Johnlock Drabbles

10.- Owner of a lonely heart.

Siempre a la defensiva, siempre alardeando de sus habilidades, siempre siendo grosero... Sherlock sabía todo lo que era; no le extrañaba que los de Scotland Yard le llamaran por apodos despectivos. Y a John tampoco le resultaba extraño; después de todo, el detective era un imbécil.

Holmes estaba acostumbrado a permanecer solo, a escuchar insultos hacia su persona, pero no le importaba; desde muy niño, Mycroft le había enseñado a que la soledad sería lo único que tendría, que la soledad lo protegería. Bajo esa frase se manejaba, hasta que John Watson llegó a su vida.

El doctor no le había llamado "fenómeno", "demente", "rarito"... El doctor le había ofrecido lo que nadie, el doctor le había ofrecido compañía, amistad y hasta admiración. Y no, Sherlock no era la mejor persona con el médico; igual llegaba a ser displicente con su compañero de piso, pero le había salvado incontables veces y lo seguiría haciendo, porque muy en el fondo, aunque no quisiera admitirlo, el rizado sabía que estaba cayendo por John Watson desde el día en que recibió su primer halago.

Y de igual forma, muy en el fondo, el rubio sabía que era dueño del corazón del menor, era dueño del corazón de la persona que se jactaba de no tener uno. John Watson era dueño de un corazón solitario.