Amor de clases

Capitulo 22 La confirmación

La mañana llega después de una fuerte tormenta, Jung está firmemente abrazado a Park. Ella se siente protegida entre sus brazos, cree que puede superar cualquier miedo si Jung está a su lado, quiere saber más de el, de el hombre al que ama.

- Jung, - Dice Park mientras acaricia el pecho de Jung desnudo. - háblame de tus padres, nunca hablas de ellos.

- No suelo hablar de ellos porque me costó mucho superar su muerte.

- Valla, en ese caso si no me lo quieres contar lo entenderé perfectamente.

- ¡No! - Jung se incorpora un poco sobre la cama. - Claro que te lo contaré, quiero que lo sepas todo de mi. Yo tenía ocho años cuando ocurrió el accidente, en mi escuela se presentaba un concurso de ciencia en el cual yo participaba. Recuerdo lo mucho que insistí a mis padres para que fueran a verme, mi padre trabajaba en una fábrica de muebles y tuvo que pedir la tarde libre para poder asistir. Fue a recoger a mi madre a casa, el plan era que después del concurso volveríamos todos juntos a casa. Pero eso nunca ocurrió. Un conductor borracho se cruzó frente al auto de mis padres, el golpe fue tan fuerte que los tres murieron en el acto, mis padres y el otro conductor. Cuando los servicios de emergencia llegaron, ya no se podía hacer nada por ellos. Yo ese día gane el concurso, y no podía entender por qué mis padres no estaban alli conmigo celebrándolo, por qué se retrasaban. Mis compañeros se iban marchando todos con su familia, y yo estaba sentado con mi trofeo esperando que vinieran a recogerme. Al cabo de unas horas vi llegar a mi abuela con los ojos cubiertos de lágrimas, en ese momento entendí que algo había pasado.

- Debiste sufrir muchísimo.

- Es muy duro perder a tus padres a la vez, y por culpa de otra persona, pero lo peor estaba por comenzar.

- ¿A qué te refieres?

- Los servicios sociales quisieron quitarle la custodia a mi abuela una semana después de que mis padres fallecieron, alegaron que al no tener más familiares que se hicieran cargo de mi y al ser mi Noona tan mayor, creerían que estaría mejor en un centro.

- ¡Eso es ridículo!

-Mi abuela no lo sabe, pero ese día lo escuché todo detrás de la puerta, dijeron que ella ya no estaba en condiciones de trabajar, y que no podría mantenerme. Mi abuela les pido una oportunidad, unos meses para demostrar que podría cuidarme, no soportaba la idea, después de haber perdido a su hija, perder también a su nieto eso sería muy duro para ella. Durante seis meses vi a mi abuela trabajar en todos los trabajos posibles para poder mantenernos, me jure a mí mismo en ese instante que trabajaría en un futuro para devolverle a mi abuela todo el sacrificio que hizo por mi. Así que, cuando cumplí la edad adecuada para trabajar, empecé a ganar dinero para que mi abuela pudiera descansar. Mientras los demás chicos salían a divertirse con sus amigos o disfrutaban de su juventud, yo trabajaba de camarero, dependiente, incluso llegue a fabricar pan, me levantaba a las cinco de la mañana y preparaba pan en la panadería de mi barrio, el dueño siempre me daba pan para llevarme. Y luego también gracias a So Ji y So Ah, sus familias siempre nos ayudaron mucho a mi Noona y a mi, nos mandaban comida cuando mi abuela estaba enferma o cuando hacían mucha comida.

- Eres un buen nieto. - Esa frase hace que Jung se ría.

- Bueno, es hora de levantarse.

- ¡No! - Exclama Park empujando por Jung para que continúe en la cama. - estoy muy a gusto aquí contigo, quiero estar un rato más.

- Pero en un rato vendrá Yoona con el desayuno, ¿Que pasara si entra y nos ve en la cama?

- No me importa, quiero que todos sepan que estamos juntos.