THIS IS JUST A DREAM

TREINTAITRES

Quité mi cabello de mi rostro, bostecé mientras movía mis dos brazos hacía arriba, abrí y cerré la boca. Saque las sábanas que cubrían mi pequeño cuerpo y me arrastré hasta el baño en donde empecé a sacarme el camisón de pandas que tenía puesto de espaldas contra la puerta. Abrí el grifo, para calentar el agua, estaba apunto de terminar de levantar lo que me faltaba de tela, cuando sentí una mirada profunda observándome, dejé caer nuevamente toda la tela y moví mi cuerpo, el cual empezó a arder, ¿que digo arder? La palabra arder le queda muy corta. Unos ojos marrones expectantes, me observaban con intensidad, mientras seguían cada paso que daba. Empecé a toser exageradamente al ver a Alex lavándose los dientes con tan solo una toalla envuelta por su cintura, de su cabello caían gotas de agua.

- Estaba dormido, hasta ahora.- Dijo el rompiendo el silencio y yo solo pude rascar mi brazo por la vergüenza que tenía.

- ¡Alex!- Reclame mientras me sujetaba el cabello en una cola.- Pensé que estarías dormido, nunca me imaginé que estarías ahí, lavándote los dientes a las 8:00 am. Eso es algo muy inusual en ti.

- Tyler, Lucas, Agustin y yo...- Se tranco en la mitad y negó con la cabeza, al ver que yo le hacía señas que prosiguiera.- Olvídalo. - Me sonrío cerrando los ojos e intento irse. Dije intento porque yo me puse contra la puerta.

-¿Sabes que podría sacarte de ahí solo soplando no?- ¿Se creía el lobo feroz? Me reí de ironía y por lo inocente que era, pobre y dulce cachorrito.

Lo empuje fuertemente contra la pared y quedó el entre ella, y yo. Empecé a amárralo con unas macetas que teníamos ahí de decoración. Y acaricié su mejilla lentamente, mientras sonreía. Parecía una psycho lo se, mucho batman y joker para mi pequeño ser. El trago saliva y yo sonreí ante el miedo, que le había provocado.

- Ya ahora habla, ¿que iban a hacer?- Me acerque a sus labios y los roce con los míos.

-Y-Yo... Agustín y yo...- Lo miraba con atención mientras acariciaba su mejilla y con otra bajaba por su torso.- Venga, que no puedo concentrarme de esta manera.

Me reí ligeramente ante su respuesta y le abracé por el cuello.

- ¿No me lo vas a decir?- Lo mire con cara de perrito abandonado y el miro al techo.

- Solo prométeme una cosa, prométeme que no intentarás entrometerte.- Con muchas preguntas en mi cabeza, asentí no muy segura.- Iremos a buscar a tu padre Ella. Agustín por fin se dignó a hablar.

- ¡Alex eso es injusto! ¡¿Porque me hiciste prometer tal cosa?!

- Porque e sido entrenado para cuidarte Ella, no para entregarte a la boca del lobo. Dios que irónico.- Rodé los ojos y me reí, porque la verdad si era irónico.

- Prométeme que te cuidarás.- Apoye mi cabeza en su pecho y el su cabeza en la mía.

- Lo haré pequeña y volveré con tú padre, lo juro.

Beso mi cabello y yo lentamente lo fui desenredando, sus brazos me tomaron de la cintura y no se cuanto tiempo estuvimos así, horas, minutos, segundos. Pero me sentía protegida y feliz.

***

Alex POV

Caminábamos por medio del bosque, mientras seguíamos a Agustín por detrás, seguía teniendo dudas de él, hasta ahora no nos había atacado y podía que fuese una buena señal. Llegamos a un árbol, era un sauce llorón, uno de mis favoritos, Agustín se arrodillo y buscó algo en el suelo, sujeto algo que lucia como una rama y la jalo levemente. Él suelo tembló y mis sentidos se activaron, estaba alerta, el lago se separó en dos, dejando unas gradas a la vista. Yo mire a Tyler con sorpresa y el se estaba riendo por mi cara, esto no debe de ser nada nuevo para él. Agustín piso el primer escalón y unas luces blancas se prendieron, una voz del techo salió haciendo que sobresaltara "Buenas tardes señor Agustín, que alegría verlo de nuevo."

- Igualmente Steph, ¿cuales son las lecturas de la semana?

"Señor hubo una invasion anoche, atacaron a todos, muchos no sobrevivieron, sin embargo sentimos que el intruso sigue aquí, tenga cuidado señor y buenas tardes."

Agustín se puso rígido y jaló de nuestros brazos, estaba apresurado, se dirigió a una habitación, con una puerta negra y tres pestillos, los deshizo todos y cuando abrió la puerta, un suspiro salió de sus labios.

- No...  John no esta aquí... Se lo llevaron.

Yo sin poder creérmelo mire a Tyler el cual estaba igual o peor que yo. Retome la compostura y tome las riendas de la situación. Sujete a Agustín del hombro y le dije.

- Dicen que el intruso puede que siga acá, por lo tanto puede que sea una trampa, necesitamos armas. Lo encontraremos de eso no hay duda.

El asintió y entró al mismo cuarto. Apretó un botón y el armario se abrió, dejando un cuarto a la vista, de ahí abrió otro armario el cual estaba cerrado con un candado, cuando lo hizo escuché el suspiro de Tyler cuando las puertas se abrieron. Habían un montón de armas, de todos los tamaños y tipos.

- Elijan una, llego la hora de cazar.