Capítulo 23 - Todo comienza a tener Sentido

97 8 10
                                    

Claro que se quién eres, Oliver. El amigo muerto de Howl. –Pensé. Entonces me di cuenta de que estaba tocando fondo, estaba en un agujero negro de confusión y terror. ¡Excelente! ¿No? No es la primera vez que veo a gente muerta... ¿Verdad, Justina? –Todo lo que pasaba por mi mente mientras el tal Oliver me miraba preocupado de pies a cabeza. No pude más. Caí.

-Oye, oye. Tranqu...- Le interrumpí al desmayarme, creo que él me atrapó antes de caer al suelo, o no lo sé, lo último que vi fue a ese chico venir hacia mí.

¿Estaba al borde, o ya estaba en el abismo? ¿Perdí de una vez la cabeza? Bueno... ¿completamente?

–Está más de dos semanas sin querer vernos y de repente la encontramos en el suelo frente a su habitación... ¡Traición! Nos ha cambiado por otros.

–No lo sé, no podría creerlo así, Howl.

–Pero así ha sido, Luke.

Mis ojos aún estaban cerrados, pero en medio de las náuseas y el mareo, distinguía las voces de Luke y Howl.

– ¿Qué hacen aquí? – Pregunté mientras me levantaba en la cama y corría mis piernas hacía arriba.

– ¡Brielle! – Dijeron ambos con un tono de voz elevado.

-Al fin despiertas, tenemos tantas cosas que preguntarte. – Howl apoyo sus brazos en la orilla de la cama estando de rodillas frente a ella.

Fue ahí cuando vi a Howl y recordé.... Recordé con claridad a Oliver, mis ojos no se apartaban de él y cuando éste lo notó, sonrió y me extendió su mano.

-¿Está todo bien, Smith? Sabes que estamos aquí para ayudarte. – Su cabello largo y ondulado caía sobre su frente y sus ojos, los cuales transmitían tranquilidad.

-Lo sé, solo necesito que se vayan de aquí, quiero... no, necesito estar sola.

-Smith. –Luke se acercó a mí temblando como siempre, de nervios.

-No. Váyanse, tengo mucho en que pensar.

Howl dio un fuerte suspiro y se puso en pie. – Si es lo que quieres.

-Lo siento. – Voltee la mirada hacia un lado.

Así fue como los chicos abandonaron la habitación y yo nuevamente me quedé sola. La noche anterior había sido un asco... cada vez más las cosas se ponían horribles en el hospital, en mi habitación, en mi cabeza. Aún no sabía si lo que había sucedido había sido una pesadilla o realmente había visto al amigo fallecido de Howl... ¿Cuál era su nombre? Oliver, claro.

Durante semanas había acabado los libros que Luke me había dado, todos y cada uno de ellos. Estaba aburrida ahí dentro, pero mis alucinaciones eran más escasas y no tenía tantos problemas, por eso decidía quedarme ahí en lugar de salir a sufrir.

-Sigo preguntándome cómo es que llegaste hasta aquí, niña.

Una voz masculina vino desde la esquina de mi habitación mientras yo me peinaba, voltee rápidamente y tomé uno de los libros que estaban en el suelo.

-¡¿Quién está ahí?! – Pregunté señalando el lugar con el libro amenazadoramente.

De pronto, salió entre las sombras un chico con el cabello rizado y con una sonrisa amigable, se me hizo conocido.

-¡¿Julio?!

-¡Marco! –Se cruzó de brazos. –Jamás te aprendiste mi nombre, eso es de mala educación, niña con nombre de princesa.

-Deja eso, Julio, y dime cómo llegaste hasta aquí sin que nadie te vea, o peor ¿cómo sabías que estaba aquí?

-Veo que eres muy tonta para entender todo esto, o sólo lo sabes e intentas negarlo. –Tomó una tira de pintura seca que se despegaba de la pared en mal estado.

-¿De qué hablas?

-Vine porque me parece que todos juegan contigo y con tu pobre cabeza. No seas tonta Brielle y analiza las cosas ¡Analiza todo! Saca momento por momento de tu mente y agrúpalos de acuerdo a cada uno de los hechos, a cada una de las experiencias extrañas que has tenido, sácame a mí e intenta concluir cómo es que llegué hasta aquí, como es que ellos llegaron hasta ti... ¿Tan difícil es? Deja de ignorarlo y comienza a aceptarlo.

-¡Aceptar ¿qué?!

La puerta se abrió de golpe y cuando giré hacia mi izquierda para verlo, ahí estaba Oliver de pie.

-Dile que no fue su culpa. –Gritó.

-¿A quién?... ¡¿De qué hablas?!

-¡Ve y dile que no fue su maldita culpa! – Comenzó a caminar hacia mí lentamente.

-¿A Howl?

-A quién más... ¡Claro que a Howl!

-¡Tú estás muerto! ¡Largo de aquí! ¡No existes de verdad! –Me giré y me arrodille sobre el suelo cubriendo mis ojos mientras comenzaba a tener un ataque de pánico.

-¡Smith, escúchame, ve y díselo! Será tarde cuando ya lo hagas, será...

-¡Brielle! –Escuché de pronto un gritó muy fuerte de preocupación y pude reconocer la voz, era Patryk.

Me puse de pie rápidamente y corrí lanzándome hacía él para abrazarlo, pero caí al suelo golpeando mis antebrazos sobre la madera humera y me di cuenta que estaba sola, no había nadie más en la habitación y la puerta jamás se abrió. ¿Dónde estaba Julio? ¿Dónde estaba Pat? Y... ¿Oliver?

De pronto recordé las últimas palabras de Oliver "Será tarde cuando ya lo hagas" ¿Estaba pasando algo con Howl y esto era una advertencia? Me puse de pie rápidamente y me metí por la ventilación para dirigirme hacia la habitación de Howl. Ecos de voces corrían por los túneles, y una frase de ellas me hizo enfriar la sangre... "Déjalo, está muerto". Gatee más rápido hasta detenerme en su habitación y ver por la ventanilla una alfombra empapada de sangre y a Howl en medio de ella.

¡Qué diablos pasó! Quería lanzarme ya mismo por ahí, pero la altura era demasiada y los tipos de Zachary estaban ahí. Howl no se movía y desde donde yo estaba no podía ver si respiraba, comencé a temblar y a desesperarme completamente, vi sus muñecas y ambas tenían heridas provocadas por algo con mucho filo, no paraban de sangrar. Estaba pálido y no reaccionaba a los movimientos de los imbéciles que estaban ahí.

-¿Qué hacemos con él? –le preguntó un tipo al otro.

¡Llévenlo al maldito hospital, idiotas! –Grité dentro de mí, Howl se estaba muriendo.

Un chico con el cabello ondulado se acercó al cuerpo pálido de Howl, viéndolo detalladamente, cubrió su boca y se dejó caer hacia atrás sin apartarle la mirada con un gesto de espanto en su rostro... Era Howl.

¿Cómo? ¿Eran dos Howl? El otro estaba bien, sin heridas y lloraba desconsoladamente viendo a su "otro él" tirado en el suelo sin reaccionar... en eso los tipos del personal tomaron a Howl, uno de ellos lo sujetó de sus brazos y el otro sosteniéndolo de sus piernas tratando de levantarlo y llevárselo afuera. Howl que parecía estar bien, al er esto, se lanzó desesperadamente al cuerpo que se estaban llevando y cayó al suelo nuevamente... eso fue demasiado extraño, porque los tipos no podían verlo, y en traspasó lo que aprecia ser... su propio cuerpo.

-Te lo dije.

Levanté la mirada muy lentamente y pude ver frente a mí, dentro del túnel de ventilación... a Oliver.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 05, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Kings Park AsylumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora