-Te preparé un baño tibio, te hará sentir mejor.- Comenzó a desvestirme.
-A estas alturas no siento nada.- Entré a la bañera.
-Pero al menos ya estas hablando.-
El agua tibia golpeó mi piel helada y gemi.
-¿Está muy fria?- Preguntó preocupada Emma.
Negué.
-Estuviste mucho tiempo bajo la lluvia, te pudo dar hipotermia.- Me regañó.
-¿Emma?-
-¿Si cielito?-
-¿Y si me rompí para siempre?-
Comenzó a masajear mi cabeza, trazó con las yemas de sus dedos mi cuero cabelludo.
-Nada es para siempre, -comenzó a decir- hay que esperar lo inesperado y aceptar lo inaceptable, despues de todo la muerte es un sintoma de que hubo vida.-
-Justamente ese es el problema Emma, cada vez que veo salir el sol es un recordatorio de toda la vida que Alan ya no podrá vivir.- Salí de la bañera y me cubri con la toalla.
Me acompañó a la cama, me arropó y se sentó a mi lado.
-No es bueno dejarse arrastrar por los sueños y olvidarse de vivir. Alan nació, creció e hizo de su vida una obra de arte, entendió que su momento le llegó como a todos nos tocará. Honra su memoria al continuar con tu vida y mantenlo vivo en tu corazón cada que veas a tus hijos a los ojos.-
-¿Por qué se fue tan pronto?-
Se encogió de hombros.
-Siempre se llevan a los mejores.-
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HABLEME MR. RICKMAN
FanfictionMi más grande sueño se volvió realidad, conocí a Alan Rickman pero hay un problema, a pesar de la creencia popular él no es para nada amable, al menos no conmigo, ni siquiera me dirige la palabra. Haré lo imposible con tal que me hable.