Pasados unos 10 minutos, pude ver la sombra de alguien delante de mi.
-Estaba deseando verte- me sonrió esa persona de manera retorcida.
-¿Qué haces tu aqui?- dije alterada mientras continuaba llorando.
-Resulta que vivo por aqui- sonrió de manera frívola.
-Muy bien- dije, me levanté para irme de alli, pero fui retenida por una mano en mi hombro.
-¿Que pasa? ¿puedes quitarme a mi novio y no puedes hablar conmigo?- giré sobre mi misma.
-Tashigi, yo no te quite a nadie, Zoro nunca fue tuyo- me contestó con una bofetada en mi lado izquiero del rostro.
-Por tu culpa... por tu culpa Zoro no quiere estar conmigo, te has metido en nuestra relación.- me gritaba, esto era lo que me faltaba.
-Estas loca...- dije por lo bajo.
-¿Loca?...mmm... si, eso me dicen. Quiero proponerte algo- me dijo mientras se sujetaba la barbilla.
-No me interesa nada que pueda provenir de ti- le dije alejandome de nuevo.
-Azme caso, esto si te interesa- me gritó y yo gire sobre mi misma.
Volvi a caminar, esta vez acercandome a ella.
-Adelante, dime- dije cruzandome de brazos.
-Alejate de él, o tu y esa cosa sufrireis la consecuencias.- me miró desafiante.
-¿Esa cosa?-
-Si, ese bebé debería estar en mi interior, y no dentro de ti- me volvió a gritar.
-Lo siento mucho, pero no voy a aceptar tu propuesta.- deshice los brazos para llevar mis manos a mi barriguita.
-Eso ya lo veremos- me volvió a golpear.
-Por favor Tashigi, ¡para!- intente decir.
-No, todo esto es culpa tuya, y si te crees que vas a atar a mi hombre por esa cosa que llevas en tu interior estas equivocada, yo haré que se de cuenta de quien es a la que realmente ama- seguia gritando.
Me engancho del pelo de manera agresiva, intento tirarme al suelo, pero fui yo la que se puso de rodillas para evitar que mi bebé pudiera recibir algun golpe, continuó pegandome, ella sabia como pelear, yo no.
Cogiendome del pelo nuevamente hizo mi cabeza hacia atrás, me pegó, me pegó un puñetazo muy fuerte, note como la sangre caía sobre mi rostro llegando hasta mi escote, me golpeo en la espalda con uno de sus pies rodeados de unas fuertes botas militares, eso hizo que cayera al suelo, con mis manos intente proteger lo que en ese momento mas me importaba, mi bebé, ella continuaba pegandome en la espalda, no ceso de tirarme del pelo y golpearme en la cara.
Pasaron como unos 5 minutos, yo ya no podia mas, me puse en posicion fetal y me aferre a lo que mas queria protegiendo mi bebé.
Cerré fuertemente los ojos, y pensé que lo que Dios quisiera, sería.
De repente Tashigi paró, no sabia porque, yo continuaba con los ojos cerrados.-¡Largate! Si vuelves a tocarla te mato.- escuche una voz femenina y posteriormente una fuerte bofetada.
Pude oir como unos pasos se alejaban corriendo.
-¿Estas bien?- abrí lentamente los ojos, era Nami. -Vamos, te llevaremos a un hospital.- me ayudó a levantarme, di unos cuantos pasos pero cai al suelo incando mis rodillas, me dolía todo.
-Dios Robin, yo no puedo cargarte- note como Nami lloraba levememte. -Espera aqui, Sanji esta en el coche, en un minuto estamos aquí.- levante la cabeza y vi como Nami se alejaba.
Como ella habia dicho, en un minuto ya estaban los dos conmigo.
-Robin, mi preciosa Robin, ¿que te ha pasado?- Sanji me preguntó alarmado, pero yo no pude responder.
-Tenemos que llamar a Zoro- dijo Nami.
-No- le dije en un leve grito.
-¿No? ¿porque?- me preguntó preocupada.
-No quiero que se asuste, luego le llamare yo.-
-Eso ahora no importa, tenemos que ir al hospital enseguida- le dijo Sanji a Nami.
Sanji, como un caballers me cargó en brazos con muchisimo cuidado, como si de una rosa rodeada de espinas se tratase.
Rapidamente me llevo al coche y me acostó en los asientos traseros.
Por el camino Sanji y Nami iban discutiendo sobre que hacer, sobre como me ocurrio esto y sobre a quien llamar.
Entre llantos, discusiones y leves palabras de mi parte, lleguemos al hospital mas cercano en cuestión de 15 minutos.
Sanji aparcó justo enfrente de la puerta del hospital, como alma que lleva el diablo, Sanji abrió la puerta del coche y me cargó como a una princesa entre sus brazos, corriendo me llevo dentro y Nami detras de nosotros pedia ayuda.-¿Que le ha pasado?- preguntó una voz mascula desconocida para mi.
-Le han golpeado- decia Nami llorando muy agitada.
Sanji me puso en una camilla en cuestion de segundos.
Yo seguía con mis ojos cerrados, notaba como la sangre seguia callendo por mi rostro.
Dos enfermeras me metieron en una habitacion donde fui atendida.
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SANJIMire mis manos, estaban repletas de sangre, mi camisa a juego con el espeso liquido rojo. Nami me miraba preocupada, pero a nosotros solo nos quedaba esperar.
Ella sacó de su bolso su movil, con el que marcó un número que no me quiso decir.-Robin está en el hospital. Tashigi le ha pegado, esta sangrando mucho, y nadie más que tú puede arreglar esto.- estaba llorando como las descosidas, intente abrazarla, pero deshizo el abrazo. -Por favor... no tardes- soyozaba. -Ella te necesita, aunque no lo sepa.- y en unos segundos respondió. -Gracias, te mando la direccion dem hospital enseguida.- colgó.
-Nami... ¿con quien hablabas?- le pregunté alarmado pero tranquilo.
-Necesita que este aqui, lo necesita aunque ella no quiera- me hablaba como si estuviera loca.
-¿Quien es Nami?- le cogi de las manos tranquilizandola.
-Lo necesita Sanji- se sentó mirando al suelo y yo me calle.
En un par de horas, el médico seguia sin darnos información. Alguien se nos acercó, un chico muy conocido.
-¿Que haces aqui?- dije enfadado.
-Nami me llamó, Nico me necesita, ¿dónde está?-
-Hace dos horas que se le llevaron y aun no sabemos nada de ella- Nami le respondió.
-Bien, voy a ver donde está.- dijo mientras caminaba.
-¡Law! Si has venido aqui, que sea para ayudarla, no para aprovecharte e intentar que vuelva contigo.- le dije muy serio.
-Sanji, mi prioridad es la salud de Nico, aunque no te lo creas. Ella decidió en su momento que no queria estar conmigo... y no voy a obligarla- y se marchó.
-Nami, Robin te pidió que no llamaras a Zoro, y tu vas y llamas a Law.- me enfade.
-Pero Sanji... Law es el mejor médico o cirujano de todo el país, si alguien puede hacer que Robin esté bien, es el.-
Nami tiene razón, a pesar de que no estoy de acuerdo con lo que ha echo. Zoro se enfadara muchisimo, pero Robin realmente lo necesita.
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PENSANDO EN TÍ
FanfictionNuestro Zoro se enamorara perdidamente de una chica preciosa y descubrira su nombre y algunas recuerdos del pasado que regresaran. El tendrá que decidir entre amarla o luchar contra ese sentimiento. Posdata, es la primera vez que escribo, cualquier...