The Unwanted Life - LIBRO TRES || The Wanted Fanfic.

Capitulo 56.

Es corto, muy corto pero prefiero subirles a que dejarlas por más tiempo esperando y este es más como un capitulo de relleno. las ideas se me fueron y no pretenden volver al parecer. les cuento que recuperé el archivo con el fic completo pero mi netbook nunca más revivió, así que estoy escribiendo en el computador de la casa y no es de mi agrado. GRACIAS POR SUS VISITAS  a mis otras historias!!! son las mejoresss!!!

Abrí el armario, encontrándome con Nano amarrado de piernas y manos, al parecer estaba inconsciente.

-¡Nano! – Grité y me arrodille a su lado - ¡Nano! – Le di unos pequeños golpes en su cara para que reaccionara pero no funcionó – Nano, despierta –

Como pude lo arrastre hasta su cama revise de donde venía la sangre, tenía una herida en un costado de su estomago.

-Mierda – Murmuré –

Saqué mi celular y llame a urgencias, después de veinte minutos iba detrás de la ambulancia hacia el hospital.

-¿A qué hospital? – Me preguntó Nathan preocupado después que le conté todo lo que había pasado cuando lo había encontrado dentro de su armario –

-Cedars Sinai – Le respondí – Nos vemos allá –

Me estacione en el lugar indicado para visitas y me bajé justo cuando estaban bajando a Nano de la ambulancia, todavía seguía inconsciente, estaba con una mascarilla que le proporcionaba oxigeno.

Entre corriendo detrás del grupo de médicos, cuando atravesaron una puerta de acceso restringido un joven médico con su delantal blanco y estetoscopio colgado a su cuello me detuvo.

-Lo siento, no debe entrar por aquí – Me tenía afirmada de los hombros –

-No sé cuánto tiempo lleva así, lo encontré herido – Comencé a hablar tratando de calmarme pero no pude, empecé a llorar –

-Tranquila, estará bien pero aguarde en la sala de espera por favor –Me volvió a pedir con un tono suave y comprensivo-

Asentí con la cabeza, sollozando. El médico me soltó y fui a sentarme para esperar que los chicos llegarán. Una enfermera se acercó a mí con un vaso de plástico con agua, comencé a tomar de pequeños sorbos.

Media hora después, los chicos llegaron corriendo y se reunieron conmigo.  Todavía no tenía noticias de Nano y la preocupación aumentaba a cada minuto ¿Qué tan grave era el disparo? ¿Por qué nadie en el edificio escucho el disparo?

¿Cuánto le faltaba a Scooter para aparecer en cualquier momento y asesinarme? Eran muchas preguntas así que decidí aislarlas de mi mente.

-¿Todavía no tienes noticas de Nano? – Nathan se sentó a mi lado y me rodeo con sus brazos, afirmo su mejilla sobre mi cabeza, sentí como a poco me tranquilizaba era el efecto que tenía sobre mí –

No respondí, sólo negué con la cabeza.

-¿Con quién dejaste a Noah? – Me separé de él unos centímetros para preguntarle algo alarmada –

-Con mamá – Respondió tranquilo – Estará bien – Me dio un beso en la frente y volvió a llevarme a su pecho-

-¿Karen está aquí? – Pregunté sorprendida - ¿Cómo se te ocurre? No estamos en un momento en el que puedas traer a tu madre –

-No puedo sacar a Noah de la casa con tanto paparazzi, están todos locos esperando noticias de Nano – Se notaba algo molesto – Tranquila, ella está bien –