MAYBE REAL ~Taehyung~

|Capítulo 15|

{EL REY CANGREJO}

TAEHYUNG

Hablaba de ella, definitivamente lo hacía. 

"Ariesen" repetí en mi mente embobado. Su nombre era tan bonito como ella.

-Ey, que te estoy hablando -parloteó Bétor mientras se levantaba para chasquear los dedos enfrente de mi rostro- Te he hecho una pregunta.

Yo le miré confundido. ¿Cuál era la pregunta? Me mantuve en silencio y le miré con cara de poker, una expresión que tenia totalmente dominada en situaciones incomodas como estas.

-No me lo puedo creer -murmuró mirando hacia las máquinas incrédulo- Quizá... -susurró entonces mirándome sorprendido.

Repentinamente y sin darme tiempo a reaccionar se levantó y se colocó a mis espaldas.

-Pero que... -logré expresar antes de sentir un dolor abrasador en las sienes con el tacto de sus dedos corazón. Era como si repentinamente un rayo hubiera atravesado mi cabeza de un lado al otro y se hubiera quedado en mi cerebro de vacaciones. Un grito de dolor brotó de lo más profundo de mi garganta.

-Midas... -susurró Bétor justo cuando apartó sus manos. Sentí mi cerebro chamuscado, todo a mi alrededor me daba vueltas.

-¡Seguridad! -logré gritar antes de sentir como todas mis fuerzas me abandonaban.

~~~~~~

El susurro de una melodía me conquistaba el alma cuando mis sentidos volvieron en si. Un roce mimoso acariciaba acompasadamente mi cabello y rostro, haciéndome sentir relajado. La melodía continuaba, susurrada como si fuera obra de pájaros. Noté las yemas de unos dedos delinear mis orejas y una dulce risa interrumpir la melodía.

Hacia mucho tiempo que no me sentía tan relajado, parecía un sueño.

Parpadeé un par de veces para acostumbrar mi visión a la casi inexistente luz y me quedé helado al apreciar tal imagen.

"¿Estoy en el cielo?" me pregunté al ver esos ojos esmeralda observarme desde la altura. Su rostro, había adoptado una mueca de sorpresa, haciendo que una pequeña y casi imperceptible arruguita se formara en su frente.

Noté que se sonrojó y apartó la mirada y su mano avergonzada.

-Estas en Unelma, no en el cielo... -susurró.

Mierda, ¿lo había dicho en alto?

Me levanté ligeramente incomodo por mi comentario, ¿en que pensaba?

Una punzada de dolor atravesó mi sien. Bétor... Todo lo que había pasado llegó de golpe a mi mente.

-Ha pasado algo -mencioné observándola con seriedad. Ella me miró preocupada.

-¿Tiene algo que ver con que hayas aparecido aquí antes de lo normal y desmayado?

-Si -asintió interesada con lo que estaba por contarle- Hoy... Me ha venido alguien a visitar mientras estaba practicando con los chicos. Se hacía llamar Bétor y era muy raro. Sabia tu nombre y esto de los sueños. Repentinamente se ha cabreado y me ha atacado.

-¿Atacado? ¿Estas herido? -cuestionó inquieta inspeccionando cada parte de mi cuerpo.

-No, tranquila. Solo ha hecho algo raro en mi cabeza -le expliqué mientras colocaba mis manos de la misma forma en la que él lo había hecho- Después susurró algo... No recuerdo...

-Quizá fuera Morfeo -señaló Ariesen.

-No lo creo, no encajaba en absoluto con la descripción que me diste -observé- Además, Hoseok y la recepcionista pudieron verle, tu me contaste que tus amigos no pudieron -asintió de acuerdo con mi punto de vista y suspiró.