Deku...Chan?

Parte 15 - Más dulce que amargo

El primer receso comenzó y Bakugo se levantó para enfrentar a Midoriya pero Aizawa Sensei tenía otros planes para èl.
-Quédate, Bakugo, tengo que hablar contigo.- dijo Aizawa Sensei y Bakugo volvió a sentarse sin decir nada.
Midoriya pasó a su lado y miró con preocupación pero no podía hacer nada así que salió del aula junto con Todoroki y eso molestó a Bakugo.

-Una particularidad que cambia el humor?- dijo Kirishima sorprendido ante lo dicho por Hatsume mientras intentaba colocarle un aparato a Bakugo en el brazo. -Cuánto va a durar?-
-No lo sé, por eso Bakugo es mi conejillo.- dijo con dificultad y una gran sonrisa satisfactoria.
-Se siente extraño pero no me está haciendo daño.- dijo Bakugo refiriéndose al cambio de humor.
-Bakugo es un chico con una personalidad horrible y mira en qué se ha transformado!- dijo con entusiasmo Hatsume.
-Estás experimentando con èl!- dijo Kirishima alterado.
-Qué demonios estás haciendo? Perra!- dijo Bakugo volviendo a la normalidad.
-Vaya, vaya! No duró tanto como supuse.- dijo Hatsume y lo volvió a rociar.
-Ya deja de echarle eso!- gritó Kirishima.
-No crees que es mejor cómo está ahora?- dijo Hatsume sonriente.
-Hola, Hatsume.- saludó un estudiante al entrar en el taller. -Cómo vas con mi equipo?-
-Llegan justo a tiempo!- dijo Hatsume ignorando a Kirishima. -Te presentó a Bakugo Katsuki. Está probando el bebé que estoy creando a partir de tu particularidad.-
-Hola, cómo estás?- dijo Bakugo al estudiante estrechándose la mano.
-Bakugo? El chico violento de las exploraciones?- dijo con asombro.
-Ese soy pero hoy no te haré explotar.- dijo Bakugo con una sonrisa.
-Eso es bueno, no?- pensó el estudiante.

-Los dejaré un momento, sigan con sus deberes.- dijo Aizawa Sensei y dejó el aula.
-No entiendo!- dijo Hagakure haciendo berrinche en su asiento y algunos se rieron.
-Quieres que te lo explique?- dijo Bakugo.
-Si, por favor!- dijo rápidamente Hagakure dando vuelta su asiento.
-Toru!- dijo en voz baja Jiro pero ella no se dió por enterada.
-Oh, ahora lo entiendo!- dijo Hagakure un momento después. -Gracias, Bakugo.- dijo feliz.
-No es nada.- respondió feliz Bakugo y volvieron a verlo con sorpresa.
-Bakugo, explícame a mi también.- dijo Sero levantándose de su asiento hasta el de Bakugo.
-A mi también, por favor!- dijo finalmente Jiro.

-Es raro verlo así.- dijo Momo.
-Es una lastima que el efecto no dure.- dijo Todoroki.
-Te vi hablando con èl hace un rato.- comentó Momo.
-Si, quería disculparse por golpearme ayer. Era como aceptar las disculpas de otra persona.- dijo Todoroki con un escalofrío corriendole por la espalda.
A Bakugo también le corrió algo frío por la espalda mientras explicaba a sus compañeros. Detrás de èl, Midoriya estaba concentrada en su tarea y echando chispas verdes.
-Wow, Midoriya, si que estás en ello.- dijo Sero pensando que estaba concentrada en su tarea.
-Sigue molesta conmigo…- pensó Bakugo apenado. Se dió vuelta y le dijo: -Deku, puedes acompañarme a la enfermería luego?-
-Eh?- dijo levantando la mirada. -Si…- y asintió.
-Eres tan linda.- dijo Bakugo con una sonrisa y se dió la vuelta.
Midoriya inclinó la cabeza pero aún así se notaba que tenía la cara roja por el comentario.

-La quemadura es más grande de lo que pensé.- dijo Bakugo cuando la enfermera le quitó las vendas. -Duele.-
-Deberías ser más cuidadoso la próxima vez y no precipitarte.- dijo Midoriya mirándolo fijamente.
-Quería ganar.- rió Bakugo.
-Siempre quieres ganar.- dijo Midoriya y luego suspiró. -Para que querías que viniera?-
Bakugo estuvo en silencio unos momentos y luego suspiró.
-Quería disculparme contigo…- comenzó a decir. -Me moleste mucho cuando vi lo que pasó y sé que no fue culpa tuya ni del pez Koi pero aún así me enfadé.- se rascó la cabeza y continuó. -Me disculpe con Todoroki y no volverá a ocurrir. Le dejé bien claro que no se acerque de nuevo a tí. O lo mataré.- dijo con expresión seria.
-De verdad cambió su personalidad?- pensó dudosa Midoriya.
-Deberías controlar tu ira. Ahora que estás bajo los efectos de esa cosa extraña deberías pensar más en tus enojos repentinos.- dijo Midoriya seriamente y Bakugo solamente se rió.
-Y tú deberías controlar tus celos. Si querías que te explicara el ejercicio pudiste habérmelo pedido tú también.- dijo Bakugo apretándole los cachetes. -Ahi estás devuelta, poniéndote como un tomate.- sonrió y acercó su cara a la de ella.
-Eso no está permitido aquí!- gritó alterada y avergonzada la enfermera.