Capítulo 22

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Hace un par de semanas Tayler ha estado asistiendo a una psicóloga infantil ya que los saltos por las noches debido a lo que vivió fueron aumentando, sumado a que comenzó a tener pesadillas por las noches.

Nosotros volvimos a la normalidad, a trabajar como se debía.

- Christopher ¿No crees que es hora de que Tayler conozca a su abuela?

- ¿A mi mamá?

- Claro porque no, además hace tiempo no hablas con ella, ya ni recuerdo cuando fue la última vez que la llamaste.

- Ella tampoco lo hace, sabes que no está de acuerdo con mi profesión y cuando la llamo siento que me responde por obligación.

- No digas eso - tomé su mano - inténtalo, debe extrañarte y se nota que tú también, cómprale un boleto y la traes.

- No creo que sea buena idea.

- Tayler estará feliz, piénsalo.

- ¿Qué cara pondrá cuando sepa que es abuela? Ni siquiera sabe que tengo novio.

- ¿No le dijiste que tienes novio? ¡Vaya gracias! - solté su mano.

- Ay Erick si con suerte habla para decirme hola.

- Entonces con mayor razón traela - me levanté a buscar la laptop - averigüemos todo y la llamas.

- ¿Por qué tan interesado en que venga?

- No lo sé - fingi no saber, tenía algo en mente desde hace un par de semanas, una sorpresa para los dos. Bueno eso sí yo le agradaba a ella y ella a mí.

Terminé por convencerlo aunque me costó hacer que la llame, se llevó unos cuantos golpecitos obviamente no fuertes ya que era la única manera en que se suelte.

- ¿Contento?

- Yo debería preguntarte eso, es tu mamá no la mía.

- No lo sé, años que no la veo y la verdad no sé que pase.

- Sin cobardía ¿eh? - me senté en sus piernas, últimamente lo hacía mucho, me estoy volviendo un estúpido tierno de a poco - yo sé que la extrañas.

- Lo hago - bajo su mirada ya que tenía sus ojos algo cristalizados.

- No no no, sin llantos - levanté su cabeza de inmediato.

En unos días la tendríamos acá, debo admitir que si estaba nervioso porque Christopher era mi novio, antes me hubiera dado lo mismo pero ahora no.

Tendría que comenzar a preparar lo que tenía en mente, no sé si a Christopher le gustaría en realidad.

Fui a la habitación de Tayler, me quedé jugando un momento con él.

- Oye - lo senté frente a mi - necesito de tu ayuda.

- ¿Ayuda? - cada vez que lo escuchaba hablar era una ternura inexplicable.

- Sí, vendrá una persona a conocerte desde otro país ¿Genial no?

- ¡Siiiiii!

- Entonces me ayudarás a...digamos hacer algo lindo porque es alguien que tu papá quiere mucho.

- ¿Quién?

- No puedes saber aún, eso sí, no puedes decirle nada a tu papá - advertí - es una sorpresa y si le dices me voy a enojar.

Él solo asintió, esperaba que no suelte nada o realmente me enojaría con él, quizás debí contarle un día antes.

- ¿Qué hacen?

- Estaba jugando con este feo - me referí a Tayler.

- No soy feo.

- Si lo eres.

- No - frunció el ceño, en ese sentido era como yo.

- Bueno, no lo eres pero el más lindo en esta casa sigo siendo yo ¿verdad Christopher?

- Lo siento, yo no me meto en discusiones - salió de la habitación como si nada.

Contra El Pasado - Chriserick (Tercera Parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora