Suspiró una vez más antes de verse en el espejo. Bajo un poco la falda y sacudió sus medias negras, cerró bien los botones de su blusa blanca y le grito a su abuela para que le ayudará a ponerse la corbata. No podía sentirse más nerviosa ese día, quería que todo saliera normal y mucho menos quería llamar la atención de los demás, aunque siendo la nueva de la clase, eso iba a ser inevitable. Se vio una vez en el espejo, realmente era un desastre. A penas y podía controlar su muy rebelde cabello azul, su flequillo estaba muy caído y ni que decir de las ojeras debajo de sus párpados.
Aunque de cierta manera era normal ya verse así. Sus ojos esmeraldas no volverían a ser como antes, suspiro ante ese recordatorio.
--Tranquila Yusaku --Hablo su abuela con calma cuando entro a su cuarto.-- Es tu primer día de clases, ya hemos hablado de esto --Empezó con el nudo en su corbata.
--Lo se --Suspiro al ver como su abuela había acabado rápido con su corbata.-- No es la primera vez que hago un nudo de corbata pero simplemente no salía --Bajo un poco el nudo, le apretaba el cuello.-- Pero realmente estoy muy nerviosa
--Si se te nota --La mujer sonrió para ayudarle con el cabello desordenado.-- Pero si algo te sucede aquí estaré cariño, tu abuelo te acompañará a la escuela junto con Ai, no te extrañes que en la salida encuentres a tu perro esperándote
Eso era cierto. Ai podia parecer un perro tonto pero era muy bueno memorizando calles y lugares. Realmente no se sorprendería si volviera a escapar y la buscará a la salida como desde hace dos años lo había echo ya. Era un perro raro pero así lo quería.
Vio como le cepillaba el cabello con cuidado y cariño, había podido controlar su desastrozo cabello, incluso lo había amarrado en una media coleta, no era de peinarse, sólo se capillaba el cabello y lo dejaba suelto, realmente agradecía esos pequeños gestos de su abuela. No pudo evitar voltear a su lado y mirar dos cuadros, era ella de pequeña con sus padres y otro que sólo estaba boca abajo. Sonrió con tristeza. Miro a su abuela quien le sonreía con cariño una vez que su cabello estaba perfectamente cepillado y todo en su lugar.
--Gracias --Sonrió antes de abrazar a la mujer.-- Vamos, no hay que hacer esperar más al abuelo
--Tienes razón --Soltó una risita.-- Creo que el es más nervioso y eso que no va a entrar a clases contigo
--El abuelo sería capaz de hacerlo para que no me molesten
--Ni que lo digas, sería capaz de golpear a todos con su bastón por ti cariño
Ambas soltaron risitas. Gracias a su abuela se le había olvidado que se sentia nerviosa. Quizá sólo sentia así por lo que había soñado ese día, una pesadilla que la atormentada desde hace unos años. Todo saldría bien, todo estaría bien mientras no se encontrará con él como lo había echo el primer día que llegó a la ciudad. Realmente esperaba que saliera todo bien en ese día.
.o.
--Mi nombre es Fujiki Yusaku --Se presentaba ante la clase.-- Antes vivía en Neo Domino pero me cambie a Den City con mis abuelos para cuidarlos --Hablo mientras hacía una reverencia.-- Espero que cuiden de mi
Alzó su rostro. Su maestro hablaba pero no prestaba atención. Se fijaba en todos sus nuevos compañeros hasta que noto a un chico de cabello grisáceo y mechas rojas de la segunda fila sentado hasta atrás. Unos curiosos lentes verdes en su rostro y una sonrisa en su rostro podía ver, le alegraba no estar sola en el salón, era mala haciendo nuevos amigos. El maestro le indicó su nuevo lugar, justo a un lado de ese chico y cerca de la ventana. Todo iba a ser normal.
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No volveré a perderte
FanfictionEl primer y único amor de la infancia nunca se olvida. Ellos eran dos niños muy unidos, cuando los ojos esmeraldas de ella y los ojos celestes de él se encontraban, era posible encontrar el gran amor que ellos dos sentían. O eso eran lo que creían...