O C H O

3.2K 376 15
                                    

Capítulo ocho: Maripositas rebeldes, escasa vida amorosa y casi desnudo.

Mariposas volaban alrededor de mi estómago.

En los últimos días Jungkook me había estado enviando mensajes de texto. Me hacía sonreír, reír, sonrojar, volver a sonreír, algo que hacía que mi corazón fuera más felíz de lo que ya era. No podía evitarlo pero me sentía de esa manera; después de todo, él era como mi "enamoramiento" desde hace tiempo. No me importaba, si le gustaba o no, el hecho de que él estuviera hablándome era suficiente para ser completamente felíz. Me gustaba su personalidad, su apariencia, él era perfecto a mis ojos.

Y mañana era su fiesta.

Y él quería que yo estuviera allí.

Aunque tenía pensado ir, incluso si el no me invitaba. Ya que la fiesta era abierta y todo el mundo que quisiera  podía ir, pero el hecho de que me hubiera preguntado si quería ir. Era lo mejor del mundo.

Y no exageraba.

Pero, a pesar de que parecía ser diferente a los otros chicos populares: diferente a Namjoon, Hoseok o Jackson. Jungkook podría tener sus propios pecados como cualquier otro chico. Seguramente bebía; y en las fiestas en general, solía haber un monton de cosas ilegales. Yo no bebía ni nada de eso, así que podía ser que aunque me hubiera invitado a la fiesta podía también ignorarme aunque asistiera.

— Hola. —dijo una vos profunda que escuchaba todos los días.

Me dí la vuelta para hacerle frente a Hoseok, que estaba apoyado en el casillero junto al mío; llevada una sudadera gris, unos pantalones negros y unas zapatillas a conjunto con la sudadera. No podía dejar de admitir que él tenía un gran estilo respecto a la ropa; todo le quedaba bien.

Hoy estaba de buen humor por lo que sonreí ampliamente.

—Hola, ¿qué pasa?

Me dio una mirada extraña, como si estuviera actuando como un loco o algo así. No lo culpaba, ya que por lo general, le daría una expresión aburrida o una cara de póquer. Pero es que aveces su presencia me molestaba, aunque ahora mismo, no. Es decir, si no fuera por sus rasgos, me gustaría hablar con él, con facilidad, como cualquier otra persona.  Excepto, que yo iba a caer en su juego. Y sí, por si se preguntaban yo sólo había salido con un chico en toda mi vida.

Por eso no hablaba con nadie sobre mi vida amorosa, y con Jimin casi nunca. Él sólo quería hablar de chicos, chicos, chicos, de como se veían y.... eso es todo. Dudo que alguna vez pudiera tener la oportunidad de conseguir al chico que me gusta.

Y estaba bastante seguro de que jungkook esta en esa lista.

Es decir, él sólo es amable conmigo. ¿por qué estaría interesado en mi?. Soy malo en los deportes, ni siquiera puede haber un juego sin que me caiga de culo. Me gustaría tener una nota alta en todas las materias, excepto por supuesto en gimnasia. Y la mayoría de los chicos se sienten atraído a los que realizan deporte.

Bueno, lamento decepcionarlos, pero yo no soy uno de ellos.

Hoseok, se rió ligeramente. — Te vez inusualmente felíz.

Me quedé en silencio, esperando a que agregue otra línea de las suyas, o algo cursi, pero no lo hizo. Simplemente se rasco las parte posterior de la cabeza, y por cierto, se vio tierno con ese gesto tímido.

— Tengo un partido de baloncesto muy importante está noche y me preguntaba si te gustaría venir y verlo.....

La forma en la que me lo pidió, fue una de las formas mas amables de las que alguna vez me habló.

El Playboy es mi niñero © HopeV Donde viven las historias. Descúbrelo ahora