Esto se acabó

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-Veras Zoro yo...

ZORO

No pudo terminar su frase, cayó desplomada al suelo, estaba inconsciente.
Yo por un momento quedé paralizado, no reaccione, me quede blanco. Pasados unos segundos, rápidamente fui hasta ella, tenía pulso, pero no reaccionaba.
Probe a darle pequeñas y suaves cachetadas en la cara, le heche un poco de agua, la llamaba por su nombre... nada de lo que hacia funcionaba. No estoy acostumbrado a esto, pense en llamar a su hermana, pero, quizás, al ver que esta a solas conmigo se enfada, caí en Nami, puede que ella pueda ayudarme.
Marque su teléfono rápidamente.

-¿Si?- respondió al instante.

-Nami, soy Zoro, tengo un problema- dije asustado mientras mantenia la cabeza de Robin encima de mis muslos.

-¿Que pasa? Por cierto ¿has visto a Robin? Ya ha venido de su viaje a pasar unos dias, le hicimos una fiesta ayer, pero desapareció sin decir nada y no contesta el movil.-

-Se donde esta Robin, está conmigo-

-¿Enserio? Genial, menos mal. Llamare a sus padres y a su hermana para decirles que esta bien.- dijo aliviada.

-Verás, esque... mi problema es ese...- dije en tono preocupado.

-¿Que le has hecho maldito idiota?- edta vez estaba cabreada.

-No le he hecho nada, ha caido al suelo inconsciente... y... y no se que hacer. No reacciona- estaba asustado.

-¿Como dices? ¿donde estais?- dijo muy preocupada.

Le explique donde estamos, no es un sitio que la gente conozca, asi que le explique como pude donde esta el lugar.

-De acuerdo vamos para ya.- y colgó el teléfono.

Deje mi movil en el suelo y procedí a coger a Robin en brazos, como si de una princesa se tratase. No quise arriesgarme a subir las escaleras hasta la habitación, asi que la acosté en el sofá a la espera de Nami. Yo miraba su cara, es preciosa, increiblemente preciosa, me dispuse a acariciar su sedoso cabello.
Ya han pasado como 20 minutos y Nami aún no esta aquí.

-¡Idiotaaaaaaaa!- escuche gritando a la bruja desde fuera. -Abremeeeee ahora mismo-. Continuó.

Deje a Robin para abrir la puerta. Al abrir me encontré con Nami y Sanji, entraron como toros a la casa y fueron directos a ver a Robin.

-Deberiamos llevarla al hospital- dijo Sanji.

-Yo creo que deberiamos llamar a Hancock, quiza ella sabe lo que le pasa.- puntualizó Nami.

Sanji y Nami empezaron a discutir sobre que hacer, a quien llamar o a donde llevarla. La discusión no duro mucho, ya que Nami le pegó un puñetazo a Sanji cayandolo al instante.

-Esta bien, lo que quieras- dijo mi pobre amigo.

-Bien, vamos a llevarla al hospital en el coche de Sanji, logicamente una moto no es transporte seguro para ella en este momento. Zoro siguenos.- los dos asentimos.

Volví a cargar a Robin, sali de mi casa y la llevé hasta el coche de Sanji, dejandola en los asientos traseros. Nami se sento junto a ella, poniendo la cabeza de Robin en su regazo.
En 30 minutos lleguemos al hospital más cercano y rápidamente se llevaron a Robin para hacerle miles de pruebas.
Sanji fue a por un café, mientras Nami y yo estamos sentados en la sala de espera.

-Zoro, ¿se puede saber que hacías con Robin en esa casa?- preguntó Nami.

-No te importa maldita bruja.- conteste de mala manera. No le importa a nadie.

-Zoro, quizás te llamen para preguntarte, ya que estaba contigo cuando sucedió todo.- me dijo tranquila.

-Nami... la amo.-

-¿Qué?-

-Me la lleve para alejarla de todos, ella estaba muy agobiada, solo queria darle unas horas o un dia de libertad.-

-Zoro, ¿eres consciente de que se va a casar?-

-Si, lo soy. No me importa. Luchare por ella hasta el ultimo momento.- dije mirando al suelo.

-Zoro... ¿tan enamorado estas?- dijo poniendome una mano en la espalda en señal de que me comprende y me apoya a pesar de todo.

-Si, nunca creí que pudiera enamorarme. Pero asi es. En muy poco tiempo he llegado a quererla demasiado.- la miré a la cara, ella me sonrío con ternura. -Espero que no tenga nada grave.- mire al suelo de nuevo.

-Y yo también lo espero Zoro.- ella también bajó la mirada.

Sanji volvió con 3 cafés en sus manos, uno para cada uno.

-Toma Zoro.- me dijo de manera amable.

-Gracias Sanji.- cogi el café.

-¿Se sabe algo ya?- preguntó Sanji preocupado.

-No, aun no- respondió Nami.

-Deberiamos llamar a su familia y a Law, tienen derecho a saberlo.- dijo Sanji mientras daba un trago a su café.

-Vamos a esperar, quizá no es nada.- dijo Nami. -no deberiamos de preocupar a nadie por tonterias. De momento les he dicho que esta bien, que se habia ido a dormir a la casa de una amiga suya. De momento es todo lo que les diremos ¿de acuerdo?- los dos asentimos, Nami tiene razón.

Ya estamos como unas 3 horas esperando.

-¿Familiares de Nico Robin?- preguntó un doctor.

-Si, somos nosotros- dijo Nami.

-¿Qué es lo que le pasa?- dijo Sanji muy preocupado.

-De momento está bien y esta consciente, pero quisiera hablar con la pareja actual de la señorita Nico.-

-Soy yo- dije sin pensarlo dos veces.

-Muy bien, ahora hablare con usted. Ustedes dos pueden pasar a verla mientras tanto.-

-Muy bien- dijo Nami.

-Siganme porfavor.- dijo el doctor. Los 3 fuimos detrás de el hasta llegar a la habitación donde la habian metido. Nami y Sanji entraron a verla. Yo desde fuera vi como sonreia.

-Y bueno, ¿que es lo que le pasa?- pregunté muy preocupado.

-No tiene de que preocuparse, lo que le ha pasado a la señorita Nico es normal en algunos casos.-

-¿Qué casos?- me cruce de brazos mientras la observaba a través de la puerta.

-Vera señor...los mareos, desmayos, dolores corporales, migrañas... es muy normal.- me quede paralizado ¿de que esta hablando? ¿que es lo que tiene? -Su novia esta embarazada de unos 2 meses más o menos.- sonrió, yo simplememte no reaccione. -enhorabuena señor, enseguida se podran marchar a casa.- dijo dandome la mano.

Mi mundo se fue abajo, se acabó todo. ¿Sera por eso por lo que Robin no quiere estar conmigo? El niño es de Law, eso debe de tenerlo claro. ¿Que hago?. Miles de preguntas retumban en mi cabeza. Decidí entrar a la habitación. Nami, Sanji y Robin se me quedaron mirando, me miraban serios, supongo que mi cara lo refleja todo. Mire a Robin fijamente y solo pude decirle...

-Enhorabuena-. Y salí de la habitación.

Fui hasta el parking y cogi mi moto. Acelere todo lo que pude para salir de alli lo más rapido posible. Ahora lo entiendo todo. Lo mejor sera no seguir insistiendo.


PENSANDO EN TÍDonde viven las historias. Descúbrelo ahora