Me enamoré de la chica nerd #I

CAPITULO 20: Repugnante

Me he quedado boquiabierta.

¿Cómo es posible tener tantas experiencias tanto positivas como negativas y confusas en un sólo día?

Era yo, quien estaba pintada en la pintura, a decir verdad no era solamente un rostro si no que era yo detrás de un libro que es el de Rubí y mis múltiples rostros estaban haciendo muecas, supongo que son las muecas que hago cuando estoy leyendo, me divirtió verme a mi misma leyendo estaba haciendo un puchero, frunciendo el ceño, alzando una ceja, me mordiéndome el labio inferior y otra con cara de asombro, pero me sentí algo incomoda el saber que el ha estado observándome, pero tengo que admitir que el es un excelente artista, ha pintado cinco caras mías en tan poco tiempo pero eso no es lo que mas llamó mi atención sin no la frase que había escrito en el estrenó sureste de la pintura.

"Eres lo que guardas en la cabeza, tus ideas te hacen libre o esclavo".

Me quedé helada ante la telepatía que tenemos mutuamente, como si estuviéramos conectados de alguna forma, quizá es porque somos parecidos en dos mundos paralelos.

Me ha sorprendido, y a la vez intimidado, como siempre, dejé salir un suspiro y me relajé mientras el viento golpeaba mis cara en caminos casa.

Llegué y mi madre preguntó que si yo la había hecho y para no preocuparla le dije que si.

Me metí a mi cuarto a ver en donde colocaría la pintura, por último la puse frente a mi cama arriba estaba la enorme televisión que había adquirido Bruce para mí, puede que el no sea el mejor padre del mundo, ¡no! En definitiva él es el peor padre del mundo; pero el siempre me ha dado todo tipo de lujos y comodidades que cualquier adolescente de mi edad hubiese querido tener, aunque a veces lo hace para taparle la boca a sus amigos de copas cada vez que ellos presumen lo que les compran a sus hijos y la mayoría de ellos tiene mas de dos y como era de esperar el también les presume los lujos que me da, aunque no se los pida.

Maldito consumismo de mierda.

El jamás ha pisado un pie en mi habitación por lo que en ella hago lo que quiero, y sin darle explicaciones.

Mi pequeño refugio.

Nuevamente observo la pintura y no se porque pero me emociona que el me halla pintado y a la vez me abruma, aún hay cosa que debo poner en orden.

...

-Perla Negra nos encantaría que nos revelase algo de su vida personal.

Ha pasado una semana desde que el me dio la pintura, no he vuelto a hablarle porque me siento intimidada pero no paso de darle de vez en cuando una sonrisa que el me devuelve.

Estoy en una entrevista, me he vuelto demasiado conocida después de la colección que lanzó Karla o mejor dicho "Perla Negra" era súper famosa, y como le había dicho a Karla la máscara (antifaz) me dio un toque de misterio y por obvia razón captó la atención de todo el mudo, ahora todos quieren saber quien soy en realidad y solamente dentro de estas cuatro paredes pueden lograrlo porque en cuanto salgo soy Emma Green así que soy invisible ante ellos.

Asiento para darle luz verde a su pregunta, debajo del antifaz y frente a la prensa soy yo; soy silenciosa y tímida es por eso que están más locos por obtener una primicia en las portadas.

-¿Cual es la razón de tu sobrenombre?

-Bueno la perla es una joya forjada con suma delicadeza dentro de una concha de cientos de moluscos, ésta puede ser blanca o rosada, de la misma manera yo he forjado mi futuro con suma delicadeza en las cenizas de mi pasado, el color negro es uno de los colores mas bonitos que pude haber además de ser una de las maneras que veo la vida, no todo es de color rosa. Yo podría dar miles de razones y jamás terminaría.

-¿Y hay alguien que ya halla conquistado esa coraza y aire de misterio tuyo?

¿Se refería a que si tengo a alguien en mi vida? ¿Un novio?

-No.

Dicho eso me doy la vuelta dándoles la espalda y dirigiéndome a mi camerino para cambiarme de ropa, sabiendo que hay luz verde para eso.

La ropa que usé para esta colección eran mayormente vestidos y a pesar de que los odio eran demasiado elegantes y cómodos, con mi tacto podía deducir que eran por lo menos 100% algodón o 95% algodón con un 5% poliéster. Karla era verdaderamente una gran diseñadora, los colores de los vestidos eran blanco, negro, azul marino y gris, eso fue lo que más me gustó, además de ser muy al estilo los años 90.

Tocan a la puerta y yo me sobresalto.

-¿Puedo pasar?- la voz era de Karla.

-Si -dije mientas yo me hacia una coleta alta.

-¡No lo puedo creer Emmy! esto es realmente genial, has tenido toda la razón, toda la atención está sobre nosotros, y quieren hacernos una entrevista y sesión de fotos para la revista mas prestigiada de la gama de modas en el mundo.

-Wou de verdad me alegra que halla servido de algo.

-¿Quieres que te llevemos a casa?

-No gracias.

...

El viento frío se filtraba por la ventana, estaba en pijama lista para dormir, mi mamá y Bruce estaban dormidos. La tenue luz que iluminaba mi habitación es la de la lámpara de noche, quise mirar las estrellas, pero no había, todo estaba nublado, una noche sin luna...

Tenía sed así que bajé las escaleras hacia la cocina por un poco de agua.

Un ruido en la cocina me sobresaltó, caminé con cautela para sorprender a lo que sea que esté ahí.

Me asomé un poco por la puerta, y la sorprendida fui yo.

La escena mas repugnante que jamás halla visto en mi vida.

Era mi padre que se estaba follando a mi madre sobre la mesa.

Quedé pasmada y con cautela regresé a mi cuarto. Sentí la boca seca pero no de sed, un sabor amargo, uno demasiado asqueroso.