{EL HOMBRE LOBO}
TAEHYUNG
Entreabrí mis ojos notando como todo mi cuerpo pesaba y una punzada de dolor en mi pierna izquierda empañaba mi vista.
Me incorporé con dificultad con una mueca en mi rostro y llevé mi mano a la zona punzante. Esta se llenó de sangre y al dirigir mi mirada hacia la herida me quedé en shock. No es que la sangre me diera excesivo asco, pero la cantidad que rodeaba a aquel mordisco en mi pantorrilla derecha era exagerada.
Un gruñido a mi izquierda hizo de gritara y saltara del susto.
Un gran lobo negro de ojos azul eléctrico penetrantes chirriaba sus dientes a escasos metros de mi, dejando caer alguna baba por su mentón. Su hocico estaba contraído y estaba preparado para tacar en cualquier momento.
Me deslicé como pude por el suelo en sentido contrario, sin poder evitar un chillido de dolor al arrastrar mi adolida pierna.
Recordé lo que había ocurrido, yo estaba observando enfurruñado y aburrido como Ariesen coqueteaba con Namjoon hyung cuando algo atrapó mi pie, haciendo que cayera y perdiera el conocimiento al golpear mi frente con algo.
El lobo volvió a rugir y comenzó a acercarse con pasos lentos y amenazantes. Miré a mi alrededor desesperado pero parecía que me había traído a una cueva, una cuya salida estaba imposible de alcanzar por el lobo que amenazaba con atacar. La escasa luz del atardecer nos iluminaba, dándole un aire de penumbra al ambiente.
Llegué al límite del reducido espacio golpeando mi cabeza con una piedra, comprobando que debía haber sido en ese punto donde me había golpeado al caer inconsciente.
Lágrimas de impotencia comenzaron a inundar mis ojos y no dudaron en abandonarlos cuando observé como unas sombras negras comenzaban a aparecer y a amontonarse detrás del lobo. Pesadillas. Estaba perdido.
El lobo dió un último rugido en mi dirección antes de retroceder con parsimonia entre las pesadillas, las cuales comenzaron a avanzar en mi dirección.
Se acabó, este era el fin.
-No, no lo es -susurré para mi mismo.
Alcancé una piedra que tenía cerca y se la lancé al grupo de seres espectrales con torpeza. Estos, sin inmutarse, fueron atravesados por la piedra pero sin desaparecer ni uno solo y continuaron avanzando todos al mismo tiempo.
"Aguanta" susurró aquella voz entonces, creando en mi la tranquilidad suficiente como para que por unos segundos pensara en frió y recordara las palabras de Ariesen: "Esos seres que nos atacaron, las pesadillas, se desvanecen con ser atravesadas por madera, por eso aquí todos utilizan esos palos y las casas están hechas de ese material."
Una bombilla se encendió en mi mente. Metí mi mano dentro del Hanbok rezando por que el abanico continuara allí escondido y suspiré al notar su tacto.
Las pesadillas estaban cerca, demasiado.
Me apresuré a hacer pedazos el abanico de madera y, cuando conseguí el tamaño adecuado, comencé a lanzarles trozo por trozo. por cada trozo que lanzaba, todos las pesadillas que atravesaba eran evaporadas con una neblina negra. Sin embargo, ya solo me quedaban apenas dos trozos y todavía 3 docenas de criaturas se arremolinaban a mi alrededor.
-¡Taehyung! -mi corazón dio un vuelco al reconocer aquella voz que me llamaba.
-¡Ariesen! ¡No entres! -me apresuré a gritar ahora preocupado por su salud olvidado totalmente la mía.
La mayoría de las Pesadillas se dieron media vuelta en dirección de donde había provenido la voz.
-¡No! -grité disgustado.
ESTÁS LEYENDO
MAYBE REAL ~Taehyung~
FanficAriesen, una joven estudiante de instituto, vive en su propio mundo de fantasía, sin prestar atención al mundo real. Pero, ¿Hasta qué punto es su mundo imaginario? Sus sueños, protagonizados por los 7 miembros de su boyband preferida (BTS), cada vez...