The Unwanted Life - LIBRO TRES || The Wanted Fanfic.

Capitulo 51.

       Súper corto pero es mejor que dejarlas sin nada!!! esto es gigante!! Un besoooo! :)

Desperté y me di cuenta que Nathan estaba durmiendo abrazado a Noah quien estaba durmiendo entre los dos. Lo observe por unos minutos hasta que Noah comenzó  a abrir sus ojos lentamente.

Sonreí al ver que ella comenzaba a golpear la cara de su padre y se reía por eso.

Finalmente él despertó y sonreímos juntos, me levanté y salí de la habitación hacia el baño del segundo piso. Saqué unas toallas del armario que estaba ahí y me metí a la ducha.

Bajé a tomar desayuno una vez que estuve lista,  Nathan ya estaba listo sentado en la mesa junto con Noah. Mi hermano estaba en la mesa también.

-¿Dónde está mamá? –Saqué una taza desde la repisa –

-Siéntate yo te sirvo – Troy se levantó de su silla y no me quedo otra que hacerle caso – Trabajando -

-¿Qué haremos hoy? – Preguntó Nathan mientras jugaba con Noah, ella solamente reía –

-No lo sé – Me encogí de hombros –

Mi hermano nos quedo mirando por unos momentos hasta que se levanto disculpándose que tenía que ir a ver a Jake que todavía no despertaba y que debía darle su desayuno.

Nos quedamos en silencio mirándonos por unos minutos y yo sonreí.

Su pelo estaba desordenado y eso lo hacía ver muy sexy, mordí mis labios, traté de mirar hacia otro lado para aguantar mis ganas de saltar sobre él.

Al parecer él se dio cuenta de la manera de que lo estaba mirando, me sonrió y yo trate de aguantar una risa de esas tontas que te salen cuanto recién estas con tu novio.

-Entonces… ¿Cómo dormiste? – Preguntó cambiándose de silla a la que estaba a mi lado –

-Bien – Sonreí – ¿Noah se quedó durmiendo?

-Si, me despertó de una manera muy sutil hoy – Fingió que se estaba quejando –

-Bienvenido a mi mundo – Sonreí acercándome a él y le di un pequeño beso antes de pararme –

Recogí las tazas que ya estaban vacías, abrí la llave y  hice espuma en la esponja,  cuando hubo suficiente, empecé a refregar las tazas y platos sucios.

-¿Por qué no vamos a cenar hoy en la noche? – Me preguntó mientras sus manos se detuvieron en mi cintura –

-No lo sé – Le respondí mordiéndome el labio inferior –

-Hace mucho que no tenemos una cena para dos – Sus labios ahora estaban en mi cuello –

-¿Dónde dejamos a Noah? No quiero molestar a mi madre – Le respondí tratando de resistirme –

Cuando terminé cerré la llave del agua y me giré para quedar a centímetros, puse mis manos que todavía tenían espuma sobre mi rostro. Él rio y yo acaricie mi nariz con la suya.

-Vamos, salgamos – Me rogó mientras arreglaba mi cabello –

-¿Puedo pensarlo? – Le pregunté sonriendo –

-Claro – Se encogió de hombros, él sabía que no iba a acceder tan rápido así que lo mejor era esperar –

Me dio un beso antes de salir de la cocina.