8:30 pm
La gente vestida de blanco caminaban apresurados por toda la clínica, algunos chocaban torpemente entre sí, a otros se les caían los papeles y los instrumentos que llevaban , todos tenían mucho trabajo iban de un lado a otro, algunos se rascaban los cabellos nerviosos viendo como las personas no paraban de llegar, pero aún así los atendían con una gran sonrisa en sus rostros incluso el personal de otras área se encontraban hay ayudando al área de sala de parto, ayudando a los ginecólogos y obstetras que al decir verdad no es que fueran pocos solo es, que el número de omegas y betas que se iban aliviar ese presiso día, era un número mucho mayor de los que estaban acostumbrados.
Era algo raro a decir verdad, era como si los omegas y betas mujeres se hubiesen puesto de acuerdo para aliviarse el mismo día.
Y entre todo ese alboroto, una linda Omega de cabellos castaño piel clara asemejándose a la nieve, junto con unos hermosos ojos cafes y con una inmensa pansa iba llegando a ese lugar, la linda Omega agarraba fuertemente de la mano al alfa con el que iba este solo hacia muecas raras de dolor mientras trataba de calmarla, desesperado casi da un grito al ver a toda la gente en la clínica estaba a punto de desmayarse por no ser que la Omega mordió su mano desesperada sintiendo cada vez más fuertes las contracciones el alfa chilló viendo pequeñas gotas de sangre escurrir por su mano.
—doctor! un doctor por favor!!—grito, lo más fuerte que pudo ganándose otro apreton en su mano.
Vio desesperado en toda la clínica queriendo encontrar un doctor que pudiera atender a su hermana, si no talvez quedaría sin una mano ya que la castaña apretaba cada vez más de esta.
—por favor!!
Entonces un pequeño beta vestido de blanco de cabellos cafés y ojos grandes azulados, aparecio entre toda la gente que caminaba de un lado a otro.
Llegó hasta ellos y con una gran sonrisa, observo a la Omega el alfa devolvió la sonrisa pero la Omega solo grito desesperada en respuesta, el beta dió un pequeño brinco hacia trás, y observo un poco asustado al alfa.
—primer hijo?
—si..es el primero—el alfa río nervioso sintiendo su mano de nuevo ser sujetada fuertemente, suspiro volviendo la mirada al doctor—me encantaría que nos ayudará doctor—
—para eso trabajo aquí...enseguida—
El pequeño beta se acercó hasta la omega, mientras hacía seña a las enfermeras que se encontraban por la puerta ya que había llegado otra Omega embarazada, rápidamente se acercaron con una silla de ruedas, las enfermeras sentaron a la linda Omega que cada vez estaba más pálida, el beta sonrió y la agarró de la silla para empezar a dar pasos tranquilos a la sala de partos.
—no se preocupe está todo bajo control...será rápido solamente tiene que poner de su parte para que su cachorro muy pronto esté aquí llorando a todo pulmón...
Termino de hablar el beta todo sonriente abriendose paso entre la gente, la Omega solo asintió esperando tener muy pronto ya a su cachorro entre brazos.
—eso espero doctor...
El alfa soltó un suspiro aliviado viendo cómo desaparecían entre la gente, muy pronto conocería a su sobrino, junto sus manos rezando que todo marchara bien sabía que su hermana era fuerte y podría con esto, soltó una lágrima limpiándose la de inmediato su pequeña hermana haora sería mamá, nunca imaginó que aquella niña de trenzas tan adorable a la cual siempre le tenía que aullentar uno que otro alfa patán, haora fuera a aliviarse, sonrió feliz empezando a llamar por teléfono a toda la familia.
