Capítulo 15

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Harry estaba molesto con sus tíos, principalmente con Sirius. Creía que él sobre todo lo entendería, se abrazó sobre el vientre con una lágrima corriendo por su mejilla.
Suoh tuvo que contarle sobre Takaba Akihito, la ex pareja de Asami, se preguntaba que pasaba realmente. El comportamiento de Asami ¿se debía a lo que hizo Sirius? ¿algo que quedó pendiente con Takaba? o ¿sólo era producto de la coincidencia? Si era franco, Asami tenía enemigos, Kirishima apareció con golpes algunas veces, incluso hubo días en los que Suoh se volvió sobreprotector, tampoco podía olvidar el incidente de la bomba. Esperaría 2 días, sólo 2 días y se encargaría de su marido, exigiría respuestas y si en realidad era infiel... más vale que se preparen, la yakuza serián como un bebé de pecho al lado de lo que haría.

Los gemelos Weasley aceptaron irse a Japón unas semanas hasta las cosas se calmarán, Harry los ayudaría a conseguir su título de fin de estudios, y a través de Gringotts estaban tramitando el contrato de alquiler de un local con vivienda, más todas las licencias en el Ministerio, el gerente de Harry aceptó ser su representante; en cuanto se sintieran seguros regresaría ahí.
Arthur Weasley, padre de los gemelos era el único que sabía del viaje.
- muchachos conseguí un poco dinero para su viaje - entregó un sobre en manos de George - su madre no sabe, está muy molesta pero se le pasará, también digan a Harry que puede contar conmigo, siempre estuve en desacuerdo que unos niños enfrenten a experimentados magos oscuros. Bill se quedará definitivo en Inglaterra, no volverá a Egipto, y Charlie también está gestionando su traslado a la reserva de Galés... hable con ellos y concuerdan conmigo, lamento decir que Albus planea matar a Harry.
Los gemelos jadearon de horror e indignación.
- Oh, no me malentiendan, según la profecía que renuente el director nos transmitió ninguno de los 2 vivirá si el otro sigue con vida, esto quiere decir que Harry debe matar al que no debe ser nombrado, pero por accidente o fortuna, según cómo quieran verlo, en una de las reuniones se me cayó al piso mis lentes. Su madre colocó en la mesa un mantel largo, quedé ocultó bajo la mesa y cuando el director volvió a entrar con Snape me quedé quieto y escuché que el director - carraspeó - el director cree que se deben matar mutuamente... Hay algo en la cicatriz de Harry que haría regresar al innombrable a la vida.
- horrocrux - murmuraron y su padre los escuchó.
- ¡¿Cómo lo saben?! - preguntó alterado, no era algo que quisiera supieran sus hijos, la sola idea lo horrorizaba.
- orejas extensibles - corearon como si eso lo explicara todo.
- Ah, claro... En fin, no apoyo la idea. Pienso que debe haber otra forma, no sé cuál. Pero me niego a exponer a un inocente al horror... coloque mis memorias de las reuniones en esta caja, cada dial está enumerado densela a Harry, debe conseguir un pensadero, ustedes saben cómo funciona ayundelo. Confío en ustedes.

