –Dije en tono de broma, aunque en realidad lo decía en serio.

-Disculpe señorita, le mandan este mensaje. –Me dijo un mesero al momento que me extendía un papel rosa doblado en dos.

-¿Quién lo manda? –Le pregunte extrañada. El mesero me estaba hablando en ingles.

-Una señorita, ella me dijo que a partir de ahora era su fan numero uno y después me dijo que le hiciera el favor de entregarle esta mensaje a usted.

Agarre el papel un poco desconfiada, el mesero se retiró. Al menos mis primos estaban hablando con el gerente del restaurante, quizá arreglando detalles sobre cuándo volvería a cantar. Aproveche ese momento para ver le mensaje.

Mi corazón comenzó a palpitar rápidamente y mis manos comenzaron a temblar. Tuve que sentarme en la silla más próxima. El mensaje decía lo siguiente:

“Dentro de dos días en la pista de hielo al medio día”.

F. Isabelle Lightwood.