Capitulo 33

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Pov Carolina

Abro mis ojos mientras bostezo, sonrío al ver a Black dormido. Depositó un beso en su mejilla y este comienza a abrir sus ojos.

-Buenos días. -digo feliz-

-Igual para ti. -se acerca y planta un beso en mis labios mientras le correspondo-

Me separo por falta de respiración y le sonrío. Al ponerme de pies rodeó la sabana en mi cuerpo, camino hacia el baño pero me detengo al escucharlo.

-Todavía falta dos horas para ir a la Uní, ven un rato más a la cama. -dice con su voz ronca y muerdo mi labio-

Vuelvo a la cama y sin dudarlo me pongo encima de el, este sonríe de lado y comienzo a besarlo. Este no es un beso el cuál solo busca placer, si no el cuál quiere dejarle saber que lo amo, este lleva sus manos a mi cintura mientras que yo continúo besándolo.

Siento como lleva sus manos a mi cadera y se gira para el quedar encima de mi. Se separa de mis labios para besar mi cuello, luego comienza a dejar rastros de besos por mis hombros hasta llegar a mi abdomen. Nuestras miradas conectan y vuelve a besar mis labios.

***30 minutos después***

Nos encontrábamos en la sala, viendo un programa en lo que decidíamos si ir o no a la Uní. Este me tenía abrazada, al menos volvía a sentirme protegida.

-¿Quieres ver a Aurora? -dice observando el programa-

-Si, hacen tres días o no se cuanto que no la veo. -le miro y este sonríe-

Me levanto y este hace lo mismo. Toma mis llaves y sin más entrelaza su mano con la mía. Vuelvo a sonreír como una idiota, como solía hacer cuando lo conocí. A el siempre le he regalado mis sonrisas, aunque me duela, aunque sufra el siempre lograra hacerme feliz.

***
Pov Jessica

La odiaba con todas mis fuerzas, no lo dejare ir, así tenga que hacer una y mil cosas. Salí del pequeño departamento que había comprado. Aunque no lo crean, he estado comunicándome con mi padre, hoy iría a verlo. Claro, solo para pedirle dinero.

-¿Que quieres Jessica? -me cruzo de brazos observando a Kayla-

-¿Quien te crees tú hablándome así? -le miro seria y está rueda los ojos-

-Alguien la cuál ya no es tu mejor amiga. -dice caminando hacia la cocina- Eres de lo peor. -ruedo mis ojos-

Le sigo y respiró hondo, me hace falta tenerla de mi lado, tendré que hacer algo para tenerla comiendo de mi mano. Así que tendré que darle dinero.

-Soy de lo peor, cuando te daba dinero, ¿ah? -está se gira y queda observándome- Era de lo peor cuando te salvaba el trasero de los otros, ¿ah? -digo acercándome a ella-

-Jessica, será mejor que te alejes. -dice dando pasos hacia atrás-

-Me tienes miedo... -Río- Dime, ¿Cuanto es lo que quieres? Sabes que si abres la boca te mato. -su rostro cada vez se veía más pálido, pero aún así volvió a contestarme-

-No necesito tu estúpido dinero. -dice asustada- Mejor lárgate. -

-Bueno, lo que quiero es que le dejes un pequeño mensaje a Carolina... -sonrío con malicia- Tú hablaras con ese amiguito tuyo el que solías tener sexo a cada fin de semana, el que es policía. -podía notar su coraje- Pues a el le dirás que te haga un pequeño favor, le dirás que valla a donde Carolina, y bueno, que le informe que su padre está vivo. -está niega y comienzo a sentir una rabia- Sabes que si no lo haces, tendrás un gran problema conmigo. -me acerco- Puedo fácilmente arruinar la carrera de tu padre. -le guiño y sin más salgo-

La Santa y La DiablaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora