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Cuando abrí, un ramo rosas rojas le tapaba la cara a alguien y sólo divisé las manos que lo sostenían. Todos nos quedamos mirando, confundidos y curiosos, hasta que el ramo de rosas bajó y pude ver el bello rostro de Cam, sonriéndome.

-Hola. - Me saludó.

-Hola. - Musité, confundida.

-¿Puedo pasar? - Preguntó.

-Adelante. - Animó Bri.

Recordé las palabras de Ethan de esta mañana, y me esforcé por no sacarle provecho al asunto. Al menos no a propósito.

Cam entró hasta quedar delante de mí y luego yo cerré la puerta, temiendo por lo que pudiera pasar a continuación.

-Son para ti. - Me dijo Cam cuado lo miré y me extendió el ramo.

No quería, pero no pude evitarlo y miré de reojo a Grayson, quién tenía un ceño ligeramente fruncido. Luego a Bri, quien con ojos como platos miraba la escena, ajena a la expresión de su novio y completamente emocionada.

-Gracias. - Dije tomando el ramo.

-Te dije que lo haría y bueno, yo siempre cumplo. - Musitó.

Antes de que pudiera decirle algo, Bri habló, pero para Grayson.

-Oh amor, eso me hizo recordar. Gracias por la rosa. - Besó su mejilla.

Grayson, desconcertado, frunció el ceño.

-¿Cuál rosa? - Preguntó.

El corazón se me aceleró en un intento de explotar de nerviosismo y las manos desprendieron un poco de sudor frío.

-¡Eh, Grayson! - Dije, adelantándome a la situación. -La rosa que le dejaste a Bri ayer, como disculpa porque no pudiste venir, ¿recuerdas? - Rogaba para que Grayson me siguiera la corriente y también para que no se enojara conmigo.

Mire de reojo a Cam, quien sabiamente guardaba silencio y su rostro me decía que trataba de comprender lo que estaba pasando.

Los ojos de Grayson me miraron, extraños. Fue una mirada que no supe describir, sus ojos algo me dijeron pero yo no entendí, estaba demasiado nerviosa como para ponerme a descifrar el mensaje que me gritaban.
Luego de un silencio, Grayson dejó de mirarme y le sonrió a Bri.

-Si, ya me acordé. Y de nada. - Dijo Grayson.

Suspiré de alivio. Después de eso, Bri volvió al ataque.

-Y Cam, ¿a que se debe este detalle con Pau? - Preguntó Bri.

-Emm... - Tartamudeó.

-Porque somos excelentes amigos, ¿verdad, Cam? - Interrumpí.

-Claro. - Dijo él.

-Chicos, les daremos privacidad. Cam y yo iremos a mi habitación. - Tomé la mano de Cameron mientras que con la otra aún sostenía el ramo. -Vamos. - Lo llevé hasta mi habitación.

La mirada pícara de Bri estaba a mis espaldas y la de Grayson, desconcertado, también nos seguía, hasta que nos deshicimos de ambas al cerrar la puerta.

Cerré los ojos y suspiré.

-¿Qué acaba de pasar ahí afuera? - Preguntó, Cam.

Lo miré y suspiré de nuevo, era hora de contarle todo.

-Tenemos que hablar. - Dije y le hice seña de que se sentara sobre la cama entre tanto que yo me sentaba a su lado y ponía el ramo sobre la almohada.

-¿Qué pasa? - Preguntó.

-¿Recuerdas que ayer cuando te dije que si alguna vez te había gustado alguien prohibido?

Él asintió.

-Bueno, creo que estoy enamorada de Grayson. - Admití.

-¡¿Qué tú que?! - Gritó.

-¡Shhh! - Exclamé, para que bajara su tono de voz. -Ethan me hizo darme cuenta de eso.

-Pero es el novio de Bri, y ella es tu mejor amiga. - Musitó.

-¿Y crees que no lo sé? - Dije, triste. -Pero uno no decide de quien enamorarse. - Cité, lo que hace unas horas había aprendido de Ethan.

-¿Y lo de la rosa?

-Bueno, Bri llegó ayer y la vio arriba de la mesa, me preguntó si fuiste tú quien me la había dado y dije que no, entonces le dije que era Grayson quien se la había dejado a ella, porque no podía decirle que su novio me la había dado a mí. - Expliqué.

-Eres una gran amiga, Pau.

-Claro que no, ¿que clase de amiga se enamora del novio de su mejor amiga?

-Bueno, sacando eso. Entonces, ¿entonces te molesta que yo...? Ya sabes.

-Cam, no quiero usarte para darle celos a Grayson. - Bajé la cabeza.

-No siento que me uses. Aunque Grayson si se pone celoso, cosa que no debería.

-Eres un gran amigo para mí, Cam. Es así como yo te veo. Perdón.

-No tienes porque pedir perdón. - Sonrió. -Sos hermosa, pero también eres como una amiga para mí.

-Gracias.

-¿Y ahora que piensas hacer?

-Trato de ignorar a Grayson.

-¿Por eso no le abriste la puerta? - Rió.

-¿Cómo sabes eso?

-Mi tia me dijo que lo vio sentado ahí afuera, como si esperara. No siempre podrás evitarlo, Pau. - Me dijo.

-Ya sé.

-¿Sabes? A lo mejor no es enamoramiento, simplemente es... deslumbramiento muy profundo. - Trató de animarme.

-¿Qué diferencia hay?

-Que en uno estás enamorada, en el otro no. - Rió, pero su broma no causó nada en mí e inmediatamente volvió a la seriedad. -Cuando me necesites, sabes que voy a estar ahí. - Me acarició la rodilla.

-Gracias. En serio, gracias.

Una vez aclaradas las cosas, Cam y yo pasamos el rato riéndonos y hablando, auque mi risa no fuera con mucho sentido.

-Creo que ya es hora de irme. No quiero perderme la cena. - Dijo Cameron.

-Está bien. Ojalá podamos vernos mañana.

-Claro.

Me paré para abrir la puerta de mi habitación y Cam me siguió. En cuanto la puerta me dejo ver la escena exterior, deseé cerrarla de nuevo de un solo portazo. ¿Cuántas veces necesitaba ver la escena amorosa entre Grayson y Bri para que mi corazón se rompiera por completo? Me paré en seco y Cam detrás de mi. Grayson y Bri se separaron y sus bocas volvieron a ser dos. Algo dentro golpeó mi corazón.

MANUAL DE LO PROHIBIDO ➳ gd   Donde viven las historias. Descúbrelo ahora