Cayendo por mi padrastro [Eunhae +18]

Parte 7: Una clase diferente

Sentándose en el piso, me indicó que ubique mis piernas a los lados de las suyas, haciendo tope con mi trasero en sus empeines. La posición era por demás incómoda pero si quería evitar que Sataemin me violara, tenía que aceptar que ésta, era la mejor opción a pesar de su vergüenza.

-Así puedo corregirte y darte libertad de movimiento a la vez. - muy fácil en la teoría, tenerlo tan cerca, evaluando cada cosa que hiciera, hacía imposible que tome la iniciativa de practicarlo. - Anda Hae, no tenemos toda la noche.

Impulsándome un poco, intenté imitar el movimiento del video. Esperaba que Hyukjae se riera. Sin embargo, no lo hizo.

-No es solo hacia arriba, intenta empujar hacia delante a la vez. - Lo intenté, en verdad lo hice. Mi cuerpo se negaba a cooperar. Para estas alturas debería de pensar que era estúpido o lo hacía adrede. Un movimiento un tanto brusco acercó más a él y mi temperatura corporal comenzó a subir. - Perdón. - estaba a punto de negar y preguntar a qué se refería cuando sus dos manos tomaron mis nalgas, moviendo mi cuerpo de forma salvaje en círculos. El vaivén se sentía bien, y sus manos firmes eran tan placenteras presionando contra mí.

Sin negociar con mi cordura antes, me agarré de sus hombros y calmé los pequeños gemidos que querían salir contra su boca. Presioné sus labios sin permiso, fuerte y necesitado. Esperaba que me soltara, que me gritara. Sus brazos dejaron de mecerme en el aire y me bajaron a su regazo. Tomando mi cadera con fuerza, presionándome más contra él, su lengua se abrió paso entre mis labios, mandando a la mierda mi sentido común. Me estaba besando con el novio de mi madre, en el suelo de mi habitación y lo peor de todo, no sentía ni el más mínimo reproche hacia mi conducta.

Soltándome para tomar aire, nuestros ojos se encontraron y no pude entender lo que veía en su mirada. No todo era sexo, había miedo y algo más. Siquiera intente comprender cuando volví a arrojarme a sus labios. No quería pensar, no ahora que estaba rompiendo todas las reglas.

-Hae.. para. - sus manos aflojaron el agarre y entendí que necesitaba su espacio.

-Hyukjae yo.. yo lo siento. - me paré.- Iré a casa de Sungmin hasta que vuelva mamá, no se que me pasó..

-NO. No te vayas, no la nombres. No ahora que me has dado esperanzas.

-¿Q-qué? ¿No estás enojado? - se incorporó y me acarició las mejillas.

-No puedo enojarme con la persona que amo por besarme, Donghae. - un terremoto de emociones terminó de demoler lo que quedaba de mi. ¿Amor? ¿Hyukjae enamorado de mi?

-No lo entiendo.

-Desde que te vi, tus ojos.. creí que iba a enloquecer. Solía llevar a Heechul a ver a Yunho solo para verte, aunque sea de lejos. Claro que fruncías tanto la frente intentando hacerlo perfecto, que no lo notabas.

-P-pero sales con mamá. Vas a casarte con ella.

-Esa es la pequeña confusión, no hay anillo. Que haya aceptado mudarme aquí, son las consecuencias de invertir mi sueldo en competencias y no pagar las cuentas a tiempo.

-¿Te aprovechas de mi madre?

-Jamás lo haría.

-¿Por qué sales con ella entonces?

-Sus ojos, me recuerdan a ti. De hecho, no sabía que ella era tu madre hasta que vine ese domingo. Tenía en mente a un cabro insoportable, horrible y mala persona, que hacía sufrir a su madre. Cuando te vi, supe que mentía. - me miró fijamente - Seguir acá, era la única forma de estar cerca de ti. El chico de ojitos tristes que cuidaba de todos y practicaba horas extra para hacerlo estupendo en las competencias. Que hablaba solo, como si comentara con alguien más las cosas. Tan dolorosamente hermoso e intocable. - él se mordió los labios. No podía creer lo que escuchaba. ¿Cuanto tiempo había pasado deseándome en silencio?

-N-no hablo solo. Papá está en todos lados, me acompaña siempre y le cuento mis cosas. No sabía que tu.. es decir, debió ser difícil, las clases y eso..

-Al menos podía pasar tiempo contigo.

-Hyukjae, yo.. yo no se si pueda hacerlo. Mi madre va en serio con su relación y ya te lo he dicho antes, no quiero que ella me odie más de lo que ya lo hace.

-No te estoy pidiendo nada, Hae. Solo quiero que sepas que estaré para ti. - quería decirle que no lo quería, que se aleje, irme a casa de mi amigo.

Nuevamente mi cuerpo me traicionó y me abracé a él, entregándome por completo. Volvimos a besarnos, volvimos a desesperarnos en la boca del otro. Podía sentir sus manos bajando por mi cuerpo. Acariciando cada milímetro con suavidad. Enredé mis dedos en su cabello y tiré de él cuando ya no podía respirar.

-Déjame amarte, Hae. Por favor, no hay nada que desee más que hacerte mío.

-Creo que soy tuyo desde el momento en que me pediste que vuelva a casa, Hyuk.

Como si hubiera despertado a la bestia, sentí como mi cama se materializaba a mis espaldas y se colocaba sobre mi. Seguía con besos húmedos y su lengua se hacía dueña de la mía. Podía sentir como nuestros cuerpos se pegaban y la fricción despertaba a mi miembro. La sensación era exquisita. De pronto, sus manos se deslizaron por debajo de mi remera hasta mis tetillas y quise chillar al contacto. La simple presión en ellos, me ponía más y más a su merced. La ropa empezó a desaparecer entre nosotros, hasta que mis pequeños boxers terminaron en el piso. Ya no había vuelta atrás. Estaba en la cama con Hyukjae e iba a llegar hasta el final.

Perdóname Dara, mañana te haré llorar y tu perro guardián tendrá las razones que tanto buscaba para odiarme.

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Chan chan chaaaaaaaaaaaaaaan! Hyuk corresponde a los sentimientos de Hae.. 

Espero que les haya gustado el capítulo! El próximo.. se viene el lemon :O (espero que sea de su agrado)^^