Parte 16 - Solo mía

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La alarma sonó temprano la mañana siguiente y Bakugo alcanzó a apagarlo en el momento. Miró de reojo ese revoltijo de cabello verde a su lado y lo acarició con suavidad.
Se incorporó al borde de la cama y se quedó mirando sus pies en el suelo.
Bakugo con cara de cansancio se colocó la remera. -Deku, despiertate.-
-Mmm…- emitió Deku y se removió para envolverse más con la colcha. -Cinco minutos más…- dijo y volvió a dormirse.
Èl agarró el despertador y lo toqueteó volviéndolo a programar.

La alarma volvió a sonar estruendosamente para los oídos de Midoriya y se levantó con la sensación de estar perdida en el espacio-tiempo. Sola en la habitación, tomó el aparato que seguía sonando y vibrando y lo miró unos segundos hasta que su expresión paso a ser de espanto.
-Es muy tarde!- gritó Midoriya espantada.

Como se esperaría, entró tarde al salón de clases y lo primero que vio fue una sonrisa pícara de su novio que confirmaba la pequeña broma que le había tendido.

-Tu cabello es un desastre, Deku.- dijo Ochako peinandola. -Y hacerte una cola de caballo no fue de mucha ayuda.- y cuando terminó de decirlo se rompió el peine. Pronto Momo le creó otro nuevo.
-Creo que tengo unas tijeras en mi habitación. Si no puede arreglarlo, tendré que cortarlo.- dijo Midoriya decidida y se levantó.
-De qué estás hablando? Ni hablar! Deku, siéntate!- dijo Ochako subiendo la voz, obligándola a sentarse.
Una vibración en su bolsillo llamó su atención. Había recibido un mensaje nuevo.
-Es Ren!- dijo sorprendida Midoriya y las demás chicas se acercaron a mirar.
-Soy yo!- dijo una voz cantarina antes de que Midoriya abriera el mensaje. -He vuelto!- dijo Ren felizmente.
-Cómo hace para venir tantas veces?- dijo Ojiro en voz baja.
Ren saltó sobre Midoriya abrazándola y casi tirándola al suelo si no hubiera sido por Ochako.
-Me alegra verte de nuevo…- dijo Midoriya apenas con aire.

-Tengo que decirte algo importante!- dijo Ren haciendose hacia atrás con el asiento de Bakugo.
-Ochako, duele.- dijo Midoriya quejándose cuando tiró de su cabello.
-Lo siento, Deku. Ya casi…- dijo Ochako nerviosa.
-Muevete de ahí, imbécil.- dijo Bakugo enfadado al ver a Ren en su sitio.
-Oh! Hola, Idiota!- respondió Ren con una gran sonrisa.
-Te voy a matar, pequeña rata…- gruñó Bakugo frente a ella.
-Ah…si?- dijo alargando el sonido para burlarse de Bakugo.
-Te odio! Muérete!- gritó Bakugo.
-Qué haces aquí?- dijo Kirishima mirándola sorprendido.
-Hola! Vine a ver a Hatsume!- respondió y de repente abrazó a Bakugo sin que se diera cuenta. -Llévame! Sé que te has divertido mucho con los inventos de esa chica!- dijo con sarcasmo y con Bakugo intentando quitársela de encima.
-Muerete…- gruñó Bakugo con aura asesina que hasta Ren se asustó de ello.
-Ahhh…- emitió Ren con miedo pero cambio de repente y son una sonrisa divertida le dijo. -Vamos, Kacchan! Llévame!- lo que hizo enfurecer aún más a Bakugo.
-Es como si fuese su hermana pequeña!- se rió Kaminari.
-Cállate, amarillo! Y tú sácame tus manos de encima!- le gritó Bakugo escupiendole las palabras en la cara.
-Terminé!- dijo finalmente Ochako sintiéndose realizada. -Te ha crecido muchísimo el cabello. Tienes que cuidarlo más.-
-Eh?- emitió Midoriya tocándose el cabello.
Ochako lo había peinado hasta desenredarlo por completo y le había hecho una pequeña coleta a un costado, dejándole el cabello suelto. -Gracias, Ochako.- y luego se dirigió a Ren. -Te llevaré a verla.- se ofreció Midoriya levantándose.
-Antes quiero mostrarles algo.- dijo Ren soltando a Bakugo y se sacó ambos guantes.
Ren estiró la mano hacia Midoriya pero antes de poder tocar su cara Bakugo la detuvo y con una mano sobre su cara la atrajo hacia èl.
-Kacchan! No puedo ver!- se quejó Ren.
Los demás se habían quedado en silencio por la repentina acción de Ren.
-Eres muy impulsiva, Akiyama.- dijo Aizawa Sensei cuando entró al salón de clases. -Deberías explicar tus intenciones antes de precipitarte y asustarlos.-
Ren lo miró al Sensei por entre los dedos de Bakugo en su cara.
-Lo siento. Me excedí.- dijo Ren disculpándose. -Perdónenme por asustarlos de esa manera.-
Aunque luego de esa disculpa colocó su mano sobre la de Bakugo, quién se echó hacia atrás apenas sintió el tacto de su piel. -Kacchan, gracias.- le dijo con una sonrisa sincera. -Luego de pelear con esa cosa horrible en el parque acuático nos hemos dado cuenta de cómo funciona mi particularidad.-
-Qué?- dijo Ochako sorprendida.
-En resumidas cuentas…- comenzó Aizawa Sensei. -Ella puede controlar las hormonas del cuerpo.- dijo dejando boquiabierto a sus alumnos. -Lo que hemos visto hasta ahora es en esencia su partícularidad pero que, más allá de eso, puede controlar independientemente las hormonas de un humano o animal.-
-No pude haberlo dicho mejor, Aizawa Sensei.- dijo Ren alzando el dedo pulgar hacia el profesor.
-Idiota! No vayas saltando por ahí con tus manos desnudas como una estúpida!- le gritó Bakugo haciendo saltar algunas explosiones de su mano.
-Te asusté.- dijo tapándose la boca para ahogar unas risitas. -Digamos que no soy más contagiosa.- dijo despreocupada.-
-Midoriya, acompaña a Akiyama hasta el taller y vuelve de inmediato.- le ordenó Aizawa Sensei y cuando ambas salieron Ren tomó de la mano a Deku. -Sientensen.- dijo finalmente Aizawa Sensei.
-Chicas caminando de la mano.- dijo mentalmente el detector de perversión de Mineta.
-Has visto la cara de Bakugo?- río Kaminari a Kirishima.
-Eso estuvo cerca.- dijo Kirishima aliviado.
-Ren debería subirte la testosterona, Kaminari.- rió Jiro.
-Pero qué dices?- se molestó Kaminari y Jiro se rió por lo bajo.
-Eso ha sido muy tierno de tu parte, bakugo.- dijo Hagakure mirando hacia atrás.
-Cállate! Date la vuelta y muere!- le gritó más enfadado Bakugo.

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