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Esa noche podría haber sido la más tranquila de todas, pero para el alfa era la más dolorosa.

En varias ocasiones HyukJae intentó acercarse a su omega para recibir un poco de atención, pero el menor lo evitaba completamente.

HyukJae era el alfa, bastaría con utilizar su voz y obligarlo, aunque no lo hacía porque podía sentir el miedo de su omega, pasaban por una situación peligrosa donde pensar en sexo tendría que ser lo menos importante, pero la necesidad era gigante y el dolor lo era aún más.

Mientras se cambiaban de ropa Donghae insistió en no tener sexo durante los 9 meses por miedo a hacerle daño a su hijo. A HyukJae casi le da un infarto al escuchar eso, no podía aguantar algunos días sin tener sexo, menos lo haría por 9 meses.

Donghae se encargó de arreglar un poco aquella cabaña, de nuevo comenzó a llover y el asomarse por la ventana a cada minuto se volvió un hábito, todavía tenía miedo de ser descubiertos y no sentía que esa cabaña fuera lo suficientemente segura para no ser encontrados.

En aquellas bolsas de plástico había comida que podrían utilizar por un par de días y dudaban que hubiera alguna cocina con gas para cocinar, pero para sorpresa de los hermanos si lo había. En realidad la cabaña y todas las cosas dentro estaban en perfecto estado, solo el polvo daba mal aspecto del lugar.

Después de preparar una improvisada comida ambos mantuvieron cierta distancia, el efecto de las pastillas aún no había pasado y Donghae temía por descontrolarse igual o peor que su hermano.

—Es doloroso —Confesó el alfa tocándose su entrepierna.
Donghae de inmediato desvió su mirada.

—No me importa, estoy seguro que seras rudo —Donghae evitaría cualquier tipo de acercamiento —Mi vientre esta creciendo y podría ser peligroso.

Era la excusa más estúpida que HyukJae haya escuchado, Donghae pensaba que se saldría con la suya, pero el alfa tenía planeado hacer cualquier cosa solo por no sentir ese dolor. Después de todo, su pequeño tigre disfrutaría ser alimentado con su leche. Leche 100% industria HyukJae.

La cabaña contaba con dos  habitaciones, arreglaron una de ellas y Donghae fue el primero en acostarse, para él sería imposible dormir esa noche, de alguna manera la sensación de que ELLOS podrían llegar en cualquier instante lo obligaba a mantenerse despierto. Y ahora estaba más alerta por tener a un alfa en celo que te miraba como su fuera su presa.

La puerta de la habitación se abrió, había polvo todavía en ella.
HyukJae entró completamente desnudo, su miembro estaba erguido, su dureza y el cuerpo tan sexy del alfa hizo temblar a Donghae, y lo fue aún más cuando empezó a acercarse y su miembro se movía de un lado a otro hasta hipnotizarlo por completo.

—Eres un maldito, ¡me obligaras hacerlo! —Gritó el omega en un intento fallido de esconderse entre las sabanas de la cama, pero no había ninguna sabana — . ¡No sé vale, eso es trampa!. —Pataleaba haciendo un berrinche como si fuera un niño.

—Dijiste que me ayudarías con tú mano —HyukJae se sentó en la cama, el ligero aroma de Donghae estaba por toda la habitación, su miembro reaccionó un par de veces dándole espasmos de placer —. Tócame la cabecita, cariño. —Señaló su entrepierna.

—¡Ya se esta moviendo! —Donghae miraba como ese monstruo en la entrepierna del alfa amenazaba con entrar en él —. ¡Se está moviendo sólo!

—Entonces ven a tranquilizarlo.  —Ordenó el alfa — Mi monito quiere jugar contigo.

Donghae se negaba a tal petición, pero algo le decía que en realidad él también quería todo aquello y es ahí donde el plan del alfa empezaba a funcionar. —Sólo... Sólo voy a tocar.

Hermanos - OMEGAVERSE- [EUNHAE] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora