Capítulo 26: Ingvarr y Skaði

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Entonces los Ases se acercaron y mataron al gigante Thjazi dentro de los lindes del Asgard, y este combate alcanzó gran fama.

SKÁLDSKAPARMÁL

Al realizar trabajos para Einar, Loki comenzó a tener conexiones influyentes en Nueva York, no le costó más de dos semanas encontrar otro lugar para que ambos pudieran vivir, un lujoso Penthouse cerca de las oficinas del New York Times y también cerca del trabajo él.

La mudanza también se realizó en un solo día, Loki se aseguró de ello, cuando término fue al trabajo de Elena para recogerla y explicarle dónde y cómo se resguardarían de su tía.

En las dos semanas que pasaron después del ataque de Beatriz, Elena le había confiado la verdad a Kenna, necesitaba alguien que le advierta si es que por alguna razón sus tías decidieron intervenir en el trabajo. Al inicio Kenna no le creyó nada, pero Elena después de aquella explosión, había aprendido algunos hechizos simples y se lo demostró a su amiga, así ella accedió a ayudarla.

Ese día había sido vagamente tranquilo, considerando que era uno de los diarios más importantes del mundo, algún que otro artículo era importante y Elena se aseguraba que todo marche en orden.

—Elena —llamo Kenna, ella levanto la mirada—. Adrian ha venido por mí y yo...

—Ve con él, Loki va a venir por mí hoy, dijo que tenía una sorpresa así que lo voy a esperar.

—De acuerdo, nos vemos mañana.

Elena asintió y siguió trabajando hasta que por el comunicador su secretario le aviso que alguien había venido a verla, ella le preguntó el nombre y le dijo que era Sebastián Anderson.

—Puede pasar —aceptó ella y Sebastián apareció en su oficina.

—Hola Elena.

—Parece que te tomó mucho tiempo meditar una respuesta —bromeó Elena sonriendo.

—Elena yo quería disculparme, Beatriz...

—Tú no eres responsable de las acciones de esa mujer, aunque casi hace que pierda a mi hijo y mi propia vida en el proceso.

—Están por su cuenta —respondió Sebastián entregándole una carpeta con el logo de S.H.I.E.L.D.—. Son todas las acciones de tus tías desde hace veintitrés años, aunque me temo que no menciona a tus padres.

—Estoy segura entonces que mi hijo tendrá un abuelo presente —comentó Elena mientras abría la carpeta—. Gracias Sebastián.

—De nada —respondió Sebastián, Elena sonrió—. Tengo que regresar a la base, hay un proyecto en marcha sobre algo llamado del Teseracto, no tengo idea de que es, solo que es poderoso, planean hacer armamento con él, si Loki tuvo algo que ver con lo de Nuevo México sugiero que no intente nada más.

—¿Revelas asuntos confidenciales conmigo?

—Solo si veo que amenaza a mi familia.

—Se lo comentaré a Loki, estoy segura que no es nada —dijo Elena confiada, Sebastián asintió—. Quisiera que no vuelvas a aislarte así de nuevo, me gustaría mantener contacto contigo, por si en algún momento necesite ayuda, por si a Loki le ocurra algo.

—Siempre contaras conmigo Elena —sentenció Sebastián, ella asintió levemente—. Debo irme, están que me esperan.

Elena se despido y luego comenzó a leer todo lo que estaba en la carpeta, solo decía que S.H.I.E.L.D. le estaba dando protección por un evento importante que ocurrió cerca de su nacimiento, tenían datos de ella y de cada una de sus tías, guardó el documento en su bolso, como siempre arreglo su oficina y salió hacia el Lobby donde encontró a Loki.

Príncipes desterradosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora