—ya te sientes bien?—pregunto al rubio, quien permanecía, atento a Jin
—si...—respondió el pelirrojo sin más mientras dirigía su mirada de nuevo a la pared blanca
No quería ser cortante con Ken pero aún estaba asimilando la situación, o realidad como fuese ya estaba hecho después de haber desahogado todo lo que pudo en el hombro de su primo, lo llevaron al laboratorio de la escuela el cual era demasiado grande. Después de que lo sometieran a otro examen dió el mismo resultado, no lloro esta vez pues consideraba que había derramado varias lágrimas unos minutos atrás por lo que solo guardó silencio, se ocultó y refugio en el mismo.
Eso solía calmarlo, dejar de escuchar a todos y estar perdido en sus pensamientos le hacía pensar las cosas bien, a igual hacia que no molestase a nadie con sus emociones al flote.
Ken suspiro y mordio su labio sin saber que otra cosa hacer, a comparación de lo que pensaba Jin de encerrarse en si mismo y no molestar a nadie hacia que en lugar de eso el rubio estuviera más preocupado por el.
Desde que le dieron los resultados en el laboratorio intento de todo para distraerlo, canto, le acarició el cabello, lo abrazo, casi llora al verlo así, pues Jin cuando la lic. Decidió llevarlo a una clínica por última opción y ver si halli los resultados cambiaban lo único que hizo fue asentir, sus ojos se vieron vacíos y sus pasos eran mecanizados, no había hablado más y se mantuvo viendo por la ventana, Ken pudo observar como de repente le salían pequeñas lágrimas que se deslizaban por sus sonrojadas mejillas, él todo el camino se la paso limpiándose las y dándoles palabras motivadoras.
Aunque eso no funciono pues seguia así cuando llegaron al la clínica e incluso cuando el doctor procedió a realizar su examen, ahora se hallaban esperando los resultados mientras estaban sentados en la sala de espera.
Jin suspiro y apartó la vista de la pared blanca ,volteó hacia su amigo, este se encontraba con los ojos cristalinos mientras se cubría la boca y veía al frente.
—que te sucede Ken?—
—jin!—
El rubio volteó rápidamente apenas escuchando su voz, lo atrapo entre sus brazos recargando todo su peso en el.
—ken...me tiras de la silla—le dijo en un susurro miéntras trataba de agarrarse de la base de esta.
—lo siento, lo siento!—el rubio se apartó rápido y dejó ir un fuerte suspiro.—pense que te habías desconectado de este mundo!, Jin no estés así todo pasará,—lo ánimo sintiendo las ganas de nuevo de abrazarlo ....y eso hizo.
Jin trato de equilibrarse mientras dejaba al rubio abrazarlo, se mordió el labio y asintio a las palabras de ken, con sus temblorosos brazos abrazo el cuerpo fornido de su amigo.
—si, gracias—
Apretó sus ojos al querer de nuevo llorar no pensó que preocuparía tanto al rubio, bueno puede que sí el unico que lo conocía bien era su primo, su primo, esa palabra lo hizo reaccionar y recordar que desde que habían salido del coche de la lic, no lo había visto, el le dió un beso en la frente y se alejó con celular en mano.
—ken mi primo... donde esta el?—pregunto sintiendo su voz muy ronca, era de esperarse simpre que lloraba se lastimaba la garganta al soltar fuertes jadeos.
—el.. dijo que avisaría a tus padres—contesto en un gimoteo el rubio. Se separó del abrazo y lo miro al rostro—jin no quieres que te preocupes, sea lo que de ese resultado sabrás que no importa, tu eres tú, y nadien de los que te aprecia te mirará raro, al contrario estaremos para ti para apoyarte y nunca dejarte.—el rubio empezó a dejar lágrimas que resbalaban de sus mejillas—yo puede que te conozca de una semana pero la verdad, estos días me ha gustado tu forma de ser, eres alguien especial y te tengo aprecio... Por favor no te sientas mal por esto yo te apoyaré en todo y cuídare de ti—