Todo pasó en cámara lenta, como en las secuencias de las películas, cuando un momento épico se extiende en su trascendencia para que quede esculpido en la memoria: mientras dentro de la tanqueta, en medio del desorden provocado por el accidente, el coronel y el chofer reaccionan, afuera, en la vía principal del campus universitario, se muestra el tumulto de cuerpos desnudos, Karenino se retira su capucha de alta costura, observa emocionado y con sus ojos vidriosos, y sólo él, dentro de su imaginario, aprecia que es un homenaje a la obra performance "To Raise an Anonymous Mountain by One Meter" del colectivo Beíjing East Village. Los estudiantes que hicimos de troyanos gritamos de la alegría. Drugo, Tarot, Laura y por último yo mismo, cruzamos las miradas, en cámara lenta. Entre todo el estudiantado hay celebración y euforia mientras que entre los antimotines hay un total desconcierto.
De pronto se abre una escotilla en la tanqueta, sale el coronel un poco tambaleante. Karenino entonces empieza a avanzar hacia él, se acerca y, creyéndose el protagonista de la película "Desayuno en Plutón", extrae de su mochila un frasco especial de perfume, que de lejos podría confundirse con otra cosa, entonces, le dispara al coronel (quien ya está pisando el asfalto) a quemarropa un atomizado de su perfume, ante la extrañeza de que suena tal cual como si fuera un verdadero disparo. El coronel, Drugo, Tarot y el mismo Karenino, quedan desconcertados ante el efecto sonoro, mientras que yo, temo lo peor.
De pronto el coronel mira el torso de su artístico e inofensivo agresor, lo ve sangrando, luego gira y se entera de que el disparo provino del arma de su asistente que confundido, disparó desde atrás de él para protegerlo.
Todos nos enteramos de que hirieron a Karenino.
El mismo Karenino apenas si entra en razón, se lleva sus manos hacia la herida que le ha dejado la bala en su torso desnudo, donde la sangre se mezcla con su pintura de Woody Art, y, luego, contempla con extrañeza la gran cantidad de sangre que le mancha su mano izquierda.
Dejando caer de su mano derecha el frasco de perfume, y, mirando al coronel, le dice:
—¡Ésto... es una verdadera emergencia estética!
Karenino se derrumba en los brazos del coronel.
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LOS CINECLUBISTAS
AdventureEn una universidad pública, al inicio del semestre académico, se hace la bienvenida a los estudiantes que ingresan por primera vez. Entre los voluntarios para presentar los servicios universitarios a los primíparos, están los encargados del cineclub...