¿Cómo pude caer en tus brazos?

Capítulo 19

A una manzana de la casa de fraternidad las calles estan oscuras y silenciosas. Las demás casas de fraternidad no son tan grandes como la de Jungkook. Al cabo de una hora y media caminando y preguntando al GPS de mi celular llego al campus. Totalmente sobrio ya pienso que en vista la hora que es casi es mejor que ya me acueste de modo que entro a una cafetería.
Cuando la cafeína hace efecto me doy cuenta que hay varias cosas que no entiendo de Jungkook, como porque esta en una casa de fraternidad con un montón de hijos de papá cuando él es solo un ordinario y que pasa de un extremo a otro. Sin embargo son solo cavilaciones teóricas ya que ni se porque pierdo el tiempo pensando en él y después de lo de esa noche no pienso ser su amiga.  No puedo creer que lo haya besado. Talvez ese es el peor error que he cometido y en el instante que he bajado la guardia me ha atacado con mayor crudeza que nunca, pero espero que el hecho de haber besado al "virgen" le de la vergüenza suficiente para no contarlo.
Tengo que pensar en una buena explicación para darle a mi madre y Hoseok por mi comportamiento de anoche. No por lo del beso, obviamente, porque de eso no van a enterarse nunca. Pero tambien debo conversar seriamente con Hoseok de decirle todo lo que hago a mi madre. Ahora soy un adulto y no tiene que estar enterandose lo que hago siempre.
Cuando llego a la puerta de mi habitación me duelen las piernas y suspiro de alivio cuando giro la perilla.
No obstante, casi me da un infarto cuando veo que Jungkook esta sentado en mi cama.

-Suficiente!-. Digo gritando cuando entro en la realidad.

- Donde estabas?- pregunta tranquilamente. - He estado dando vueltas durante dos horas intentando encontrarte.  

"Qué?"

-Qué? Cómo? Porqué?- si iba a hacer eso porque no se ofrecio a llevarme a casa antes?. Y lo mas importante porque no se lo pedi yo cuando me dijo que no habia tomado?.

- Es que no me parece buena idea que estes caminando de noche solo-

Y, ante el hecho que ya no soy capaz de entender sus expresiones y de que Jimin este dios sabe donde y que me encuentro a solas con él.
Lo unico que puedo hacer es echarme a reír. Es una risa nerviosa, frenética, poco típico de mi. Desde luego no me rio porque me de gracia la situación sino porque estoy demasiado agotado y mi mente no da para más.

- Largate Jungkook, lárgate!-

El me mira y se lara las manos por el pelo. Al menos eso me da una pista. En el poco tiempo que llevó conociendo a este chico frustrado llamado Jeon Jungkook, he aprendido que cuando hace eso es porque esta frustrado o se siente incómodo. O talvez sean las dos cosas.

- Taehyung, yo....- empieza pero unos terribles golpes y unos gritos lo interrumpen.

- Taehyung! Kim Taehyung, abre la puerta ahora mismo!-

Mi madre, es mi madre, a las seis de la mañana.... y un chico esta en mi habitación.
Me pongo en acción de inmediato como hago siempre que tengo que lidiar con su furia.

- Demonios, Jungkook métete en el armario.- susurro para levantarlo de la cama.

En me mira con expresion divertida.

- No pienso esconderme en el armario, tienes diecinueve años nene-

En cuanto dice eso se que tiene razón pero él no conoce a mi madre.
Gruño con frustración cuando ella vuelve a tocar la puerta y cuando volteo a ver a Jungkook el se cruza de brazos con una posición que me dice que no voy a poder moverlo. De modo que me miro al espejo me paso la mano debajo de los ojos y me cepillo los dientes, me hecho un poco de pasta dental en la lengua para camuflar en olor a vodka.
Compongo una risa amable y abro la puerta, pero entonces veo que mi madre no ha venido sola. Hoseok está a su lado, como no. Ella parece furiosa, y él parece... Preocupado? Dolido?.