Capítulo 6

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Club Shion. Shinjuku

- Asami-sama, la señorita Ingrid nuevamente está haciendo un escándalo en el VIP.

- Llama a Kabu-san, su grupo está haciendo trato con el padre de ella, que ellos se encarguen de sacarla, haz que los custodios la lleven a un reservado para que no siga molestando.

- ya lo hice y me comunique con Kabu-san, viene en camino, pero la señorita insiste en verlo, se enteró que usted se casó y no le gustó nada, ella es una de las que estaban a la espera de exigir su mano - dijo Kirishima con una sonrisa socarrona.

- agh, que molesta son las mujeres, hice bien en cubrirme las espalda para que ningún grupo pueda extorsionarme - dijo Asami molesto con intenciones de fumar sus cigarrillos Dunhill, entonces recordó la conversación que tuvo con Harry, no quería volver a soportar esa charla sobre su salud, su esposo enumero las consecuencias que el cigarrillo provocaban hasta preparo cartelones con imágenes horrendas de pulmones ennegrecidos, tan solo ver esa sustancia como brea revolvió el estómago. Dejo la cajetilla en un cajón del escritorio.

- Asami, insisto en que debería asistir a una de las reuniones sociales a las que lo invitan junto a Harry-san, se ha ausentado a varias ya y los rumores corren, si me lo permite conseguiré un profesional de ceremonial y protocolo para que enseñe a Harry-san.

- no me gusta, es seguro que alguno de esos idiotas quiera robarme a mi Harry, no tolero que quieran profanar lo que es mío.

- Asami-sama, es necesario dejar en claro la posición de Harry-san, muchos socios tenían la esperanza de afianzar una alianza mediante el matrimonio, todos saben que usted es bisexual, muchas de sus aventuras femeninas y masculinas deseaban ser su pareja oficial. De hecho, se creía que el joven fotógrafo Takaba Akihito seria el elegido.

- Akihito es un ser demasiado libre, nuestra relación no funciono, lo intentamos pero él no aceptaba mis negocios, ese fue uno de los motivos que ocasionó muchas de nuestras peleas... Está bien, Kirishima ocúpate del asunto, hablare con Harry cuando llegue a casa, preferiría que nadie lo conozca todavía - mira su reloj - puede que aun este despierto estudiando.

- ¿Cómo ha ido en la escuela?

- bien, se ve feliz, me alegro que no fuera a una de esas escuelas misteriosas, prefiero que se aleje de esas personas. En la mañana lo llevo a la escuela y lo paso a buscar a la tarde, Harry se está esforzando por ponerse al corriente, lo ayude con algunos temas de historia, el fin de semana lo llevare a recorrer museos, tiene que elegir un tema para un trabajo de bellas artes.

- ¿no se siente extraño con un estudiante por pareja? - Asami se inclinó en su silla

- en un principio sí, pero tan solo verlo, él es mi esposo, mi amante, así lo siento y no puedo imaginarme con otra persona.

Por el intercomunicador les informan de la partida de la cliente molesta. Kirishima sale a tratar el tema, regresa media hora después.

- Asami-sama la señorita Ingrid ya se fue, la mano derecha de Kabu-san, Nirasawa-san vino a buscarla.

- Bien - se estira - pronto vamos a cerrar, daré una vuelta por el club, mañana por la noche no vendré, si queda algún pendiente hazte cargo.

Harry descubrió el cómo era posible cursar tantas clases, la respuesta era: "habitación del tiempo", a decir verdad, era un área con varias aulas, el tiempo en ese lugar transcurría diferente, un compañero le conto que dentro de esa área un día podría equivaler a un año, la dirección ajustaba el tiempo para cada clase, al ingresar al área se activaba un hechizo en sus insignias que prevenía el envejecimiento. Por eso, las asignaturas que requerían más tiempo se dictaban en esas aulas, de hecho una de sus profesoras arreglo para que Harry recibiera sus clases de apoyo en una de esas aulas, para que así pudiera tener horarios iguales al resto, por tanto su horario quedo de lunes a viernes de 8:30 a 16 hs., asistiría 2 días al club de Kendo y 2 días al club de arquería en la escuela, los sábados de 8:30 a 12 hs. concurriría a los clubes de duelos y al de fotografía. Su día era agotador, pero valían la pena, en los recesos podían comprar comida en el comedor o llevar su propio bento.

Koi no YokanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora