Capítulo 3

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Una vez solo empiezo a deshacer las maletas pero acabo rápido ya que había traído poca ropa la dejo perfectamente doblada y guardada en el cajón de la pequeña cómoda y el resto colgada en el armario. Hago una mueca de dolor al ver todas las prendas de cuero y de estampado animal que llenan el de mi compañero.
Al sentir el agotamiento del día me tumbo en la cama, una extraña sensación de soledad se apodera de mi y no ayuda en nada que mi compañero se haya ido por muy incómodo incómodo que me hagan sentir sus amigos, tengo la impresión de que no pasará mucho tiempo aquí y que tendrá invitados con frecuencia.¿Porque no me pudo tocar un compañero que tenga gustos como yo?. Pero viendo el lado positivo tendré la habitación para mí sola pero no se porque todo esto me da mala espina. Hasta ahora la universidad no está siendo como yo la esperaba.
Mañana será mejor , tiene que serlo.
Cojo mi agenda y mis libros de texto y relleno mi horario con las asignaturas del semestre y anotó las posibles entrevistas para el club de literatura.
Quiero buscar un grupo donde haya personas que tengan intereses similares a los míos. No espero hacer muchos amigos solo los necesarios para poder ir a comer de vez en cuando. Planeo una excursión fuera de campus para mañana y hacia comprar algunas cosas para el cuarto me gustaría decorar mi espacio de la habitación para sentirme como en casa. El hecho de no tener auto me dificultará un poco las cosas. Cuanto antes consiga uno mejor. Tengo bastante dinero entre los regalos que me dieron por mi graduación y mis ahorros que conseguí trabajando en una librería en verano. El hecho de vivir en el campus me proporciona acceso total al transporte público.
Mientras repaso en los horarios y los chicos raros y tatuados me quedo dormido con mi agenda en la mano.
A la mañana siguiente, Jimin no está en su cama, me gustaría conocerlo mejor pero será difícil si nunca para en la habitación.
Cojo mi bolsa de aseo y me dirijo a las duchas, puedo decir que unas de las cosas que menos me gusta de vivir en la residencia de la universidad es el momento de la ducha... Ojalá las habitaciones tuvieran su propio cuarto de baño.
Lo peor de todo es que las duchas son mixtas, no puedo creer que permitan esto.
Veo una ducha abierta y paso apresuradamente entre los chicos y chicas semidesnudos, corro la cortina hasta que esté bien cerrada me desvisto y dejó la ropa en el colgador exterior palpando a ciegas con la mano al otro lado de la cortina.
El agua se demora en calentarse y durante todo ese rato me pasó nervioso y temiendome de que alguien habrá la cortina que separa mi cuerpo desnudo de los demás paseándose por ahí de momento la vida universitaria me está pareciendo muy extraña y solo llevo dos días.
La ducha es minúscula apenas hay espacio para estirar los brazos. Mi mente viaja hasta Hoseok y mi vida en casa, distraída me vuelvo y le doy con el codo a mi ropa y la tiró al suelo mojado, el agua cae sobre esta y la empapa por completo.

- ¡Rayos!- Gruño para mi mientras cierro el grifo del agua con rabia y me envuelvo la cintura con la toalla.

Recojo la pila de prendas mojadas y corro por el pasillo por el pasillo esperando con todas mis fuerzas que nadie me vea. Llegó a mi cuarto, introduzco la llave en la cerradura y me relajo al instante en cuanto cierro la puerta al entrar.
Hasta que me volteo y veo al chico de cabellos negros, tatuado y grosero tirado sobre la cama de Jimin.

¿Cómo pude caer en tus brazos?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora