- ¡No vas a ir! - Asami discutía con Harry mientras este hacia su equipaje.
- ¡Sí, voy! ¡Tengo que ir! - decía Harry.
Asami lo tomó del brazo, para luego cargarlo sobre su hombro - ¡¿Qué crees qué estás haciendo?! ¡Bajame!
- ¡Ojos saltones!
- Se llama Dobby.
- Cómo sea. Si me escuchas te ordenó que desempaques las cosas de las maletas de Harry.
- ¡No lo hagas, prepara mi baúl de viaje y una maleta! ¡También un bolso o mochila! No se cuál sea mejor.
El elfo en un rincón se tiraba las orejas, ¿qué haría? ¿Cuál orden de sus jefes debía obedecer? Era libre de elegir, pues es un empleado con voluntad propia, pero prometió a Harry Potter ayudar en lo posible a su marido. Pero Harry era su amigo, aceptó pagarle un galeón por semana y darle un día libre al mes, regala calcetines especiales en su cumpleaños para su colección... Estaría con Harry Potter, prometio ayudar no obedecer, el era un elfo libre y elegía estar de parte de su amigo, el protegerá a su amigo.Asami y Harry celebraron su boda antes de lo planeado, Harry estuvo de acuerdo por su embarazo. Draco malvadamente lo convenció de que se volvería un barril y se vería obeso con su traje de novio, seguía molesto por no ser el primero en dar su noticia de embarazo; mientras Harry se volvía más sensible, Draco se volvió más hostil, Remus intentaba mediar, pues entendía que sus hormonas los estaban afectando, él pasaba por lo mismo y sabía lo molestos que se sentían, él con los días contados para dar a luz transmitía su ansiedad, potenciando el ambiente incierto en el que vivían.
Sirius intentó consolar a Asami por el sube y baja emocional de su ahijado, su Moony también lo volvía loco con sus extraños antojos, por ejemplo carne asada con chocolate rallado, etc.; el más difícil de conseguir fueron los bombones de chocolate con pimienta rosa, cuando su esposo dijo tener antojo de bombones de chocolate negro con pimienta rosa, pensó "Qué bueno, no es algo raro", pero algunas veces lo que uno cree simple es lo que más cuesta, nadie, absolutamente nadie tenía esos bombones, los elfos intentaron prepararlos pero no era el sabor correcto. Por suerte, luego de algunos cariños dolorosos por parte de su malhumorado esposo, fue el amigo de su ahijado quien los consiguió, pero a cambio solicitó paseos sin límites en Buckbeak.
Asami llevó a su esposo al living sobre su hombro, Harry se quejaba y terminó por vomitar sobre la espalda de su marido.
- Lo siento - dijo apenado - Te dije que me bajaras, todavía tengo el malestar de la cena de Navidad.
- Señor Asami de Harry Potter aquí tiene ropa limpia, Dobby se ocupará de limpiar. Por favor, no moleste a Harry Potter y Dobby no volverá a limpiar sus armas señor.
- Creía que eso ya había quedado claro, 4 de mis revólveres de colección quedaron arruinados - dijo con una mirada molesta mientras era "limpiado" por la magia del elfo, y se cambiaba la camisa y el pantalón - trae algo para los malestares de mi esposo. Qué nadie nos moleste hasta que salgamos de esta habitación.
- No lo trates así, él sólo hacía su trabajo.
- Esta bien... Dobby por favor puedes retirarte y hacer lo que te pedí.
- Cómo usted ordene, señor Asami de - con una sola mirada Dobby cerró la boca y se desapareció.
- Dobby es un ser sensible, debes ser más amable, él es mi amigo y no dejaré que nadie lo haga sentir menos.
- Disculpas, no volverá a suceder, intentaré ser más paciente con él.
- Bien.... Entonces, ¿cuándo nos vamos?
- Salimos luego de que nazca el hijo de tus tíos, pero tú te quedas con él, estás por entrar en el 4° mes de embarazo.
- Pero cariño - Harry se acercó y tomó su antebrazo - sin mí no van a confiar en ti, para ellos eres sólo un muggle, alguien peligroso. Temo que puedan hacerles algo, te explique sobre el Estatuto del secreto, ¿recuerdas?. Amor no quiero que nos separen - lo miró con ojos de cachorro y un puchero encantador, dio el último toque ladeando leve la cabeza y colocando un mechón de pelo tras su oreja.
Las pupilas de Asami se dilataron, dio vuelta el rostro para cortar el contacto visual pero Harry lo tocó suavemente en su mejilla y en puntas de pies lo besó.
«a ver si puedes decirme no ahora, jejeje»
- Está bien. Tal vez sea lo mejor, estaré más tranquilo si puedo estar cerca para protegerte... Ver como crece tu vientre - Lo abrazó de la cintura y luego colocó su mano sobre la pancita.
- ¿Me dijiste gordo? - Harry se contemplaba su pancita, Draco se burlaba de él, porque con 3 meses ya tenía pancita, dijo que terminaría gordo y su marido buscaría una amante.
Optó por ignorarlo, su ahora amigo siempre fue venenoso en sus comentarios cuando no se sentía bien. Él era feliz, que su vientre creciera indicaba que su bebé se estaba desarrollando bien, o al menos eso esperaba que significará, Harry seguía estrictamente las recomendaciones de su doctora, pero debía admitir que tenía algo de preocupación.
Si se comparaba con Draco, quizás sus palabras hicieran eco, pues el rubio platinado conservaba su figura intacta con sus 4 meses de embarazo cumplidos.
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Koi no Yokan
FanfictionVernon Dursley nunca fue un hombre honesto, en un viaje por negocios contrajo una deuda con la mafia, y no encontró mejor solución que vender a su "fenómeno" sobrino político para saldarla. Un matrimonio, un inesperado amor, un viejo amor y una trai...