<•> Capítulo cuarenta y cinco <•>

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Capítulo dedicado a:

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💕 haizakamila

💕 Matuvia

💕 XimenaDeJackson

💕 libniana

💕 kartropskawaii

💕 Death_to_me_

💕 Bathory_Belial

💕 MarYMagia

Aún hay más... ❤😋

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—¿Eeh?

—Ya escuchaste —con mi brazo izquierdo, le prisioné la cintura-—. La otra vez, no pude recompensarte, pero ahora sí.

El simple tacto de mi mano derecha adentrándose en su buzo para dormir, ocasionó que se removiera. Seguramente él estaba igual o más nervioso que yo.

—Ey... Me da ve-verguenz- vergüenza.

—No me interesa.

No faltó mucho para que introduciera mi mano dentro de su ropa interior. Y era cierto, no había mentido con que se había hecho una depilación láser ahí abajo, pues su piel era increíblemente suave. Cuando estuve apunto de tocarle el miembro, me detuvo.

—Nooo, es que... —volteó a mirarme y en serio que morí por unos segundos al verle el rostro suplicante.

—No me vas a detener, precioso —le di un beso rápido en los labios, dejándolo más avergonzado de lo que ya estaba—. Así que, cállate y deja que Daddy te consienta.

Lo logré. Logré hacerlo gemir sólo con una vez que lo tocara, lo que hacía saber que era bastante sensible a cualquier toque.

En cuanto a mí, no tuve una batalla mental e interna con respecto a tocarlo, porque con ver que él lo estaba disfrutando mucho, me bastaba para continuar.

De inmediato, comencé a mover mi mano, aunque desde esa posición era bastante incómodo. Así pues, saqué su pene y sonreí al verlo. Debía ser sincero y admitir que tenía una herramienta bastante ¿linda? Sí, esa era la palabra que lo describía. Cuando estaba en la punta, hacía una ligera presión con mis dedos, por lo que el líquido preseminal comenzó a mojar todo y cuando bajaba, me encargaba de hacerlo lento y tortuoso. En cada uno de mis movimientos, me deleitaba de ver su rostro desesperado por mostrar cada una de aquellas sensaciones vividas.

—¿Te gusta? —susurré a su oído y él asintió con rapidez—. ¿Qué tanto?

—M-mucho... Ah...

Me sorpredió la manera en la que se sostuvo de mi cuello y me obligó a besarlo. No desaproveché la oportunidad y mientras estaba concentrado en el beso, incrementé el ritmo de mi mano.

Perfecta ImperFecciÓnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora