capítulo 1

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Suspiré. ¿Por qué cuando no llevaba mi paraguas comenzaba a llover? Me quité mi suéter y cubrí mi mochila.

– Si corro tal vez no me moje tanto... –susurré

– Zhou. –volteé exaltada hacia Kunhang.

– Kunhang, me asustaste. –puse mi mano en mi pecho, sintiendo como mi corazón latía más rápido de lo normal por el susto y también por la persona que tenía enfrente.

– Perdón. –sonrió. Su sonrisa era hermosa, me encantaba. –¿Quieres que te lleve? No quiero que te enfermes.

– ¿A Dasu no le importa que vaya con ustedes? –yo sola me arruinaba mis momentos con Kunhang.

– Bueno... Ella y yo peleamos hoy, así que... Podemos irnos juntos sin problema. –rascó su nuca mientras veía el suelo. Levantó la mirada y me sonrió, sé que lo hizo para tranquilizarme y que no preguntara nada pero aún así lo haría.

– ¿Qué pasó?

– Nada importante.

– No te creo. –me crucé de brazos.

– Está celosa... De ti. Me pidió que dejara de hablar contigo...

– ¿Lo harás? –le interrumpí asustada. No, él no podía dejar de hablarme. Si lo hacía probablemente moriría de tristeza.

– No, claro que no. Eres muy importante para mí. –sentí mis mejillas arder. –¿Te sonrojaste? Awww, eres tan adorable. –pellizcó mis mejillas, solté un gemido de dolor. Su expresión cambió y se alejó de mí.

– ¿Qué pasa? –fruncí el ceño.

– Eh, nada, nada. Creo que deberíamos irnos. –asentí. Salimos corriendo hacia el estacionamiento donde estaba su auto, nos subimos. –Pon las mochilas atrás, por favor.

Tomé su mochila y la puse en el asiento de atrás. Quité mi suéter de la mía y la coloqué junto a la de Kunhang.

– Tengo hambre... –dije cuando sentí mi estómago rugir, mi amigo rió.

– Ven a casa a comer conmigo. Mamá y papá no están y sabes que no me gusta comer solo. –hizo un puchero y reí.

– ¿Vas a cocinar tú?

– Ni loco. Pedimos algo a domicilio. –reímos. Extrañaba poder pasar el tiempo con mi mejor amigo.

Quince minutos después ya estábamos en la casa de Kunhang, me había dicho que me pusiera algo de su ropa mientras se secaba mi uniforme, le dije que no hacía falta porque mi uniforme no estaba tan mojado pero insistió.

– Te queda muy bien mi ropa. –dijo cuando llegué a la cocina. Me sonrojé, ¿por qué tenía que hacer ese tipo de comentarios?

– ¿Ya pediste lo que vamos a comer? –ignoré lo que anteriormente había dicho, rió.

– Ya, ya, pedí jajamyeon. –asentí, me senté a su lado.

– Estás muy lejos, ven aquí. –me tomó de la cintura y me hizo sentarme en sus piernas. –Así está mejor.

– K-kunhang, no... –intenté levantarme pero no me dejó.

– ¿Sabes? Hoy te vi con Mark, ¿están saliendo? –lo miré con el ceño fruncido. Mark y yo sólo nos hablábamos porque estábamos en el mismo equipo de Química.

– ¿De qué hablas? Sólo nos hablamos por que somos compañeros de equipo en Química.

– Estaban muy cerca. –se fue acercando a mí, hasta el punto en que podía sentir su respiración en mis labios. –Justo así, y sólo yo puedo estar así de cerca de ti.

Unió nuestros labios. Abrí mis ojos como platos. Me acercó más a él, haciendo que lo abrazara, me dejé llevar y le seguí el beso. Después me arrepentiría.



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Esto quedó más largo de lo que esperaba xd

¡Gracias por leer! 😘😘

Promise | henderyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora