Parte 2.5 Los cambios nunca son fáciles

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Deku se incorporó con dificultad en la cama de la enfermería. Las luces estaban apagadas y no había nadie por allí. Respiraba con agitación y tenía la garganta seca. La mancha que ahora recorría su cara estaba ardiendo y gimió de dolor. Intentó tocarla pero no pudo, le causaba mucho ardor.
Se sujetó lo cabeza con fuerza, un dolor intenso había comenzado a martilleandole desde dentro y apenas pudo abrir los ojos. Pronto sintió un cosquilleo en la piel. Intentó ver sus brazos pero estaba oscuro y veía nubloso.
El cosquilleo se convirtió en picor. Comenzó a rascarse desesperadamente todo el cuerpo y de repente se detuvo de un momento a otro. Entonces agotado, se recostó y quedó inmóvil. De repente el dolor se trasladó a sus músculos, sentió como si cuchillas se clavaran en su carne. No pudo soportarlo y comenzó a gritar sin cesar.
Recovery Girl entró corriendo y encendió la luces mientras All Might llegaba tras ella. Ambos se pusieron a los lados de la cama y sostuvieron los brazos a Deku, que se retorcía sobre sí mismo. Lloraba del dolor que le prococaba. Abrió los ojos suplicantes y miró a All Might. A este se le cayó el alma a suelo al no poder ayudarlo. Ren les había dicho cómo sería cada paso y no podían hacer nada para evitar su sufrimiento.

A la mañana siguiente, al despertarse, se sintió extrañamente liviano. Levantó su brazo y no pudo ver más que una gran mancha frente a èl. Tocó donde debería estar la mancha en su cara y había desaparecido por completo.
Se incorporó lentamente, los músculos todavía estaban entumecidos y había pasado una mala noche.
Tardó un momento en recordar porque se encontraba así. Recordó los eventos del día anterior y se le vinieron a la mente la cara de Kacchan y Ren. Salió de la cama sin pensarlo y cuando tocó el suelo cayó sin fuerzas. El golpe fue más intenso de lo que esperaba y se incorporó con esfuerzo.
Recovery Girl entró seguida de All Might que traía una bandeja con un tazón de algo para comer para Deku.
Èl miró hacia donde venía el sonido de esos pasos pero otro dolor lo distrajo esta vez. Su pecho le dolía tremendamente. Tocó y se llevó la sorpresa de sentir un par de bultos que salían de sí mismo. Y dolían como el demonio.
All Might dejó la bandeja sobre un escritorio y corrió a socorrer a Deku. Éste estaba volviendo a tener visión y miró agotado al gran héroe ahora delgado y cansado. La expresión de pesar de All Might lo hizo darse cuenta. Ya estaba hecho, había cambiado.
Por fin pudo ver sus manos, ahora más pequeñas. Su ropa le quedaba más grande de lo normal. Algo molestaba en su cuello, era su cabello que alcanza a molestarlo tocando su piel. Luego tocó su rostro se sintió más pequeña y entonces se pellizcó las mejillas. No estaba dentro de un sueño, aquello era real. All Might la cargó en sus brazos y la subió a la cama. Cansada, solo pudo mirarlo sin emitir ninguna palabra. El gran héroe le dedicó una media sonrisa para levantarle el ánimo. Deku levantó su mano hasta la altura que pudiera verlo All Might y le mostró su pulgar hacia arriba. Indicándole que todo estaba bien y ambos sonrieron a medias con las fuerzas que tenían.

Fin de esta pequeña parte.


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