Capitulo 1-Sus primeras palabras.

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22 de octubre de 2005

Sanatorio Berville

Como toda mañana el psiquiatra Lee Shepard estaba listo para iniciar sus terapias con los pacientes, iba calmado y con su libreta de notas color azul cobalto, siempre después de 2 tazas de Té, unas galletas de chocolate y una ducha de agua fría para despertar.

No era fan del café, desde que vio que la mayoría de pacientes en rehabilitación lo tomaban, estaba convencido que tenia sustancias peligrosas que te hacían delirar o terminar como sus pacientes, locos, perdidos, desechos.

En su agenda para el día de hoy, tenia 3 pacientes que ver en el sanatorio, 2 de ellos complicados pero fáciles a la vez, ya que siempre decían cosas disparatadas y el tenia que entender bajo que alucinación o nivel de esquizofrenia se encontraban, era lo normal, pero quien no era un paciente fácil o normal, era Molly Williams, paciente 78B, no hablaba en ninguna terapia, nada, solo lo observaba, sus grandes ojos de color azul lo examinaban con detenimiento, eran lindos pero bajo esa mirada fría y perdida podían asustar hasta al más valiente.

El día de hoy era su primer paciente a tratar, como siempre 1 hora y media de silencio, intercambio de miradas, escuchar el reloj correr, hacer preguntas que ella jamás contestaría, en fin, así era Molly, linda pero loca.

Para Lee recorrer los pasillos del sanatorio era una experiencia tenebrosa, podía oler el agua estancada de algún lugar, podía escuchar a algunos pacientes gritar, y siempre tenia que pasar por un lado de las celdas de los que el llamaba ¨menos locos, menos tratados¨.

Eran aquellos pacientes que no estaban tan mal psicológicamente , los dejaban ver otras personas, recibir visitas, ver televisión, hacer actividades normales, por lo general eran personas victimas de violación o que vieron a alguien morir y empezaron a perderse en si mismos, hasta que se dejaron ir y terminaron mal.

En ocasiones deseaba tratar con algún paciente así, pero no, su paciente Molly era de los ¨Locos en cautiverio¨, o sea que no tenían contacto con nadie, no veían televisión, comían en sus celdas, eran considerados peligrosos, ellos no podrían tener una visita y por supuesto toda terapia psicológica, debía ser con la protección de 2 o 3 guardias.

-Buenos días-dijo Lee a un policía.

Enseño su credencial y puso sus huellas en el escaner, el timbre ensordecedor de la puerta sonó, indicando que estaba abierta, y el entro, viendo el gran lugar donde trabajaba, con solo una ventana a muchos metros de altura, un escritorio con una silla frente a otra y los 2 guardias.

Si, muy seguramente no ganaría el premio por el trabajo más relajante pero le daba la oportunidad de trabajar con las personas, por más locas que estuvieran, y pagar facturas.

-Buenos días oficiales-dejo su maletín a lado del escritorio y su libreta encima, la pluma se la quedo el para evitar incidentes y se sentó frente a la callada Molly Williams-Buenos días Molly

Sin respuesta.

Molly era una chica de cabello largo, de un fuerte color negro, su rostro de un tono casi fantasmal, con algunas marcas de moretones por los brazos que de seguro también tendría en las piernas, y los ojos que se acomodaban a la perfección con sus largas pestañas, era guapa, eso se notaba, pero era un misterio aún para Lee el por que ella estaba ahí, leyó su expediente, pero aún así no le parecía suficiente.

-Empecemos esto como siempre Molly, ¿Cómo fue todo?

Como siempre levanto la cabeza y le clavo la mirada, Lee empezó a traspirar de las manos pero continuó.

-¿Cómo era tu vida antes de entrar aquí?

De nuevo ella no dijo nada, solo lo observo un rato más, y despego la mirada para ver hacia abajo.

Pasaron 30 minutos en que Lee hacia preguntas y esperaba su respuesta durante 2 minutos, pero ella nunca contesto, entonces decidió dejar de preguntar y como siempre los últimos 20 minutos hacer notas.

Estaba tan concentrado escribiendo que de momento no proceso lo que escucho.

-¿Ya encontró la policía el cuerpo de la chica?- dijo una ligera voz ronca.

Lee levanto la cabeza y la observo, ella lo miraba pero no dijo nada más, pero Lee estaba seguro que hablo.

-¿Dijiste algo?

-Si, ¿ya encontraron el cuerpo de Regina?-volvió a hablar

Lee estaba sorprendido, ella llevaba mucho tiempo ahí, no había registros de que hablara con psicólogos o sola en su celda, se llego a creer que era muda, pero aquí estaba la prueba de que no.

Pero como se había enterado de lo de Regina, su celda no tiene acceso a televisiones, radios o a policías cercas que pudieran hablar de eso, su celda era una de las más alejadas, en el ultimo piso, hasta el fondo, era algo cruel pero decían que ella era hostil ante demasiado ruido.

-¿Cómo sabes lo de Regina?-pregunto Lee con la esperanza de que contestara de nuevo.

Molly se acerco a el por el escritorio, lo que hizo que los guardias se pusieran alertas.

-Las paredes me lo contaron-dijo en susurro hacia Lee.

Molly volvió a su posición inicial y un sorprendido Lee tomo sus cosas con rapidez y salio del lugar, se acerco al policías después de que el timbre sonara, y le comento todo.

-Lee, estas seguro que ella..

-Ella dijo Regina, dijo el nombre de la víctima que ha estado en las noticias, me dijo que si encontraron su cuerpo, es la primera vez que habla y dijo esto.

-Crees que ella sepa algo más

-No lo se, pero es extraño, dijo que las paredes se lo contaron, no se si uno de los Agentes que investigan el crimen, estén interesados en saber esto, cuento con decírselo a usted-dijo Lee y se dirigió con su siguiente paciente.

No cabía duda que ningún paciente superaría la cita que tuvo hoy con Molly Williams, era tan extraño, como ella estando encerrada y sin comunicación se entero de algo así, sin duda algo no estaba bien en todo eso.


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Aquí el primer capitulo de esta historia.

Conforme la historia avance va ir subiendo de intensidad, así que estén atentos a pequeños detalles.

Espero disfruten este nuevo capitulo y si es así no se olviden de recomendar o compartir.

Gracias por leer :)

El caso Molly William'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora