"Lloraba a las paredes de mi habitación, mis lágrimas empapaban cada centímetro de mi cara. Gritaba a aquellas cuatro paredes todo lo que quería gritarle a tu persona, pero no estabas. La casa se sentía sola, como mi ser, deshabitado. Sigo con la esperanza de verte volver, para olvidar, y empezar de nuevo".
- Ya basta, paren o no les seguiré contando - amenacé mientras hacía el amago de levantarme del sillón mientras recibía un fuerte empujón de Doyoung, volviéndome a colocar en mi lugar.
- Y una mierda - pestañeó - tú continuas
- Jaehyun me besó muy cerca de aquí, - apunté casi en mis labios - y Yuta me besó aquí - pegué la palma de mi mano en mi frente.
Veía como Doyoung gritaba de emoción, mientras acto seguido Lucas le lanzaba miradas de rareza, mientras que Ahn parecía la única normal, aplicándose brillo de labios.
- Me he perdido - contestaba Lucas mientras rascaba su nuca.
- ¿Desde cuándo? - suspiré, Lucas tenía el don de desconectar su cerebro del mundo actual, da igual el momento que sea.
- Desde que te sentaste en ese sillón y abriste la boca - sonrió dulcemente mientras yo me levantaba dispuesta a ahorcarle - ¡Es broma! Dios Hyeon, no te recordaba tan agresiva - se acomodó su inexistente corbata, mientras aclaraba su garganta - ¿Con quién te vas a quedar?
- Yuta
- Jaehyun
Contestaron a la vez Doyoung y Ahn. Al parecer el pelinegro prefería al nuevo miembro japonés, mientras que la pelinegra seguía con la tradición del chico coreano.
- ¿Y por qué no con los dos? - sugirió Lucas, pasivamente. Cuándo crea que soy estúpida, pensaré en Lucas y se me pasará.
- Si tan solo todos tuviéramos tu suerte, Hyeon - respondió Ahn. ¿Qué está pasando?
- ¡Pero si tienes novio, Ahn! - respondí.
- Ya sé, pero dos siempre son mejor que uno - me guiñó un ojo. De verdad que me tengo que hacer amigos nuevos.
- Concuerdo con Ahn, Hyeon - sonrió Doyoung para más tarde volver su semblante serio - no te agobies, Hye, experimenta todas las sensaciones que puedas con ellos dos, pasa tiempo con ellos, conociéndoles, dándoles una oportunidad - me sonrió fugazmente.
- El tiempo colocará a cada quién es su lugar - comentó Lucas.
- Y cada sentimiento donde debe estar - finalizó Ahn.
Incluso los vellos de mi brazo se erizaron, mis amigos, eran el mejor tesoro que tenía en esta vida, y podía jurar que en muchas más.
- ¿Os habías estudiado esas frases cada uno? ¿Para decirlas a la vez? - pregunté mientras notaba como Doyoung resoplaba acompañado de un Lucas que negaba con la cabeza mientras Ahn se había puesto de pie y me decía que ni en momentos serios podía estar como tal.
Los amo, sí, demasiado.
°°°
- No, Lucas, no, no, y otra vez no - estaba loco - alucinas si crees que ella me va a dejar traerlo aquí
- Tampoco es como si vosotras habláis lo suficiente como para pedirle permiso, Hyeon - chisté mi lengua, vaya que aquello me dolió - por favor, Kun y WinWin son capaz de matarlo de hambre, o de estrés - se le notaba demasiado agobiado.
Suspiré - Está bien, pero - el grito de Lucas cortó mi voz, mientras yo tuve que separarme el móvil del oído. ¿Cuándo se va a dar cuenta que su voz es demasiado varonil como para chillar de ese modo? Lo detesto.
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Empı́reo↬☾N. Yuta☽
Fanfiction;⭑∿ Con el brillo de sus pupilas, era capaz de encender estrellas. ❛¿Cómo se sentiría aquél luminoso cielo al saber que una de las más brillantes estrellas se encontraba justo a mi lado? Así era Nakamoto Yuta; un leve pero int...