En la oficina del club Shion, una discusión se escuchaba desde fuera de la puerta.
- ¡¿Por qué?! No logró entender por qué te niegas a dejarlo, él no pertenece a este mundo. Yo soy el único que puede llegar a entenderte. Esta bien - alzó las manos - reconozco que me equivoque, trate de cambiarte pero ya entendí. Asami nos olvidamos de nuestro amor, vamos a intentar recordar, confío en nuestro amor. Juntos podemos superarlo, este tiempo que pasamos juntos ¿no sentiste que era cómo antes? Tú y yo juntos, luchando contra el mundo, con un objetivo común.
- ¿Terminaste? - dijo serio - amo a Harry, espero te quedé claro. Estas semanas fueron agotadoras, Miyagi tenía muchas ratas a su cargo, el exterminio llevó tiempo pero por fin acabó. No hay un nosotros como pareja, ya te lo dije. Me conoces, te ame, luche a mi manera por lo nuestro, no resultó hay que aceptarlo.
Akihito colocó una caja con fotos sobre el escritorio.
- Estas son algunas de las fotos que nos tomamos. Mira lo felices que nos vemos - dijo tomando una foto de ellos en un festival.
Harry entró al club seguido Suoh, los guardias ya los conocían y no impidieron su paso.
- Harry-san - exclamó Kirishima - Buenas - fue interrumpido.
- Buenas tardes Kirishima-san, ¿Asami está en su oficina? - preguntó sin detenerse, caminando directo a la puerta.
- Harry-san espere un momento.
Él quiso abrir la puerta pero estaba cerrada.
- aberto - susurró para abrir y entró, vio al rubio sobre su marido a punto de besarlo, sin hablar con su índice hizo un firulete en el aire en dirección a Takaba y conjuró una maldición aliento de pimienta, este maleficio genera un aliento muy ardiente en su víctima.
Akihito se quejó. Asami se enderezó, alejando al rubio y mirando a Harry, cuyos ojos verdes resplandecian con un fulgor peligroso, su erizado cabello oscuro parecía tener vida propia.
El rubio se dio vuelta para ver quién entró.
«densaugeo» conjuró en mente moviendo su índice hacia Akihito, los dientes de este crecieron de forma grotesca. El rubio estaba al borde de la histeria tocando su boca y saltando como liebre asustada; «desmaius» pensó Harry y Akihito cayó poco elegante al piso.
- Hola amor, espero no interrumpir - dijo con una sonrisa tenebrosa.
- puedo explicarlo - respondió Asami. Harry deslizó de su manga su varita.
- Colloshoo - los zapatos del empresario quedaron pegados en el suelo - avifors - unos papeles del escritorio se convirtieron en aves y luego Harry los lanzó sobre su marido que trataba de defenderse cubriéndose con los brazos.
- Nunca lo hubiera esperado de ti cariño - dijo arrastrándo las palabras.
- ¡Espera! ¡Puedo explicarlo! - Harry alzó su varita de nuevo - ¡Te amo, por favor escuchame!
Harry se quedó en blanco, estático, sus lágrimas corrían por sus mejillas. Las aves se esfumaron volviendo a ser simple papel, esparcidos por el suelo la imagen era la del paso de un tornado.
- Takaba me ayudó contra Miyagi, ¿lo recuerdas? Nos cruzamos con él en una fiesta, envío contra nosotros a grupos yakuza. Creo una red de mentiras sobre mí, atacó a conocidos y aliados, tuve que alejarme para que no corrieras peligro... Takaba fue mi pareja pero todo terminó antes de conocerte y hasta que nuestros caminos se cruzaron por culpa de Miyagi, no nos volvimos a ver. Él está confundido añorando el pasado, Harry por favor.
Harry sólo observó, su marido, el hombre más seguro, el más orgulloso, aquel con un aire de semental y perfecto hombre de negocios, estaba frente a él balbuceando, despeinado, con la ropa desarreglada, con cortaduras en sus manos y cara. Tenía ganas de reír, esos ojos arrolladores, de mirada profunda que tantas veces lo desarmaron, decían que era verdad.
Miró al sacó de huesos rubio, deshizo los maleficios. Luego se aproximó a Asami.
- episkey - dijo sobre cada herida, hasta que sanaran. Tomó con ambas manos su rostro y lo beso - tú eres mío, recuérdalo - volvió a besarlo y su marido salió del estupor, abrazándose con cariño, el beso cambio de uno tierno a uno más apasionado - vamos a casa.
- estoy de acuerdo, pero no puedo moverme, sigo pegado al piso cariño.
- ups. Lo siento - movió la varita - listo.
Los asistentes estaban fuera controlando que nadie entrará. Vieron salir a ambos tomados de la cintura.
- Kirishima, el auto. Suoh volvemos a casa.
- enseguida Asami-sama - se apresuraron a decir.
- Kirishima que se ocupen de Takaba, sin querer tomó un alucinógeno en la bebida mientras discutíamos.
- Entiendo señor, me ocuparé personalmente - hizo una reverencia.

Koi no YokanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora