Kings Park Asylum

Capítulo 3 - De un Hospital,a otro.

Al llegar a Kings Park, pase directo a la habitación de Nathaniel. El ver la escena me preocupo.

El estaba en una de las esquinas de su habitación, sujetando su cabeza, y llorando a llantos. Lo que decía era igual de preocupante.

-¡Alejate de mi!, ¡Basta!, ¡Vete!.-Gritaba viendo hacia la otra esquina de su habitación.

-Nath, Nath.. ¿Qué pasa?.-Fuí rápidamente a el, pero parecía no escucharme.

-¡Zoe!, ¡Zoe!, ¿Dónde estás?-Gritaba cubriendo sus ojos. Baje a el y lo abrace con demasiada fuerza.

-Nath, soy Brielle, por favor, tranquilizate.-El se aferro a mi, y cerro sus ojos con más fuerza.

-No dejes que me lleve Brielle.

-¿Que te lleve, quién?-Pregunte confundida.

-El, el..

-¿Quién es el, Nathaniel? ¡Por Dios!-Lo tome con fuerza de ambos hombros he hice que me viera, pero fue algo imposible.

-Basta, ¡Sr Marshall! ¿Por qué diablos no han llamado a un médico? ¡¿Acaso esto no le deja ver lo mal que esta su paciente?!-Sandy, Cristina, Estephan, y Sr Marshall, marcaron al mismo tiempo, estaban muy asustados.

Nathaniel seguía aferrado a mi, y lloraba entre sollozos de dolor.

Pasaron 30 minutos, y unas personas llegaron por Nathaniel, dijeron que lo internarían en un hospital para hacerle unos exámenes.

Pedí la dirección de dicho Hospital, y cuando ellos se fueron, subí a mi auto y fui hacia allá. 

Las dos horas que estuve ahí, las sentí eternas, hasta que una enfermera salió y dijo que fuera a casa, que Nathaniel estaba descansando, y mañana podrían darme el resultado de sus exámenes.

Fui a casa, y busque todos mis cuadernos , y libros, el día siguiente tendría que ir a la clases nuevamente, pero solo lo soportaría un tiempo mas, para la graduación.

Un mes más.

Cuando amaneció, me levante mas temprano de lo común, pude alistarme con tranquilidad, y desayunar con la lentitud que quisiera, ya que era aun muy temprano para ir a la preparatoria.

Al acabar, salí de casa, y pensé que si había podido utilizar el auto de mamá para ir a trabajar, podía utilizarlo para ir al colegio. Así que fui por las llaves, y subí al auto, poniéndolo en marcha, y conduciendo a la preparatoria.

Estando en el salón de clase, todos hablaban de sus vacaciones, y lo bien que las habían pasado. Y yo no quería opinar nada de eso. Linda había viajado ambos meses, y Elsa solo el segundo mes.

-¡Brielle!, ¡Tienes tanto que contarnos!-Dijo Linda muy emocionada, como si mis vacaciones habían sido mejor que las suyas.

-No, claro que no.-Respondí.

-¿No? ¡Pero si Elsa me ha contado todo!.

-¿Entonces que quieres saber?-Reí negando.

-Quiero oírlo de ti.-Se sentó enfrente mío esperando a que yo empezara.

-No, es demasiado largo.-Si supieran que estoy loca, ah vaya divertidas vacaciones.

-Vamos Brielle, cuéntame sobre este chico del cual te enamoraste.-Me sonrió con demasiada emoción.

-¡Elsa!-Voltee a Elsa muy molesta.

-Yo solo le conté la verdad Brielle.-Respondió.

Linda rió y negó.