El caso Molly William's

Prologo.

19 de octubre de 2005

Sentía que el aire le faltaba por caminar y caminar a gran velocidad, pero no podía detenerse, la chica de larga melena rubia sentía que alguien la observaba, o que la seguía desde hace 3 cuadras, estaba a punto de llegar a su casa, pero el miedo la invadía al grado de quererse poner a llorar.

Estaba saliendo de un turno largo del trabajo, la mayoría de los jueves siempre le tocaba el turno nocturno, pero siempre conseguía que algún amigo le diera un aventon o que su esposo fuera por ella.

Pera esa noche fría, nadie pudo llevarla y su esposo estaba muy enfermo como para poder manejar hasta el trabajo de ella, por lo que decidió caminar, en esos momentos lamentaba nunca aprender a conducir, pero jamas se vio en esa situación, era un pueblo grande pero no había incidentes a diario.

Era tan tarde que no había nadie en la calle, y los faroles que alumbraban la banqueta estaban tan viejos y gastados que parpadeaban continuamente, poniéndola aun más nerviosa.

Al dar vuelta a la izquierda en la siguiente calle, pudo sentir un frió recorrer su espalda, como esa sensación de alguien cerca, se armo de valor giro con rapidez para averiguar quien la seguía, pero nadie estaba ahí, posiblemente paranoia pensó, se paro y respiro un poco, debía estar tranquila o le daría un ataque antes de llegar a casa.

Saco su teléfono un poco de su bolsillo, 11:48 pm alumbraba en blanco la pantalla, solo la ponía más nerviosa, respiro de nuevo y camino de nuevo, pero entonces un ruido la hizo estremecer.

Los botes de basura detrás de ella, habían sonado, produciendo un sonido fuerte al chocar el metal con el pavimento.

-Hola-dijo en voz alta tratando de ver si algún empleado de turno nocturno era el que estaba afuera, vio hacia los botes de basura pero el farol que parpadeaba, dejo de hacerlo y la dejo en una oscuridad que solo hizo que se pusiera más nerviosa.

-Hola-dijo alguien detrás de ella

La chica salto y dio pasos hacia atrás, su corazón parpadeaba tan rápido que sentía que se le saldría del pecho, al voltear para ver a la persona, se dio cuenta que estaba sola y fue su señal para huir, ella escucho claramente una voz contestándole.

Así que corrió directo a casa, y podía escuchar tras de ella las hojas crujir, como si alguien fuera detrás de ella, pero no volteo, no se detuvo y evito no desorientarse para llegar a un lugar con establecimientos abiertos.

Se sentía agitada de tanto correr, pero a lo lejos veía las luces de todos las tiendas abiertas, incluso veía gente salir de los cines, no paro y corrió con su destino bien visto, pero algo, que ni ella misma podía describir, la tomo del estomago y la jalo hacia atrás, haciéndola caer y golpearse la cabeza.

Rápido trato de levantarse y ver quien era la persona, pero no había nadie otra vez, no fue su imaginación, algo la sujeto, sintió unas frías manos a su alrededor, ella no estaba loca.

Tomo su celular que había caído a centímetros de ella y rápido marco 9-1-1, la operadora como siempre atendió al instante.

-9-1-1 ¿Cuál es su emergencia?

-Mi nombre es Regina Davis, salí tarde de mi trabajo y alguien esta acechándome

-¿A visto al atacante?

-No, pero acaba de atacarme, no logro verlo entre los árboles-Regina perdió su cordura y empezó a llorar-Por favor ayúdenme

-Dígame donde se encuentra, los oficiales saldrán enseguida

-Estoy como a 4 cuadras del centro comercial principal, dense prisa.

-Los policías ya han sido informados, van en camino Regina, manténgase en la linea ¿de acuerdo?

-Si, de...

Las hojas entre los árboles se movieron y Regina se distrajo, esperaba ver a alguien, pero solo sintió un fuerte jalón en los pies, su teléfono cayo y ella grito por ayuda, trataba de ver a la persona pero nada, simplemente la oscuridad no se lo permitía.

A lo lejos las patrullas se oían y Regina podía escuchar a la operadora del 911 hablándole, ella gritaba auxilio y solo paro el jalón de su pie, pensó que era todo, que el sujeto había desistido al escuchar las patrullas, pero se equivoco, pudo ver la cara de su atacante, contuvo el aliento y sintió que su pecho sufría un colapso, su alrededor se sentía 10 grados bajo cero, y no podía moverse debido al miedo.

Fue lo ultimo que Regina Davis pudo admirar, con sorpresa y con miedo.

Las patrullas llegaron 5 minutos después, pero solo pudieron encontrar el bolso y el teléfono de Regina que aun seguía conectada con la operadora, era un misterio, ¿donde estaría el cuerpo de Regina? ¿Estaría viva?, quien planeo todo esto contra una joven mujer.

Pero bajo la luz brillante del viejo farol que antes no servia, los policías se cuestionaron si estaban ante un caso grave de mujer desaparecida.

Los siguientes días las noticias y periódicos no pararon de encabezar la noticia de la desaparecida Regina.

El estado de Oregon esta en shock bajo la desaparecida Regina Davis, trabajadora local del restaurante ¨Moul¨, la joven de 24 años de edad, desapareció sin dejar rastro, solo su teléfono y artículos personales.

Se a cuestionado si el asesino a sido su esposo Frank o algún compañero de trabajo, se realizaran interrogatorios a las personas que trabajaban a su alrededor.

El caso del año dice, muy parecido al de hace 3 años en la casa a las afueras de Oregon, donde se encontraron varios cuerpos y donde 2 personas fueron encerradas.

Sera que Oregon sigue siendo seguro para nuestra sociedad.

***

Hola a todos los que inicien leyendo esta historia.

El caso Molly Williams, es una historia que llevo tiempo planeando, pensando y mejorando, por lo que espero que les guste, que la disfruten y se sientan intrigados sobre que pasara capitulo a capitulo.

Como mi otra historia, subo hoy, que es un día especial para mi, el primer capitulo de lo que espero sea una historia emocionante, misteriosa y con algunas partes terroríficas.

Este capitulo se lo dedico a mi mejor amiga Carmen, que hoy esta cumpliendo años, es la chica con mejor suerte, positividad y alegría,  y espero eso, de la mejor vibra a esta historia.

Disfruten su lectura :)