El caso Molly William's

Capitulo 26-La casa de las pistas

Reclusorio de máxima seguridad de Oregon 10 pm

El silencio una manera muy pacífica de pensar las cosas, de no hacer preguntas de las cuales no quieres saber la respuesta

Así se encontraban el oficial Rayan Debbis y el consternado Richard Mills, después de como fue todo en Berville, ambos entraron en la patrulla y no volvieron a hablar, no había necesidad.

Pero ahora mientras Rayan esperaba a que Mike llegara a ayudarlo para ingresar a Richard de nuevo, el oficial sintió esa sensación de querer respuestas.

-Pensé que el que iba más decidido eras tú, y al final te rendiste al escucharla hablar

-Es fácil perderse en palabras tan ciertas oficial, en 3 años mis padres jamás vinieron a verme, sentían vergüenza de que su hijo se convirtiera en asesino-soltó un bufido melancólico y rasco su barbilla-Ni siquiera se detuvieron a escuchar mi versión

-Pero sigo sin entender Richard ¿Quién es el malo en esta historia?-preguntó fastidiado el oficial, fastidiado de no entender a donde iba todo-Eres tu o Molly

-Cada uno tiene sus errores por cosas que hemos hecho oficial, el pasado no cambia aunque a veces así lo deseemos-contesta Richard observando sus esposas

-¿Entonces tú mataste a todos esos chicos?

-No-levantando la mirada y con un nudo en la garganta hablo de nuevo, recordando-No entre a la tienda con ella

Rayan frunció el ceño sin entender muy bien por qué ese era un gran error, pero lo dejo seguir.

-Si yo la hubiera detenido, o entrado con ella, quizás nada de esto pasaría-dijo Richard con una sonrisa ladeada-Estaríamos en la universidad, preocupados por cosas menos importantes como conseguir pareja, entregar trabajos finales, exámenes, sin embargo eso ya no es posible

-¿Y fue tu culpa?

Richard levanto su mirada y vio a Rayan, firme y seguro para decir cualquier cosa.

-Lo fue, y realmente aunque me arrepiento, está Molly no miente por donde lo vea

Antes de que Rayan pueda abrir la boca para preguntar el por qué, un toque en la ventana a lado de él lo hizo voltear.

-Vengo por Richard-dice Mike

De forma rápida Rayan se recompuso y abrió la puerta.

-Gracias amigo

Juntos llevaron de nuevo a Richard a su celda y este se acostó como si nada hubiera pasado, estaba de vuelta en ese lugar oscuro, sin embargo ahora podía estar más calmado.

Rayan salió a pasó rápido de las celdas y Mike intento no perderle la pista para ir detrás de él.

-Rayan-dijo Mike tocándole el hombro y volteándolo-Deberías ir a casa y dormir un rato, te ves cansado

Y así era, Rayan tenía esas pequeñas bolsas bajo los ojos, mirada cansada, su cuerpo no se sentía tan fuerte como siempre, de verdad estaba cansado, pero su voluntad era más grande que todo lo que sentía.