The Unwanted Life - LIBRO TRES || The Wanted Fanfic.

Capitulo 11.

Las horas pasaron lentamente, la gente caminaba para ver a sus familiares o simplemente para recibir malas noticias. No tenía idea cuánto tiempo más iba a tener que esperar.

-Toma, te traje un café – Jay me tendió el café y se lo acepté –

-Gracias – Le sonreí - ¿Cuánto más va a demorar el doctor?  -Pregunté desesperada –

-Supongo que en unos minutos, no lo sé – Respondió Tom mientras estaba afirmado en la pared –

Tomé mi café en silencio,  Siva quien estaba a mi lado comenzó a sobar cariñosamente mi espalda para darme algo de apoyo.  Le sonreí agradeciéndole el gesto.

Mi vista se fue hacia la entrada, Jess junto con la madre de Nathan al parecer venían directamente del aeropuerto ya que venían con sus maletas, le pase mi vaso con café a Siva y me fui a reunir con ellas.

-Oh, Madison – Los brazos de la madre de Nathan me rodearon –

Yo le devolví el abrazo y apoyé mi cabeza en su hombro, inmediatamente sentí una paz interior.

Recordé la primera vez que conocí a la madre de Nathan, fue para navidad. Congeniamos de inmediato y me repetía una y otra vez que era como otra hija, estaba muy aliviada de que me aceptara.

Me separé para saludar a Jess, la abracé por unos segundos para luego ponerlas al tanto de cómo estaba la operación.

Las llevé a sentarnos para seguir esperando,  finalmente a los minutos el doctor salió para darnos noticias.

-La operación fue un éxito – Dijo sonriendo – Ahora tendrá que hacer reposo unas semanas para luego empezar la rehabilitación –

-¿Puedo pasar a verlo? – Preguntó Karen entusiasmada –

-Lo estamos llevando a una habitación y todavía está bajo los efectos de la anestesia. Una enfermera vendrá a buscarlos para que lo puedan ver – Nos brindó una sonrisa y se retiró –

Todos nos abrazamos y esperamos impacientes para poder ver a Nathan.

La enfermera llegó y dijo que  teníamos que ir de dos, los chicos junto con Karen decidieron que entrará yo primero sola para tener un momento con él. Los chicos me siguieron y esperaron en el pasillo fuera de la habitación. Entre y me encontré con mi novio, quien estaba en la cama podía ver que todavía estaba bajo los efectos de la anestesia.

-Seguramente no puedes ni tomar un lápiz para escribir como te estás sintiendo –Le dije riendo – Estás volando con las hadas todavía – Le acaricié el pelo sonriendo, él me la devolvió -

Sus ojos comenzaron a llenarse de lágrimas, tome un pequeño banquito y me senté a su lado, sin soltar su mano.

Estuvimos en silencio unos minutos, estaba aguantándome las ganas de llorar al verlo tan afectado, sabíamos que si la operación fallaba podía ser el final de su carrera y volveríamos a Inglaterra.

-Nath, no llores – Le sequé una de la lagrima que caía en su mejilla – Ya verás que saldrá todo bien, estarás con los chicos en unos meses más. Él asintió tratando de no llorar, me puse de pie para acercarme a sus labios y darle un corto beso.

-Oh, te tengo un sorpresa –Me alejé de él y me dirigí a la puerta, le hice un seña a Karen con Jess para que entraran. Nathan abrió la boca sorprendido, le tendió los brazos a su madre para que los abrazara. Los chicos estaban todos asomados en la puerta, escuché como alguien sollozaba a mi lado, miré hacia mi costado y estaba Max llorando, tomé su brazo y apoye mi cabeza en él -

-¿Por qué estas llorando?  - Tom preguntó riendo –

-Es que… - Max volvió a sollozar más fuerte –