Evan: Almas Inmortales. [TERMINADA]

Ríndete.

Eran las 2:00 am y Evan dormía, al igual que todos ya que estában exhaustos.
El ambiente era tranquilo, sin señales de peligro que puedieran terminar con su sueño o molestarlos. Pero Evan comenzaba a moverse inquieto aunque siendo ya demasiado tarde los demás no podían despertarse por el exceso de cansancio.
Evan por su parte se movía, comenzaba a tener pesadillas y sudaba frío...

[En sus sueños]
Se encontraba en un edificio abandonado, con muchas habitaciones grandes y escaleras de diseño de caracol. Le atemorizaba el aspecto en el que yacía este lugar; sangre por todas partes, vidrios rotos, telarañas, algunas gritetas por techos a punto de caer.
Caminaba confundido y asustado, ya que la sangre en las paredes lo guiaban al lugar, temía que algo malo fuese a suceder...
Por si fuera poco todo se encontraba tranquilo, no se escuchaba nada más que sus pasos.
Miraba al gran ventanal y la vista era aterradora llovía muy fuerte y había neblina que por desgracia no se veía nada.

Subió y subió las escaleras pero sólo encontraba infinidades de puertas y pasillos que lo confundían, no sabía que significaba su sueño..

"Deberías rendirte"
[Leyó]

De pronto algo pasó corriendo por una esquina del pasillo, confirmó que algo lo ha estado siguiendo que hasta le puso su piel de gallina.
Comenzaba escuchar ruidos y gritos desgarradores a fuera del edificio que se azomó y de nuevo no podía mirar nada.
Luego un enorme estruendo de una puerta se escuchó.
Evan en silencio se escondió en un lugar pero entre la esquina miraba una gran bestia que salía de esa puerta, era como aquel hombre que estába en la casa de su amigo Frank,
!Sí!, el de cuernos grandes y bañados de sangre, piel obscura y garras filosas.

Evan: [susurró] Es él...

Luego de eso sintió una respiración agitada detrás de él seguido de un gruñido, que sin pensarlo salió corriendo de ahí.
Subió más escaleras y al voltear por detrás esa critatura lo estába siguiendo con un odio en sus ojos.
Entre más subían la vista hacia abajo se tornaba obscuro.

"Ríndete ahora" 

Evan seguía corriendo hasta llegar a una salida de emergencia que conectaba a un puente para ir a otro edificio.
Ahora la lluvia no era agua sino sangre, la vista era roja y aún más aterradora.
Evan se estába cansando trataba de que él no lo alcanzara ya que corria a una velocidad impresionante...

-Dejame en paz!! [Dijo Evan]

La criatura solo reía distorcionadamente, llegaban a la mitad del puente y estuvo a punto de cruzar pero en un mal paso el puente se cayó dejándolos a los dos colgados y esté abajo de Evan.
Le gruía con odio, seguía escalando y Evan desesperado intentando safar su pie atorado en una franja sólo gritaba.
La criatura estába a nada de tocar a Evan pero por suerte pudo subir y el puente cayó completo, Evan miraba como caía. Pero luego de eso alguien lo tomó y lo dejó inconsciente.

Despertó atado en una gran telaraña de venas sangrientas y más sangre a su alrededor.
Ya no era nada nuevo para él, sólo miraba por todos lados a esperar a quién lo secuestró.

-"Quiéro que te rindas de una vez por todas, Evan"

Una voz espantoza, distorcionada y obscura provenía de las paredes, Evan estába confundido y asustado.
Aunque sólo fuese una pesadilla.

Evan: [Cerrándo los ojos] Es una pesadilla, es una maldita pesadilla y nada más.
-Nada de ese Evan, tu cuerpo está moribundo por un momento y nadie se ha dado cuenta. [Rió]
Evan: Quién eres y por qué diablos repites ríndete cada vez!
-Porque eso es lo que quiero, Evan rindete!
Date por vencido, aceptalo eres un simple humano no puedes ser rey de nada.
Evan: No voy a rendirme jámas Rommel.
-He sido paciente contigo niño mimado, última vez! Rindete maldita sea.
Evan: Y si no lo hago que...?