Capítulo 29: Jossey, La Estrella Perdida

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Un día, justo al atardecer; mientras Argis, Sophie y Aqüichi compartían una grata velada y contemplaban no muy lejos las cascadas de Maiec, vieron una brillante estrella que daba tumbos de un lado a otro en el cielo.

—¿Qué le pasará a esa estrella que está como atontada? —preguntó Aqüichi.

—Mmm... ¡No lo sé! ¡Parece un resorte brincando de un lado para otro! —dijo Argis.

—¿Tú qué crees Sophie? —preguntó Aqüichi.

—¡No lo sé pequeña! A mí me parece que está como desubicada es como que no encontrara lugar en el cielo —respondió Sophie.

—¡Ohh Noo! ¡¡Mírenla, parece que se fuera a caer!! —dijo Aqüichi sobresaltada.

—¿Parece? ¡Yo creo que se está cayendo! —dijo Argis.

—¡¡Oh sí!! ¡¡Está cayendo!! —dijo Sophie.

—¡Oh! ¡Esa estrella tonta nos va a caer encima! ¡¡Corran, corran!! —dijo Aqüichi asustada.

¡Y de repente! ¡Pacataplum, plum, plas, plum! Aquella estrella cayó a tierra.

—¡Auch! ¡Eso debió doler! —dijo Aqüichi.

Argis, Sophie y Aqüichi salieron corriendo hacia aquella estrella que había caído cerca de allí. El brillo que irradiaba era fulgurante y hermoso, su centro parecía iluminado por millones de diamantes diminutos y un aura azul parecía protegerla.

Sophie, al intentar tocarla, le preguntó:

—¿Qué te ha ocurre?

—¡Oh no! ¡No me toques pequeña, te quemarías! —dijo la estrella.

—¡Oh, gracias por detenerme a tiempo! —dijo Sophie— ¿Qué te ha ocurrido? ¡Te hemos visto desde aquí dando traspiés en el cielo!

—Mmmm... ¡No lo sé! ¡Yo estaba tranquilita viendo el cambio de guardia entre el sol y la luna!, ¡ese espectáculo me encanta! y de repente alguien, no sé quién, ¡me empujó! Cuando quise regresar a mi puesto mi punto no estaba y mientras daba traspiés de un lado a otro buscándolo, la gravedad me atrajo como un imán y heme aquí frente a ustedes mirándome extasiados, con mi punto perdido; sin poder ver el final del cambio de guardia, sin saber cómo regresar al cielo, con hambre, frío y muchas ganas de hacer pis ¿será que ustedes me podrían ayudar?

—¿Ayudarte a qué? —preguntaron todos en coro.

—¿A encontrar mi punto? —preguntó la estrella.

—Mmm... ¡No lo creo! —respondieron a coro.

—¿A terminar de ver el cambio de guardia? — preguntó la estrella.

—Mmm... ¡Creo que tampoco! — respondieron nuevamente a coro.

—¿A regresar al cielo? —preguntó la estrella.

—Mmm... ¡No creo que podamos hacer eso! —respondió Argis.

—¿A alimentarme y abrigarme? — preguntó la estrella.

—¡Eso sí lo podemos hacer! —dijeron todos.

— ¿Y a hacer pis? —preguntó la estrella.

—Jeje... ¡Ven pequeña, yo te acompaño! —dijo Sophie.

Al poco rato:

—¡Uff! Gracias por alimentarme, abrigarme y acompañarme a hacer pis —dijo la estrella agradecida.

—¡Por nada! —respondieron todos.

—¿Cómo te llamas? —preguntó Aqüichi.

—Mi nombre es Jossey, pero todos me dicen cariñosamente Caosita —dijo la estrella.

Argis, El Cíclope ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora